Elegido Papa
Rolando Bandinelli
naci� en Siena y curs� estudios de leyes con el erudito
italiano Graciano, fundador del Derecho can�nico. Fue profesor
en la Universidad de Bolonia y sus escritos jur�dicos y
teol�gicos le proporcionaron fama de sabio. Nombrado cardenal
en 1150, lleg� a ser canciller papal en 1153. Ese mismo a�o
fue enviado como representante pontificio para negociar el
Tratado de Constanza con el emperador Federico I Barbarroja.
Tras morir el papa Adriano IV en 1159, Bandinelli le sucedi�
con el nombre de Alejandro III,
Su
elecci�n fue compleja, por cuanto una minor�a del partido
imperial eligi� al antipapa V�ctor IV. Federico Barbarroja
convoc� a ambos, pero al no
presentarse Alejandro, fue confirmado V�ctor, que se instal�
en Roma. Por su parte, Alejandro excomulg� al emperador
y al antipapa y liber� a los s�bditos del emperador del
juramento de fidelidad. |
Alejandro III |
Federico
Barbaroja
Para Alejandro fue el principio de un
largo per�odo de sufrimiento, contrastes y traslados que le llevan
por varias ciudades de Italia y de Francia.
La
cuesti�n plante� un enfrentamiento a escala europea, por cuanto
Alejandro III recibi� el apoyo Luis VII de Francia y Enrique II de
Inglaterra en el s�nodo de Tolosa (1160), lo que promovi� a su vez
las simpat�as de buena parte de los estados europeos. Por su
parte, V�ctor III ten�a de su parte al emperador alem�n y a los
estados controlados por �ste, excepto al arzobispo de Salzburgo y
algunos obispos alemanes. La muerte del antipapa en 1164 no
solucion� el problema, al ser elegido Guido de Cremona, Pascual
III (1164-1168), como su sucesor.
Mientras tanto, en Inglaterra se
produjo el enfrentamiento de Tom�s Beckett con el rey ingl�s
Enrique II por la pretensi�n de �ste de controlar la Iglesia de
Inglaterra. Alejandro III apoy� al arzobispo de Canterbury.
Desterrado Tom�s Beckett, su asesinato en 1170 le granje� las
simpat�as del pueblo ingl�s y provoc� su canonizaci�n y la
excomuni�n del rey ingl�s, s�lo levantada tras la promesa de �ste
de respeto al papel de la Iglesia en Inglaterra y la peregrinaci�n
a la tumba de Beckett.
En
Europa, el enfrentamiento entre el Papado y el Imperio continuaba,
esta vez, en suelo italiano. La Liga Veronesa apoy� a Alejandro
III, lo que le permiti� regresar a Roma en 1165. Sin embargo, hubo
de huir en 1167 por la presi�n de Federico Barbarroja, quien
instal� en el solio pontificio a Pascual III y se hizo coronar por
�l. Una epidemia afect� de lleno a los partidarios y ej�rcito
imperiales, falleciendo numerosos nobles y diez obispos, entre
ellos Reinaldo Dassel de Colonia, lo que debilit� la posici�n del
emperador. Adem�s, la Liga Veronesa acrecent� su fuerza al
transformarse en Liga Lombarda, lo que oblig� al emperador a
iniciar un t�mido acercamiento a su rival.
Federico Barbaroja |
Los
intentos de paz quedaron frustrados cuando Federico Barbarroja
reconoci� al antipapa Calixto III (1168-1178) e inici� una
nueva expedici�n contra suelo italiano, siendo esta vez
derrotado en Legnano (1176) y obligado a firmar la paz de
Venecia en 1177.
Como resultado, al emperador le fue levantada la excomuni�n
tras reconocer como papa a Alejandro III y al devolver a la
Santa Sede los territorios italianos. Por su parte, el
antipapa Calixto III renunci� a su cargo, si bien la bicefalia
de la Iglesia continu� al elegir la nobleza romana al antipapa
Inocencio III (1178-1180) como su sucesor.
Alejandro III aun hubo de enfrentarse a la nobleza romana,
siendo obligado a exilarse hasta su muerte en 1181. |
Un a�o
antes de su muerte, convoc� y celebr� el
III Concilio de Letr�n (1179), en
los que se aprobaron 27 cap�tulos, el m�s importante de los cuales
es �Licet de vitanda�, que establec�a que el Papa fuera
elegido exclusivamente por los cardenales y con la mayor�a de los
dos tercios de los votos. En otro concilio que se reuni� en Alby,
Francia, conden� la secta de los Albigenses, quienes predicaban
contra algunos dogmas, contra la autoridad del papa y contra la
corrupci�n del clero
Bibliograf�a
Enciclopedia GER |