¿Qué es la vida cotidiana?
La vida cotidiana es la suma de actividades que realizan las personas cada día en su entorno familiar, en la vecindad, en el trabajo y en la escuela. Muchas de las acciones que realizamos a diario y que hacemos casi sin pensar son parte de la vida cotidiana: dormir, levantarse, comer, ir a la escuela, hacer labores del hogar, etc.
Son actividades rutinarias, es decir, acciones que hacemos con pocas variaciones todos los días. Su contraste vendría a ser las temporadas de vacaciones, o situaciones de excepción, como el encierro forzoso creado por la pandemia de Covid-19.
Sin embargo, cuando una situación se prolonga, como las vacaciones muy largas o el aislamiento, los humanos tendemos a generar nuevas rutinas y establecer una nueva cotidianidad, con sus actividades repetidas día a día.
Esto no quiere decir que la cotidianidad sea negativa: repetir actividades nos permite perfeccionarnos en ellas y nos genera cierta seguridad emocional y material, por lo que no se debe desdeñar la vida cotidiana.
Elementos de la vida cotidiana
Personas
La vida cotidiana es sobre todo un continuo interactuar con los que nos rodean: nuestros padres, hermanos y hermanas; los amigos, vecinos, empleados y comerciantes de nuestra manzana o vecindad, los pasajeros del transporte que tomamos para ir a la escuela, o los peatones con los que nos cruzamos si vamos caminando; los maestros y compañeros de estudios, etc.
Cotidianidad y rutina están íntimamente asociadas y es por eso que no es raro que todos los días veamos a las mismas personas, no solo en nuestra casa sino también en la calle.
Actividades domésticas
Todos los días realizamos una serie de pequeñas actividades que parecen poco importantes, pero sin ellas es posible que no nos sintamos cómodos: despertar, cepillarse los dientes, bañarse, vestirse, desayunar, preparar los útiles escolares, si estás estudiando, o las herramientas de trabajo, si eres mayor.
Caminar, asistir a clases, conversar con los amigos y compañeros; volver a casa, comer, hacer las tareas, ayudar con las labores domésticas, etc. A diario cumplimos con un programa de actividades no escrito, pero que conocemos a la perfección.
Los adultos tienen otro conjunto de actividades cotidianas, que incluyen preparar a los niños para la escuela, hacer comida, lavar ropa, hacer las compras, limpiar la casa, ir a trabajar, etc.
Trabajo y estudio
Con excepción de las vacaciones generalmente nuestro tiempo, la mayor parte de la semana, está condicionado por una de estas dos actividades: trabajar o estudiar.
En promedio dedicamos un tercio del día a una de estas actividades, y un poco más a ir y venir (el tiempo que pasamos en el tránsito o caminando), y en actividades como las tareas.
Aseo personal y cuidado del cuerpo
Nos cepillamos los dientes varias veces al día, usamos agua y jabón para bañarnos y mantener limpias las manos; lavamos nuestra ropa y además mantenemos limpia nuestra vivienda. Hay una gran industria humana en torno a la limpieza y el cuidado personal y de nuestros hogares.
Durante la pandemia de Covid-19 nos acostumbramos a limpiarnos regularmente las manos con gel, a mantener una distancia prudencial entre personas y a usar tapabocas para salir de la casa y en cualquier espacio público.
Descanso y recreación
Dedicamos un tercio de nuestra vida, ocho horas diarias, a dormir y permitir que nuestro cuerpo se recupere. También dedicamos tiempo de nuestra cotidianidad a jugar, leer, ver televisión o conversar con los amigos y amigas. El ocio es parte importante de nuestra vida cotidiana.
Ejemplos de actividades de la vida cotidiana
Cocinar
Es una actividad ineludible de la cotidianidad, hacer un menú, disponer de los ingredientes y preparar la comida. Generalmente es una actividad de los mayores, aunque en los desayunos, meriendas y cenas los niños pueden participar.
Lavar
En los hogares continuamente, sobre todo en las mañanas, se realiza alguna actividad de limpieza: pisos, baños, ventanas, muebles; lavado de ropa, lavado del menaje de cocina. La limpieza y desinfección de nuestros hogares es una labor fundamental y de todos los días.
Estudiar
Asistir a clases ocupa un tiempo fundamental de nuestras vidas: desde el jardín de infantes hasta los estudios universitarios, pasamos mucho tiempo yendo y viniendo de centros educativos, estudiando y pasando tiempo con compañeros de clase. Aunque hoy en día se haya puesto de moda la educación virtual.
Hacer compras
Forma parte de nuestra cotidianidad: comprar alimentos, productos de limpieza, etc. El consumo de productos ocupa una parte notable de nuestra vida cotidiana.
Leer la prensa o ver los noticieros
Mantenerse informados sobre lo que pasa en nuestra comunidad, ciudad, país y en el mundo, es parte de la vida diaria. En algunos hogares se compran diarios y revistas, y en una gran mayoría se ven noticieros en las mañanas y en las noches.
Comer en familia
Hasta hace algunas décadas era normal que las tres comidas se hicieran en familia. Actualmente, debido a la diferencia de horarios laborales y escolares, las familias solo logran reunirse durante la cena. Es un hábito cotidiano que favorece la comunicación y fortalece los lazos afectivos.
Jugar
El juego físico y virtual es parte esencial en la vida de los seres humanos, permite descargar tensiones, comunicarse, y cuando se trata de deportes, de ejercitarse físicamente también.
Dormir
Como mencionamos más arriba, se trata de una actividad que debería tomar al menos un tercio de nuestra vida, para mantenernos saludables y descansados. En determinadas edades, al comienzo y al final de la vida, al sueño nocturno se agregan las siestas por la tarde, para recuperar energías.
Usar equipos digitales
Las viviendas hoy en día están cubiertas por distintas pantallas y monitores: el televisor, los ordenadores, teléfonos móviles y tablets, entre otros, están presentes cada hora del día que pasamos despiertos y se han entrelazado íntimamente con nuestra vida cotidiana.
Encargarse de las mascotas
Perros, gatos y otros animales domesticables son parte de la vida cotidiana de muchas familias en el mundo. Duermen con nosotros, jugamos con ellos, pero también los sacamos a pasear, los alimentamos y llevamos al veterinario cuando hace falta. Generalmente son un miembro más de la familia.
Ejemplos de problemas de la vida cotidiana
Fallas en los servicios básicos
Son parte de la vida cotidiana en muchas partes del mundo los problemas con el suministro de agua, o la irregularidad con servicios como la electricidad o el gas. Son también parte de la charla diaria el aumento del costo de los mismos, o el uso irracional por parte de alguno de los miembros de la familia.
Desencuentros en los horarios familiares
Los diferentes horarios laborales de los padres y los horarios escolares de los hijos, con frecuencia obstaculizan el contacto entre los miembros, afectando los lazos familiares.
Tráfico excesivo
La vida cotidiana en las grandes ciudades está signada por los problemas con el tránsito. Colas, atascos y dificultades en el transporte, hacen que parte de nuestra vida diaria la pasemos atrapados por el tránsito.
Exceso de uso de los equipos digitales y las redes sociales
La versatilidad de los teléfonos móviles (para jugar, para ver series, para intervenir en varias redes sociales) y la presencia cada vez más global de internet ha hecho que pasemos demasiado tiempo atentos a lo que pasa en las pantallas, mientras cada vez estamos más desconectados del mundo físico y las personas que nos rodean.
Por otro lado, las redes sociales virtuales han creado nuevos peligros, como los depredadores sexuales de las redes, los estafadores y los que hacen bullying por internet.
Soledad
La vida cotidiana actual nos hace sentir acompañados casi todo el tiempo, por nuestros familiares y amigos, por los compañeros de clases, y por los que nos contactan a través de las redes. Sin embargo, el sentimiento de soledad y aislamiento es uno de los más comunes, y puede conducir a estados como la depresión.
Falta de tiempo para descansar
La vida agitada y llena de exigencias, sumada a estímulos constantes como los del teléfono móvil, hacen que muchas personas duerman menos de las horas necesarias para recuperarse, y que el sueño no sea lo suficientemente profundo para ser reparador.
Consumo irracional de productos
Se ha convertido en parte de la vida cotidiana el continuo bombardeo de publicidad y la invitación permanente a consumir productos, muchas veces innecesarios, desde modelos costosos de teléfonos hasta dulces, ropas o juegos de vídeo.
Alto costo de la vida
La inflación, el continuo aumento en los precios de los productos de primera necesidad, es un problema cotidiano en muchas sociedades, y tema constante en todas las familias.
Conflictos de convivencia
La relación diaria entre individuos, sobre todo en grupos familiares, lleva inevitablemente a roces y enfrentamientos que es necesario resolver del modo más armonioso posible.
Problemas de vivienda y de estabilidad
Hoy en día el problema de la vivienda, de su adquisición y de sus costos, es uno de los problemas cotidianos más comunes para los grupos familiares, sobre todo si se encuentran en régimen de alquiler.