Zlatan Ibrahimović no tuvo una infancia fácil, pero gracias al deporte agrandó su autoestima hasta límites insospechados. A pesar de su gran estatura se movía con la sutileza de un bailarín y, gracias a su sabiduría en las artes marciales, fue capaz de marcar goles inigualables. Su calidad y visión de juego le situaban entre los mejores delanteros de su época, pero su carácter arrogante le impidió coronarse con la Champions y destacar en un Mundial. Sus críticos dirán que solo es un jugador de highlights, pero cuando ves esos golazos es imposible no admirar su juego. Presuntuoso y narcisista como pocos, Zlatan se ha convertido en un jugador de culto. Un artista incomprendido que moldeó cuerpo y mente para ser una Leyenda del Fútbol. Relájate, ve a por tu comida favorita y prepárate para recordar la carrera del karateca del fútbol. Hoy, en Memorias del Fútbol despedimos al futbolista con más autoestima de la historia.
ZLATAN IBRAHIMOVIĆ ⚽ El Acróbata Rebelde que metía Golazos
Los duros inicios de Zlatan
Zlatan Ibrahomović nació el 3 de octubre de 1981 en la ciudad Sueca de Malmö. Creció en el barrio de inmigrantes de Rosengård, donde desarrolló una infancia muy problemática y en la pasó mucha hambre. Su padre era de un bosnio alcohólico atormentado por la guerra y su madre una joven croata que trabajaba todo el día fuera de casa. Con solo 2 años Zlatan sufrió el divorcio de sus progenitores y a lo largo de su niñez padeció las burlas de sus compañeros. Al tamaño de su nariz y su baja estatura, se unió su ceceo al hablar, convirtiéndose en una victima del acoso escolar.
Aquella etapa endureció el carácter del joven Zlatan, que con los años aprendería a defenderse y a descargar su frustración a través del deporte. Practicó boxeo y obtuvo el cinturón negro de Taekwondo, aunque su verdadera pasión era jugar al fútbol con sus amigos. Comenzó a practicar a la edad de 8 años y con 13 accedió a la cantera del Malmö, el mejor equipo de la ciudad. Acostumbrado a la vida del gueto y a robar bicicletas, Zlatan tuvo una adaptación difícil y se sentía muy distinto a los demás. A los 15 años estuvo a punto de dejar el fútbol para ponerse a trabajar, pero le convencieron de que tenía un talento natural que no podía desaprovechar. Un año más tarde se convirtió en el jugador más alto del equipo y, empoderado por su nuevo físico, propinó un cabezazo a un compañero. Los padres del chico agredido pidieron su expulsión inmediata, pero el club le dio una nueva oportunidad.
Malmö FF
El 19 de septiembre de 1999 Zlatan debutó con el primer equipo y, dos semanas después anotó su primer gol. Esa temporada jugaría 5 partidos más, pero tras una penosa temporada, el Malmoe acabó descendiendo tras 64 años en la élite. En la segunda división sueca Ibrahimović se hizo con el puesto de titular y, con 12 goles en 26 partidos se convirtió en el máximo goleador del equipo para retornar a la máxima categoría. La calidad de Zlatan era indiscutible pero su descarado juego llevaba consigo un complicado carácter. A pesar de todo comenzaron a llegar ofertas del extranjero y en el año 2000, el Arsenal le invitó a Londres para cerrar su fichaje. Una vez allí, Wenger dijo que quería verle en directo antes de firmar el contrato, pero Ibrahimović se mostró tajante: "Zlatan no hace pruebas, no he venido a perder el tiempo".
Ajax
En julio de 2001 Ibrahimović fue traspasado al Ajax de Ámsterdam, que desembolsó casi 8 millones por su fichaje. El sueco abandonaba el Malmö tras marcar 18 goles en 47 partidos y se convertía en el número 9 del club más grande de Holanda. Casi desde el primer día se hizo con el puesto de titular y tras marcar 9 goles en 33 partidos, conquistó el doblete de Liga y Copa de los Países Bajos. Ese mismo año, Zlatan debutó con la selección de Suecia y en 2002 logró ganarse un puesto en la lista del Mundial. En Japón participó en dos partidos, pero su selección acabó apeada por Senegal en octavos de final.
El curso siguiente ganó la Supercopa local y debutó a lo grande en la Liga de Campeones. Con 5 goles de Zlatan el Ajax logró llegar a los cuartos de final, donde sería apeado en el último minuto por el Milan, que a la postre sería el futuro campeón.
Con 21 goles en 42 partidos, Ibrahimović completó su mejor campaña en Ámsterdam y comenzó a llamar la atención de los grandes clubes europeos. El sueco permaneció un año más en el Ajax, con el que se despidió ganando su segunda Liga. En total, Zlatan firmó 48 goles en 110 partidos con el Ajax.
Eurocopa 2004
El atacante sueco destacó en la Euro de Portugal, donde logró anotar un tanto imposible que acabó provocando la eliminación de Italia. El "pacto" nórdico del último partido metió a Suecia en cuartos de final, donde se midió a la selección de los Países Bajos. El partido acabó sin goles y los escandinavos cayeron en la tanda de penaltis, con Ibrahimovic mandando un lanzamiento a las nubes.
Juventus
La gran Eurocopa de Zlatan aceleró el interés de la Juventus, que pagó 19 millones de euros por su fichaje. Fabio Capello veía en su figura al heredero de Van Basten y el sueco acabó cumpliendo las expectativas de su nuevo club. En su primera temporada firmó 16 goles y se convirtió en un activo importante para que la Juve ganase el título de Liga. En su segundo año ganó su segundo Scudetto, aunque esta vez su aportación goleadora no fue tan fructífera, 10 tantos en 47 partidos.
Durante sus dos temporadas en Turín, la Juve no pasó de los cuartos de final en la Liga de Campeones y Zlatan acabó saliendo del club tras el escándalo de manipulación de designaciones arbitrales, conocido como Calciopoli. Las sanciones provocaron que el equipo bianconero fuese desposeído de las dos últimas ligas y provocó un inexorable descenso de categoría. La Juventus no tuvo más remedio que traspasar a Ibrahimović, que tras marcar 26 goles en 92 partidos ponía rumbo a Milán.
Inter de Milán
El Inter pagó 25 millones de euros por el traspaso del delantero sueco, que antes de instalarse en el Giuseppe Meazza acudió a jugar su segundo Mundial en Alemania. Suecia volvió a caer en octavos de final tras perder frente a los anfitriones y, aunque todavía no lo sabía, Ibrahimović se despedía de la Copas del Mundo sin poder marcar en la fase final de un Mundial.
A su vuelta, Zlatan comenzó su historia como neroazzurro y se reivindicó marcando 15 goles, ganando Supercopa y la Liga italiana. Su rendimiento en el Inter siempre fue en aumento, formando una gran dúo con el brasileño Adriano y marcando 66 goles en 117 partidos jugados. Con la llegada de Mourinho en la 2008-2009, Ibra realizó su mejor temporada, anotando 29 goles en todas las competiciones y proclamándose máximo goleador del Calcio. Sin embargo sus éxitos en Italia no tuvieron réplica en la Champions, donde los interistas cayeron por tercer año consecutivo en octavos de final. En sus 3 años en el club neroazzurro conquistó 5 títulos, 3 Scudettos y 2 Supercopas italianas.
FC Barcelona
Zlatan estaba alcanzando el mejor momento de su carrera y en el verano de 2009 fue reclamado por el mejor equipo del momento. El Barcelona de Guardiola acababa de conseguir el triplete y lo escogió como su nuevo delantero centro. Los culés pagaron 46 millones de euros más el pase de Samuel Eto'o para vestirlo de azulgrana y con un valor de más de 70 millones, Ibrahimović se convertía en el jugador más caro de la historia del club azulgrana hasta fecha.
Sus inicios en el club catalán fueron inmejorables, ganando la Supercopa de España, la Supercopa de Europa y marcando en cinco jornadas consecutivas. La técnica y contundencia de Zlatan le sentaba como un guante al Tiki Taka culé, que culminó el Sextete ganando el Mundial de clubes, liderando la Liga y alcanzando las semifinales de la Champions. La obsesión del Barça era llegar la final del Bernabéu, pero en su camino se cruzó precisamente el Inter de Mourinho. Los italianos lograron superar al Barça por 3-1 en Italia y, consiguieron el pase a la final tras perder por la mínima en Barcelona.
Aquella decepción terminó por romper el vínculo entre Zlatan y Guardiola, que prefirió atender la petición de Messi para jugar en las zonas más centradas del ataque. El Barça acabó ganando la Liga, pero Ibrahimović se vio desplazado y acabó chupando banquillo. Su situación con el entrenador se volvió insostenible y, pese a marcar 22 goles en 66 partidos, hizo las maletas de regreso a Italia.
AC Milan
En agosto de 2010, Ibra se fue cedido al Milan, que se comprometió a pagar 24 millones de euros por su traspaso a final de temporada. En su primer año, ganó el Scudetto y en su segunda temporada marcó 28 goles que le convirtieron en el máximo goleador del Calcio. En sus dos años como rossonero, tampoco tuvo suerte en la Champions, pero marcó 56 goles en 85 partidos y se transformó en un ídolo milanista.
PSG
Tras participar en la Eurocopa de 2012, el PSG pagó 20 millones por el traspaso de Zlatan, que pasó a convertirse en el fichaje estrella del nuevo y millonario proyecto parisino. El sueco se hinchó a marcar goles desde su primera temporada y aportó el carácter y la experiencia necesaria a un club con hambre de títulos. En sus cuatro años en París, Ibrahimović marcó 156 goles en 180 partidos, se convirtió en el máximo goleador histórico del club y levantó la friolera de 12 títulos. En Francia ganó otras cuatro ligas consecutivas y batió todos sus registros goleadores, firmando 50 dianas y prácticamente un gol por partido en su última temporada. Pese a los progresos del club, ni el PSG ni Zlatan pudieron trasladar sus éxitos en Europa, donde los franceses y el sueco continuaban fracasando año tras año.
Leyenda de Suecia
Ibrahimović tampoco fue capaz de clasificar a Suecia para el Mundial de 2014, después de protagonizar un legendario duelo con Portugal en la repesca. El sueco marcó marcó dos goles que hicieron soñar a su país, pero el Bicho se destapó con 4 goles que decantaron el global de la eliminatoria. Tras participar en la Euro 2016, Zlatan anunció su retirada internacional, aunque mostró su predisposición a retornar para jugar el Mundial de Rusia. El seleccionador nórdico descartó la presencia de Ibra en su tercer Mundial, aunque en 2021 y tras cinco años de ausencia, Zlatan volvió a participar en una eliminatoria mundialista.
En el total de su carrera Zlatan participó en 4 Eurocopas y 2 citas mundialistas, jugó 122 partidos y marcó 62 golazos con la camiseta de Suecia. Su obra culmen se produjo en noviembre de 2012 en un amistoso frente a Inglaterra. Aquella noche Ibracadra marcó cuatro goles increíbles, el último de ellos con una acrobática chilena desde más de 25 metros que dio la vuelta al mundo y con la que que ganó el Premio Puskás.
⚽ Los Mejores Golazos de ZLATAN
Manchester United
Después de finalizar su contrato, Ibrahimović fichó por el Manchester United y desembarcaba en la Premier a base de golazos. El sueco ganó la Community Shiled nada más aterrizar en Inglaterra y se convirtió en uno de líderes goleadores del campeonato. Su reencuentro con Mourinho despertó la voracidad del delantero sueco que, cuando se encontraba en su mejor momento deportivo, sufrió la lesión más grave de toda su carrera. Una rotura de ligamentos de la rodilla derecha hizo que Ibra se perdiese lo que restaba de temporada. El United ganó la Europa League sin él sobre el terreno de juego pero Zlatan tuvo una aportación determinante con 29 goles en 53 partidos. Tras meses de recuperación, Zlatan logró reaparecer a finales de año, pero el sueco y United acordaron la rescisión de su contrato.
LA Galaxy
El 23 de marzo de 2018 Los Ángeles Galaxy firmaban a la estrella escandinava, que llegaba con 36 años a la MLS. Su aterrizaje en Estados Unidos fue como el de una superproducción de Hollywood. Debutó en el derbi de la ciudad saliendo desde del banquillo, y marcó dos golazos para dar la victoria a su equipo, con una volea desde 40 metros y un cabezazo en el último minuto. A pesar de no levantar trofeos su impacto en la liga norteamericana fue indiscutible, dejando golazos y momentos para el recuerdo. En sus dos años en los Galaxy marcó 53 goles en 58 partidos y se despidió de la afición con una declaración épica: «ustedes querían a Zlatan, yo les di a Zlatan. De nada. La historia continúa... Ahora vuelvan a ver béisbol»
Regreso a Milán
Muchos esperaban su retirada pero el 27 de diciembre de 2019 se confirmó su regreso a Europa. Ibrahimović retornaba al Milan, por el que firmaría por los próximos seis meses. La pandemia interrumpió por unos peses su exitosa vuelta, aunque el sueco se ganó la renovación tras marcar 11 goles en 20 partidos. En la 2020-2021 Zlatan comenzó a padecer problemas musculares y sufrir pequeñas lesiones, aunque logró firmar 17 goles en todas las competiciones. En la 2021-2022, Ibra volvió a tener problemas en la rodilla, aunque pudo contribuir con 8 goles para ganar otro Scudetto con el Milan, el primero desde su marcha en 2011.
Zlatan pudo dedicar el título a su agente y amigo, Mino Raiola, que había fallecido recientemente. Tres días después, el sueco reveló que había jugado por seis meses lesionado, por lo que aprovechó el verano para volver a operarse la rodilla. El Milan le renovó el contrato y tras siete meses de recuperación, Ibrahimović reapareció para convertirse en el jugador más veterano en marcar en la liga italiana, con 41 años y 166 días.
Retirada forzosa
Parecía que Zlatan quería seguir jugando, pero ante sus constantes problemas de rodilla decidió que su Leyenda como jugador había finalizado. Se despidió de San Siro en un emotivo homenaje y entre lágrimas puso fin a un trayectoria envidiable. Ibrahimović se despedía con un palmarés de 29 títulos, 227 asistencias y un total de 580 goles en 999 partidos.
