Historicismo y teatralidad: John Galliano en 8 desfiles

02 / 02 / 2024
POR Celia Gil

Decadente, extravagante, polémico o caótico son algunos de los adjetivos que seasocian al que fuese director creativo y diseñador de Givenchy, Christian Dior, de su propia firma, Maison John Galliano, o actualmente Maison Margiela. En #VEINDIGITAL repasamos la trayectoria del maestro inglés y sus apuestas más sonadas. 

Su última colección fue presentada en la semana de la alta costura de París, donde el diseñador vuelve a compartir su excéntrico imaginario y el mundo de la moda se rinde a sus pies. Han pasado más de dos años desde que Maison Margiela, guardase riguroso silencio, sin embargo, reaparece por la puerta grande. Con un escenario evocador, John Galliano representa a un grupo parisino inspirado en los bajos fondos de los años veinte y treinta. Los modelos adoptaron un acting tan teatral como los diseños, donde además de brillar las prendas, lo hacía su maquillaje firmado por Pat McGrath. Ladrones de joyas, bailarines de burlesque o muñecas consiguieron darle la cohesión y carácter al ambiente creado por el diseñador.

Galliano, con grandes cualidades hacia el dibujo y la composición, decidió estudiar en Central Saint Martins, donde exploraría las mil caras del arte, pero no fue hasta el año 1995 cuando consiguió coronarse como diseñador de Givenchy, convirtiéndose en el primer inglés en estar al frente de una casa de alta costura. Durante esta breve etapa, confeccionó cuatro colecciones: dos de alta costura y otras dos, Pret à Porter. Su llegada hizo tambalear los cimientos de la gran firma, aportando un sello personal y dejando atrás a la musa por excelencia Audrey Hepburn, para adentrarse en la nocturnidad de Londres y capturar a la que se convertiría en su nueva inspiración, Amanda Harlech, aportando a sus creaciones un estilo sofisticado y bohemio, mezclando la franela gris con bolsillos de lazo. Atrás dejaba la que había sido su casa durante apenas dos años, para en octubre de 1996 introducirse en el mundo de Christian Dior hasta 2011.

La complejidad de su estilo repleto de referencias históricas hacía que el autor se sumergiese profundamente en el proyecto, incluso llegando a cambiar su imagen. Sus comienzos estuvieron marcados por su inspiración en clubes punks, más tarde rescataría el japonismo e historicismo mezclando la moda francesa del Siglo XVIII para crear piezas únicas, o adoptar la teatralidad en su puesta en escena. También, destacan sus raíces españolas, plasmadas en el 60º aniversario de la casa Dior, creando una colección colmada de arte, flamenco y con inspiración taurina.

Una de las mayores características de l´enfant terrible de la moda en su extravagante y particular proscenio, creando una comunión perfecta con la música, el atrezzo, acting, maquillaje, peluquería, complementos, y por su puesto, sus prendas, demostrando un viaje único, al límite y diferente en cada una de sus puestas en escena.

Givenchy, Primavera 1996 – Alta Costura

La primera colección del modista inglés para la casa de alta costura, Givenchy obtuvo una respuesta difusa entre el público. El espectáculo tuvo cabida en un estadio cubierto a las afueras de París, mientras, la escenografía estaba inspirada en el cuento de ‘La princesa y el guisante’. Los primeros diseños de la colección provenían de la obra de Franz-Xaver Winterhalter del año 1855 y como principal referencia, se encontraba la Emperatriz Eugenia, a este referente se le sumaría un ambiente caricaturesco como, Cleopatra, que conjugaría la colección con seda sari roja, tejida con oro. Además, otro de los distintivos fue la simbología flapper, caracterizada por el pelo corto, mujeres con pantalones, faldas cortas y que huían del comportamiento correcto. Sin embargo, el diseñador adaptó los lazos y trajes limpios que caracterizaba a la firma, dentro de sus prendas. 

Givenchy, Otoño 1999 – Alta Costura

En la última colección del diseñador para Givenchy, el artista explora un espacio ya habitado, es el caso de los denominados, Los Incroyables y Merveilleuses , un grupo de personas pertenecientes a la aristocracia francesa del siglo XVIII, con un estilo muy característico, impregnado de hedonismo y romanticismo. Además de arrastrar numerosas críticas, llegando a considerar su forma de vestir como escandalosa. Entre los detalles de esta colección podemos destacar la silueta imperio, máxima protagonista, cortes con materiales transparentes o el uso de ropa interior en el exterior, también los estampados y texturas, además de tocados.

Christian Dior, Primavera 1998 – Alta Costura

 

El director artístico y diseñador creó un ambiente extraordinario, adoptando un espacio como la Ópera Garnier de París, en un escenario repleto de referencias y magia. Los vestidos brillaban por el salón como si del Siglo XX se tratase. Fue su primer gran éxito tras cambiar de casa, la recopilación de prendas contaba con la referencia de la Marquesa Casati, quien destacaba por su estilo extravagante. Entre la indumentaria podemos encontrar materiales como el terciopelo, encaje, estampados al más puro estilo Art Noveau, abrigos con ribete o sombreros con estampados de rosa, además de faldas de aro, fruncidos en la cintura o siluetas muy esculpidas, recordando el New Look de la firma. Una vez finalizado el desfile los invitados fueron sorprendidos por numerosas mariposas de papel tiradas desde el techo del salón.

Christian Dior, Primavera 2000 – Alta Costura

Con esta colección el diseñador se posicionó en lo más alto del escándalo, la cuestión: crear una serie de modelos inspirados en los sin techo de París. Para la creación de ‘Les Clochards’ (los mendigos) tomó como referente artístico las imágenes de Diane Arbus, una fotógrafa estadounidense que destacaba por sus imágenes poco convencionales y rechazadas por la sociedad, sin embargo, a ojos del público y de la crítica no fue acertada su respuesta, ni tampoco la colección. Entre las prendas destacaban pantalones bombachos muy anchos o ropa deshilachada, desgastada.

Christian Dior, Otoño 2000 – Alta Costura

Tras la polémica colección de alta costura ‘Hobo Chic’ del mismo año, con inspiración ‘homeless’, que ha sido replicada por numerosas firmas debido al impacto de su muestrario, Galliano creó una puesta en escena rompedora, simulando una boda encima de su pasarela, con múltiples referencias religiosas, creativas y bien estructuradas. Fetichismo, miedo, dolor, sexualización o show, fueron algunos de los ingredientes que el artista depositó en esta serie de diseños, entre los que se encontraba una criada francesa con un chupetón, una modelo ensangrentada en representación de María Antoñeta, un sacerdote sádico o una mujer con la máscara de un gorila. A pesar de jugar con todos estos elementos, ninguno pudo hacer sombra a la exquisita confección artesana de la marca.

Christian Dior, Otoño 2004 – Alta Costura

Con un maquillaje empolvado sobre la piel, propio de la escena temporal, vestidos con forma de reloj de arena, grandes joyas, corsés ornamentados o volantes, Galliano presentó su novedoso proyecto. El artífice comentó que la inspiración total se la dio un viaje, donde recogió influencias de princesas austrohúngaras, como es el caso de Sissi Emperatriz, para convertirlas en protagonistas de su desfile. A la colección se le une la explosión de colores como, el rojo, esmeralda, rosa o celadón.

Christian Dior, Otoño 2005 – Alta Costura

Si bien el modista sabe cómo sorprender a su público, en el 100º aniversario del nacimiento de Christian Dior, no iba a ser menos.  Para Galliano, ‘todo vale’, así nos lo hace saber con cada una de sus obras encima de la pasarela, cada modelo consigue capturar la esencia de la narrativa que adopta el diseñador. Su corte estrella al bies, está presente, creando movimiento y abrazando la silueta de la mujer, que se convierte en su seña máxima de identidad en cuanto a patronaje y corte. La representación de este escenario simboliza a una mujer de la aristocracia rodeada, en una mansión de estilo eduardiano en ruinas.

Maison Margiela, Otoño 2022 – Alta Costura

John Galliano lanzó hace apenas dos años una colección adaptada a los nuevos tiempos, destruyendo las barreras digitales a golpe de creatividad. Sanguinario y romántico son dos de los activos que han conseguido alinearse para crear piezas de alta costura. Los personajes están inspirados en la segunda década de siglo, hasta la mitad, y crean una disociación absoluta con la realidad, introduciéndote por completo en la teatralidad. En este proyecto, su objetivo era mezclar todas las culturas posibles, el teatro, lo digital y poder transmitir a través de su arte: la moda. El rojo, negro y azul son los colores encargados de llevar el peso, también lo hacen los complementos y la deconstrucción de las prendas.

Su carácter extravagante revolucionó la moda y su corte al bies, le diferenció del resto de diseñadores. John Galliano ha plasmado en sus colecciones representaciones históricas, adaptándolas a la actualidad con una puesta en escena inigualable.