La capital checa es preciosa. Alberga tantísima historia y a la vez es tan sumamente bella que parece toda ella en sí un museo al aire libre. Y eso impresiona. Los distintos estilos arquitectónicos se mezclan con sintonía en sus avenidas. El regusto a solera de sus majestuosos pero decadentes cafés no choca con su natural elegancia. Los turistas parecen meros espectadores de una obra de teatro viviente que acontece a su alrededor. He visitado 4 veces la ciudad (hasta en Navidad), porque hay muchas, muchas cosas interesantes que ver en Praga. Y voy a contártelas todas.
De los que he probado, el lugar que más me ha gustado para dormir en Praga es este apartamento. Está perfectamente ubicado y el chico que los gestiona es muy majo. Además es bastante barato, lo recomiendo totalmente.
Aprovecho para dejar este post con los mejores lugares donde comer y beber cerveza en la ciudad para que tu experiencia sea muy local.
Qué hacer y qué visitar en Praga para un viaje increíble
Todo el mundo se queda encandilado con Praga, y no me extraña. Es de esos sitios que gusta a cualquier viajero. Su centro histórico ha sido declarado Patrimonio Universal por la UNESCO y con razón. Al recorrerla nos embriaga de su misticismo medieval y nos va contando la crónica de su vida a medida que cambiamos de calle, y eso es apasionante.
¿Merece la pena sacarse la Prague Card? Para visitar la mayoría de monumentos de Praga yo sí recomiendo sacarse la Prague Card. El precio es bastante proporcionado y puede ajustarse a los días que vayas a dedicar a explorar la capital de República Checa. Puedes reservar la tuya aquí y ya te digo que aunque pueda parecer cara, sale a cuenta. En el post iré señalando qué visitas he hecho «gratis» gracias a ella y verás como se ahorra bastante dinero. Además, incluye los transportes gratis (también para ir y volver desde el aeropuerto).
Y por cierto, para realizar pagos en Praga lo más aconsejable es utilizar una tarjeta monedero que no aplique comisiones por pagar en coronas checas. Yo he llevado siempre la de Revolut, que uso de hace años y es que no necesitas ni tocar efectivo (aunque te permite sacar en el cajero directamente también).
Y ahora sí que sí, qué ver en Praga:
La Plaza de la Ciudad Vieja de Praga y sus secretos
La Plaza de la Ciudad Vieja es el corazón de la villa. Aúna varias de sus construcciones más representativas, destacando por supuesto el gran reloj astronómico y la Iglesia de Tyn, dos imprescindibles que ver en Praga.
En Navidad acoge el mercado navideño más mágico del país.
Lo que no te puedes perder en esta plaza por tanto es:
El espectáculo del Reloj Astronómico cada hora en punto
¿Cuándo funciona el Reloj Astronómico de Praga? Se pone en funcionamiento a cada hora en punto desde las 09:00 hasta las 21:00 horas.
Desde el siglo XV lleva funcionando el espectacular Reloj Astronómico de Praga. Está dividido en dos construcciones, la inferior más moderna, del siglo XIX , con tres calendarios pintados por un artista praguense, y la superior y más antigua, de 1410, con hasta 3 relojes en uno. El círculo negro representa las horas de sol restantes, donde 24 es el atardecer. El del medio comunica la hora oficial actual, mientras que el interior expresa el que sería horario de Babilonia (ya que son los creadores del reloj). Dentro se localiza el reloj astronómico propiamente dicho.
Las figuras visibles representan la vanidad, la avaricia, la lujuria y la Muerte. Cada hora en punto comienza el show más aclamado por los turistas: la Muerte toca la campana, las figuras comienzan a negar con la cabeza porque no quieren morir a pesar de sus pecados y se abren dos ventanas por las que van pasando los apóstoles. Finalmente un gallo (animal muy ligado a Cristo) cacarea gracias a un fuelle y sentencia la nueva hora.
Encuentra la entrada a la coqueta Iglesia de Týn
La de Týn es la iglesia más conocida que visitar en Praga. Se halla encajonada entre varios edificios en una segunda línea de la plaza principal. Esto es así debido a que realmente no se construyó para ella, sino que está dedicada a los comerciantes, que se establecían en el Mercado de Ungelt, a espaldas de la plaza, y las construcciones que la tapan ya existían de antes.
¿Sabías que además que en sí la palabra «Týn» significa encerrada? Es la Iglesia de Nuestra Señora Encerrada. Curioso, ¿A que sí?
Si quieres acceder para contemplar su sobrio interior debes atravesar uno de los arcos entre los bares que tiene justo delante. Es raro pero el más amplio conduce hasta su entrada (es gratis).
Sube a la torre del Antiguo Ayuntamiento
La Torre del Antiguo Ayuntamiento, sobre la que se apoya el Reloj Astronómico, tiene las mejores vistas de Praga centro y está incluida en la Tarjeta de Praga.
Lo ideal sería visitarla al atardecer, ya que las vistas son preciosas tanto de día como de noche. He tenido la oportunidad de subir en los dos momentos y cada uno tiene su encanto.
Por cierto, ante ella encontramos un parquecito en cuyas proximidades podemos ver en el suelo 27 cruces blancas pintadas. Hacen referencia a 27 nobles husitas (iglesia reformista) que fueron asesinados por Fernando II. La gran escultura que preside la plaza es precisamente Jean Rouch, el primer protestante que dio lugar a los husitas (antes de Lutero).
Otras cosas importantes de la Plaza Vieja
La vivienda situada delante de la Iglesia de Týn hacia la izquierda, es conocida como la Casa de la Campana de Piedra (puedes verla en la zona derecha de la fachada) y en ella nació Carlos IV Rey de Bohemia, en 1316. Si te interesa su vida te recomiendo ver la exposición de la Casa del Anillo de Oro. Ambas casas están incluidas en la Prague Card también.
La otra gran iglesia que vemos en la esquina opuesta a Týn es San Nicolás, protestante husita; curiosamente tiene elementos católicos. La de Týn por su parte es católica pero tiene por ejemplo el cáliz husita en su fachada. Es señal del respeto entre ambas. Junto a la escultura han colocado recientemente una antigua columna mariana con la Virgen de la Inmaculada, un símbolo más de armonía entre las dos religiones.
En mi última visita a Praga, probamos una actividad muy divertida en la plaza. Acudimos a un tour con gafas de realidad virtual que te permite conocer cómo era esta ciudad hace algunos siglos. Una forma muy inmersiva para adentrarte en su historia. Puedes reservarla aquí.
El barrio judío, visita sus sinagogas y el impresionante cementerio
En dos ocasiones he hecho un free tour que aúna el casco histórico praguense y el barrio judío y creo que es esencial para entender la idiosincrasia del lugar. Te aconsejo mucho que reserves esta experiencia gratuita.
Resulta curioso pasear por el barrio judío de Praga (o Josefov) porque comprobamos que muchos de sus edificios son de estilo art decó (y de hecho entre este y la Plaza Vieja encontramos grandes mansiones con todas las tiendas de marcas de lujo). Parece que esto no nos encaja con su época, pero es fruto de las fuertes obras de restauración que sufrió a principios del siglo XX para atajar con la insalubridad de la zona en los años anteriores.
A pesar de esto, se trata de uno de los barrios judíos mejor conservado del mundo, y de hecho muchas de sus sinagogas y construcciones significativas continúan en pie. Esto es debido a que Hitler ideó algo así como un zoo judío en Praga. Tras exterminar la raza, su idea era confinar a unas pocas familias en el corazón de este núcleo cercado para que los visitantes pudieran visitarlos «en su hábitat». Lo que él denominaba como Museo de la Raza Extinta. Abominable, aunque gracias a esto podemos aprender hoy de él.
En el siglo XX lamentablemente muchos de sus habitantes fueron trasladados a campos de concentración, y podemos encontrar placas en el suelo con los nombres de algunos de los fallecidos.
Las sinagogas más importantes que ver en Praga
– Sinagoga Alta: tiene dos plantas, en la superior una exposición de telas y objetos de plata y en la inferior una tienda de recuerdos.
– Klausen Sinagoga: en ella podemos encontrar muchísimos textos hebreos antiguos.
– Sinagoga Española: recibe este nombre por su decoración morisca que recuerda vagamente a la Alhambra de Granada.
– Maisel Sinagoga: data del siglo XVI pero un gran incendio obligó a su posterior reconstrucción. Alberga una gran colección de artículos judíos.
– Sinagoga Pinkas: en ella se encuentran algunos dibujos que niños del campo de concentración propagandístico de Terezin dibujaron en su día a día y que han servido a posteriori para probar las cosas que allí se vivían (si quieres visitar Terezin puedes contratar esta excursión de un día). Pinkas es de las más famosas y en sus paredes hay escritos los nombres de 77.297 judíos checos asesinados por los nazis.
– La Sinagoga Vieja-Nueva: data del siglo XIII y es la más antigua de Europa en activo. Al lado observamos el antiguo ayuntamiento, restaurado en el siglo XVIII en estilo rococó. Destaca su reloj hebreo en sentido antihorario y con las agujas a la inversa (corta minutos, larga horas).
– Sinagoga de Jerusalén: aunque no está entre las históricas porque data de principios del siglo XX, es muy fotogénica debido a sus llamativos colores.
La Prague Card incluye un Pack de Entradas que sirve tanto para acceder al Cementerio Judío (abajo os cuento) como a las sinagogas Maisel, Klausen, Pinkas, Española (recién restaurada), la Vieja-Nueva y el Hall Ceremonial y la Galería R. Guttmann. Aparte, si visitas la de Jerusalén también está incluida.
El increíble cementerio judío de Praga
El cementerio judío es uno de las cosas más espectaculares de Praga. Hasta 12.000 lápidas se amontonan en ese pequeño montículo de tierra, repartidos entre doce capas superpuestas por el reducido espacio con que contaban. Como los judíos se entierran en contacto con la tierra, sin ataúd, cada cuerpo se descompone de una manera y van dejando huecos que hacen que las lápidas se vayan doblando a su criterio.
Puente de Carlos de Praga, sobre todo al amanecer
Probablemente la estampa más fotografiada de Praga sea su famoso Puente de Carlos. Este puente de piedra está decorado con 30 esculturas barrocas y une los dos barrios más importantes de la ciudad desde el siglo XIV.
Durante el día, el Puente Carlos está atestado de visitantes y caricaturistas, hasta el punto de que puede ser un poco decepcionante. Mi consejo es verlo al amanecer para poder disfrutarlo casi para ti. Te aseguro que el madrugón merece la pena.
Subir a la Torre del Puente Carlos
En esta última visita a Chequia subí a la torre que se encuentra en uno de los extremos del Puente Carlos (y que se incluye en la Prague Card). La verdad es que no sé por qué no había subido en las otras ocasiones, porque la panorámica desde arriba viendo a la gente pasearlo me pareció maravillosa. Una recomendación top que ver en Praga.
Mejores vistas del Puente Carlos de Praga
En el lado del barrio conocido como Mala Strana hay un pequeño muelle con muchísimos cisnes (aunque dicen que una especie de castores están llegando a este punto y los está espantando). No obstante, se ha convertido en un punto perfecto para fotografiar el Puente Carlos acompañados por estas elegantes aves (o roedores en su defecto jaja).
Los entresijos del Castillo de Praga, el monumento más importante de
Bajo el nombre de Castillo de Praga se localiza una miniciudad de acceso libre con numerosas atracciones en su interior. Las cosas más importantes que ver en este gran complejo arquitectónico (que sí son de pago pero que están incluidas en la Prague Card) son: la Catedral de San Vito, el Callejón del Oro, el Palacio Real y la Basílica de San Jorge (también puedes subir a la Torre Daliborka).
A las doce en punto se hace el Cambio de Guardia (aunque ninguno tan chulo como el griego).
Catedral de San Vito, el mayor templo de la ciudad
La Catedral de Praga es tan espectacular por dentro como por fuera. Es ostentosa y elegante, y está plagada de vidrieras. Es el templo gótico más grande del país.
El Callejón del Oro, uno de mis rincones favoritos de Praga
La calle más bonita de Praga es el Golden Lane y se ubica dentro del Castillo de Praga. Esta pequeña vía de suelo de adoquines está formada por una hilera de casitas adorables de color pastel, que hoy son comercios o recreaciones de su vida pasada y gremios. En el número 22 vivió Kafka con su hermana y en la actualidad acoge una librería.
Palacio Real del Castillo de Praga, la Joya de la Corona
Aunque no es tan impactante como otros palacios europeos, hay dos elementos destacables en su visita: el gran salón y la Corona de Wenceslao en oro y piedras preciosas.
Basílica de San Jorge, de color rojo sangre
Se fundó en el año 920 por lo que es antiquísima, aunque la fachada barroca es fruto de una reconstrucción del siglo XVII. Tiene dos torres, una más ancha (Adán) y otra más fina algo inclinada (Eva).
Haz un crucero por el río Moldava
Si quieres tener todas las perspectivas posibles de Praga, te recomiendo que hagas un crucero por el río Moldava y pases por debajo del mítico Puente de Carlos. Nosotros hicimos este que incluye entrada a un pequeño museo y es monísimo (con la Prague Card viene ya incluido).
Son barcos muy pequeñitos, de madera, hasta con chimenea encendida en invierno (cosa que se agradecía) y te dan un dulce y una bebida (cerveza, té, café…) gratis. Además te van contando cosas interesantes en varios idiomas y te enseñan fotografías antiguas. Me encantó. Sin duda algo top que hacer en Praga.
La Casa Danzante de Praga
Llamativa obra deconstructivista del arquitecto checo-croata Milunic en colaboración con el afamado Gehry (el del Guggenheim de Bilbao y el hotel de la bodega Marqués de Riscal). Al principio se llamó Fred y Ginger por los bailarines Fred Astaire y Ginger Roberts, pero pronto mutó a Casa Danzante. Está ocupada por oficinas.
Un spa de cerveza en Praga, relajante baño en Lúpulo
Una de nuestras experiencias más originales en Praga fue disfrutar de un spa de cerveza, en el que te bañas en un tonel de madera con esencia de lúpulo mientras tienes a tu disposición un grifo de cerveza con barra libre. Nosotros contratamos esta experiencia en concreto. Si se te abre el gusanillo aquí puedes leer dónde beber cerveza checa en la ciudad.
Clementinum, la universidad más antigua de Praga
Es uno de los edificio más grandes de la ciudad y alberga una hermosa biblioteca de estilo barroco, con frescos en el techo, globos terráqueos y altas estanterías. En el mismo complejo destacan también la Capilla de los Espejos, la Torre Astronómica (se sube en la visita), la Sala de los Meridianos, la zona de la Sala del Tesoro, la Iglesia de San Salvador y la Iglesia de San Clemente.
Solo una advertencia, la biblioteca barroca se ve desde un balcón (lo digo porque cuando la he visitado este última vez un señor pensaba que podía pasearse en ella y se pilló un cabreo monumental). Está incluido en la Prague Card pero hay que reservar cita a una hora en concreto porque solo es guiada.
También en la ciudad destaca la Universidad Carolina.
Las cafeterías más bonitas que ver en Praga
Praga es una ciudad llena de cafeterías majestuosas y antiguas que invitan a descansar un rato. En este post he hecho una selección con los cafés más bonitos, que merecen mucho la pena.
Torre de la Pólvora
Otro de los miradores más conocidos de Praga y que recibe este nombre porque servía de almacén de explosivos. De estilo gótico, se construyó en el siglo XV y originalmente se la conocía como Torre Nueva. Alberga una exposición sobre la historia de la ciudad. Incluido en la Prague Card.
Barrio de Mala Strana, la zona más de cuento de Praga
El barrio pequeño ha acogido muchas culturas diferentes a lo largo de su historia. Eso, sumado a sus angostas calles, ha dado lugar a numerosas leyendas y cuentos que lo han convertido en un lugar realmente bonito que pasear. Dos de las visitas más destacables son las la Iglesia de El Niño Jesús de Praga y la Iglesia de San Nicolás, desde cuya torre se obtienen unas vistas fabulosas (incluido en la Prague Card). Creo que ya te habrás convencido de que merece totalmente la pena sacarse esta tarjeta.
Muro de John Lennon, un graffiti que se reinventa(ba)
Tras el asesinato de Lennon alguien dibujó un gran graffiti con su cara en Mala Strana. Lo mandaron limpiar, pero continuaron apareciendo numerosas versiones del original. En nuestros días el dibujo sigue mutando, así que si vas varias veces seguramente esté diferente cada vez.
Actualización 2023: dicen que este será el último mural de Lennon, y es que pretenden que se quede este para siempre. Aunque ya te digo que he ido a Praga con una diferencia de solo seis meses y ya está casi cubierto entero de pegatinas, no se le ve ni la cara.
Aprovecha para dar una vuelta por la interesante y poco transitada Isla de Kampa.
Plaza de Wenceslao, punto de partida de la revolución
Aquí se inició la Revolución del Terciopelo, que puso fin al comunismo, por lo que es un lugar de gran importancia histórica. El imponente edificio al fondo es el Museo Nacional de Praga (incluido en la Prague Card).
Muy cerca queda el bar donde la cerveza te llega en un trenecito, así que no te pierdas esta ruta por las mejores cervecerías de Praga.
Parque Letna y los puentes de Praga
Para conseguir una de las fotografías más bonitas de la urbe, recomiendo subir al Parque Letna, desde donde se divisan la mayoría de los puentes que ver en Praga.
Arriba encontramos una escultura de un metrónomo, que sustituye a una anterior de Stalin que fue explosionada y cambiada por este medidor que simboliza que República Checa es dueña de su tiempo.
Monasterio de Stranhov y su exquisita cerveza
Además de tener una importante biblioteca, este monasterio con torres con acabado bulboso es muy famoso porque dicen que elabora una de las mejores cervezas del mundo, que puede catarse allí mismo. Doy fe de que están exquisitas.
Ruta por las esculturas de Cerny
Si hay un personaje praguense sedicioso, ese es el escultor contemporáneo Cerny, que se ha visto envuelto en más de una polémica por sus transgresoras obras, muchas con mensajes alborotadores. Algunas de las más famosas son la cabeza de Kafka que se mueve o el caballo del revés de Wenceslao. Te dejo aquí la ruta por sus esculturas más conocidas.
Monte Petrin, de la copia de la Torre Eiffel al laberinto de los espejos
La colina Petrin es todavía un lugar más frecuentado por locales que por turistas. Toma el funicular que sube hasta la cima para disfrutar de una agradable caminata en su apacible entorno.
Si te ves con fuerzas, sube la Torre Petrin, una copia de la Torre Eiffel de París de 63 metros que brinda una de las panorámicas más espectaculares de Praga.
Y si te sientes loco, visita el próximo Laberinto de los Espejos, una chorrada en la que echar unas risas que se ha puesto muy de moda en Tik Tok.
Tanto la torre como el laberinto están incluidos en la Prague Card.
Más cosas todavía que ver en Praga si eres un intensito
– Villa Bílek: con la obra del arquitecto y escultor de mismo nombre. Bastante bonita y agradable. Me gustó bastante y está incluida en la Prague Card.
– Vysehrad: fortificación a 3 kilómetros del centro por la orilla del río. Varias de sus atracciones están incluidas en la Prague Card. También tiene su propio free tour. Hay mucho que ver en Praga eh.
– Sube al ascensor paternóster (que nunca para) del edificio del Nuevo Ayuntamiento de Praga. Solo tienes que acceder y dirigirte al fondo. La entrada es libre. En mi última visita he descubierto un ascensor menos turístico en las oficinas que hay frente a este Hotel Ibis.
– Visita el Pozo Infinito de Libros en la Librería Municipal. La entrada es libre.
– Teatro Negro: uno de los espectáculos más características de Praga en el que los actores trabajan bajo un fondo totalmente negro que provoca ilusiones ópticas. Reserva tu entrada aquí.
– Haz algún otro free tour: el clásico (Ciudad Vieja y Mala Strana), el del nazismo, el de Misterios y Leyendas (muy propio), el de la Ciudad Nueva o el del Castillo de Praga. Te irás con toda la lista de qué ver en Praga tachada.
– Vete de excursión: Karlovy Vary (pueblo balneario), Cesky Klumvov (con su castillo de cuento de hadas), Kutná Hora (tiene un osario con 40.000 esqueletos) o Pilsen (cuna de la archiconocida cerveza). En este último viaje he optado por zonas mucho menos turísticas y muy espectaculares: Olomuc y Moravia, con bellezas como Stramberk.
Bueno, creo que con esto tienes de sobra para aprovechar al máximo tu visita con todo lo que ver en Praga. En uno de mis viajes lo combiné con una escapada en tren nocturno a Budapest, una de mis ciudades europeas favoritas.
10 Comentarios
Hola, Claudia
Enhorabuena por el post, me ha resultado más que interesante y apunto más de una visita en mi próximo viaje a Praga.
Siento mucha curiosidad por la cafetería donde se lanzan dulces.. ¿Tienes info sobre esto para compartir? 🙂
Hola Ainhoa! Has leído el post sobre las cafeterías más molonas de Praga? Ahí cuento más cosas de ella!! Te deseo súper buen viaje.
Tu artículo me ha despertado la nostalgia de los días cuando vivía en Praga. Todas las recomendaciones que has dado me parecen muy acertadas para acercarse al corazón de la ciudad. Una recomendación más es que no se pierdan el mercado de Naplavka a orillas del río. Solo se pone los fines de semana pero ahí se puede probar mucho de las gastronomía local a precios más accesibles que en los restaurantes. Un saludo y gracias por el excelente artículo
Pues vuelvo a Praga estas navidades así que me lo apunto.
Maravillosa reseña! Tambien recomiendo visitar el parque Stromovka. Es uno de los mas bonitos de la ciudad. Saludos !
Pues me lo apunto que vuelvo en diciembre!
Hola Claudia, puedes contar un poquito más las ventajas de la tarjeta de recarga de la que hablas y cómo es su funcionamiento?
En Praga no se aceptan Visa ni Mastercard?
Gracias y enhorabuena por tu blog.
Hola! La tarjeta que recomiendo es de hecho una Visa. La cosa es que la mayoría de tarjetas normales, las que usamos en España por ejemplo, no están pensadas para pagar en otra moneda. Entonces, primero que el banco aplica la tasa de cambio que les parece (que puede no ser ni de lejos la «oficial») y además suelen cobrarte una comisión por las molestias. Todo esto en cada pago. Con las tarjetas de viaje tienes mucho más control sobre qué vas a pagar exactamente cada vez.
Hola Claudia! Mil gracias por este blog que tienes! 😍
Te quería preguntar cómo es mejor ir del aeropuerto de Praga a la ciudad?
Hola! Lo más barato es combinar el bus local con el metro, pero también hay buses directos (Regiojet y Airport Express) y por último lo más cómodo pero caro (y según cuántos seáis sale a cuenta), transfer privado.