El canal de pago Calle 13, dedicado a la acción y el suspense, estrena 'Eyewitness', una reciente ficción televisiva de USA Network sobre dos jóvenes que presencian un crimen. La historia se basa en la serie noruega 'Øyevitne' y está protagonizada por Julianne Nicholson, Aidan Devine, Tyler Young o James Paxton, quien recientemente visitó España para promocionar la serie.
“'Eyewitness' es un thriller psicológico que tiene un montón de giros, pero lo que le hace diferente es que se centra en una historia de amor entre dos chicos. No se trata tanto de averiguar quién es el asesino sino que se centra en quién lo ha visto. Es interesante que también veamos la perspectiva del asesino, que va siguiendo a los testigos”, explica el actor sobre la premisa.
A pesar de trasladar la acción a la América profunda, 'Eyewitness' mantiene en su estética un cierto aire nórdico: “Es algo que Catherine Hardwicke, la directora de la serie, hizo a propósito. Se nota mucho en los colores que ha elegido: grises, azules... con ellos se muestra una atmósfera austera y carente de esperanza”, nos explica James Paxton, que alaba la serie original aunque señala que “se trata de una reinterpretación del material original y tiene cuatro capítulos más, lo cual permite profundizar más en los personajes”.
La relación entre su personaje, Lukas, y el de Tyler Young, Philip, es uno de los diferenciales de esta ficción: “Me gusta que la serie trate el tema de la homosexualidad de forma muy realista y sin estereotipos”, apunta el actor, que se siente orgulloso de su labor en una serie que toca la temática LGTB: “Tanto Tyler como yo recibimos muchísimos mensajes de gente que nos dice que ha tenido experiencias parecidas -sin el tema de los asesinatos, claro- y que está llegando. Vivimos en un clima social en el que aún suceden cosas como la tragedia de Orlando, así que es un honor que la serie ayude a hablar del tema”. Sobre su creciente legión de admiradores confiesa: “Es un poco abrumador, pero estoy encantado de que la gente vea la serie y le esté gustando”.
EL PESO DEL APELLIDO PAXTON
El joven protagonista de 'Eyewitness' es un actor debutante aunque quizás su apellido te haya sonado. ¿La razón? Es hijo del también actor Bill Paxton a quien hemos visto en 'Aliens, el regreso' o en la serie 'Big Love'. Sin embargo, su parentesco no necesariamente le ha ayudado: “La industria del entretenimiento es muy dura y es muy complicado tener éxito, da igual seas quien seas. La gente no se da cuenta de que se invierte tanto dinero en una producción, que nadie quiere arriesgar a coger un actor que no sea bueno solo porque sea hijo de alguien”, explone y añade: “En algunos castings, al ver mi apellido me han prejuzgado o han esperado mucho de mí. Otros ni se dan cuenta. Pero no siento que tenga que demostrar nada respecto a mi padre, solo quién soy yo como actor”.
Sin embargo, tener un padre que se dedique a tu misma profesión sí tiene alguna ventaja: “Mi padre me ha dado muy buenos consejos sobre cómo lidiar con el éxito y el rechazo, o con el tiempo que pasa entre un trabajo y otro. Pero sobre todo, el mejor consejo que me dio es que cuando me pongo delante de la cámara no debe ser el momento de James, es el momento de Lukas o del personaje que esté interpretando”, cuenta.
NO PODRÁ SEGUIR EN EYEWITNESS
La serie 'Eyewitness' está planteada como una antología de temporadas independientes, de modo que el caso en el que se ve envuelto el personaje de James Paxton quedará resuelto al final de la primera temporada. No obstante, al actor no le faltan proyectos. De momento, tiene pendiente pendientes de estreno dos películas indies: 'Boogeyman Pop', una película de terror que se estrenará a principios de 2017, y 'An American in Texas', en la que da vida a un cantante de un grupo punk de los noventa. Además, afirma estar en el proceso de casting para otra ficción televisiva.
'Eyewitness' se estrena el martes 8 de noviembre en prime time a través de Calle 13.
Nací en Wisteria Lane, fui compañero de piso de Hannah Horvath y 'Chicago' me volvió loco porque Roxie Hart soy yo. Tengo la lengua afilada, pero, como dijo Lola Flores, "me tenían que dar una subvención por la alegría".
