Toda la población de Mallorca ha respirado en 2023 aire contaminado por ozono: hasta 1.800 personas mueren cada año por esta causa

"Toda la población balear ha respirado en 2013 un aire perjudicial para la salud en relación al ozono, según las recomendaciones de la OMS”, constata el informe anual de Ecologistas en Acción, La contaminación por ozono en el Estado español durante 2023, que toma como referencia los valores recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS), más estrictos que los de la legislación española y europea.

La comunidad balear es una de las que tiene más contaminación en el aire por ozono junto a la comunidad de Madrid, Cataluña, Andalucía, Castilla La Mancha, Valencia y Extremadura.

Pese a ello, los niveles de ozono han sido en Baleares significativamente más bajos que en años anteriores, recoge el estudio, pese a las altas temperaturas y alta radiación alcanzadas este verano. Se han reducido las superaciones de la recomendación de la OMS en un 51% respecto al promedio del periodo 2012-2019, siendo previsiblemente, una vez finalice el año, las registradas en 2023 las más bajas de la última década.

Balears alcanza el peor dato de calidad del aire de toda Europa

Palma y la Tramuntana mejoran

La situación de Palma ha mejorado y también la de la zona de la Serra de Tramuntana, con un descenso del número de días con mala calidad del aire superior al 60%.

En todo caso, la mitad de las estaciones que miden el ozono han seguido registrando durante 2023 más de 25 días de superación de la guía OMS. Los peores registros en Mallorca se han dado en la estación Hospital Juan March, cerca de la incineradora, con 86 días de superación hasta el 30 de septiembre del límite legal propuesto por la OMS.

Según Ecologistas en Acción, Baleares presenta determinados puntos de contaminación importantes, como son las centrales térmicas, la incineradora de residuos de Son Reus en Mallorca, el tráfico rodado y aeroportuario de la ciudad de Palma y el tráfico marítimo en los diferentes puertos. “La contaminación generada en estas fuentes se extiende por el resto de territorios insulares afectando a zonas de interior alejadas de las mismas en forma de ozono troposférico, cuyos precursores locales proceden principalmente de los focos mencionados, sin perjuicio de los aportes de contaminantes circulantes por la cuenca mediterránea occidental”, reza el estudio.

La exposición al ozono de forma prolongada es muy perjudicial para la salud llegando a desembocar en la reducción de la función pulmonar, irritación de los ojos y las mucosas, dolores de cabeza, fatiga e incluso, nacimientos prematuros.

Al año, además de afectar al sistema respiratorio, se registran entre 1.500 y 1.800 muertes en España, según la Agencia Europea de Medio Ambiente. El Instituto de Salud Carlos III identificó el verano pasado un total de 4.800 muertes atribuibles a las elevadas temperaturas y a la mayor exposición a contaminantes como el ozono.

Esta es la estación de Mallorca donde se detecta más contaminación y cuyos datos llegan tarde al Gobierno