¿Qué es la noche americana y cómo hacerla en rodaje?
Autor: PJ Martínez
Dentro de las técnicas cinematográficas, una de las más populares y conocidas es la noche americana. Con este efecto conseguiremos replicar una escena nocturna cuando en realidad se grabó día. Si quieres conocer cómo llevarla a cabo, en este artículo explicaremos a fondo qué es, su origen, y os daremos claves para poder llevarla a cabo en vuestros rodajes.
Historia de la noche americana
Cuando nos referimos a la noche americana, hablamos de un efecto con el que se busca reproducir una escena nocturna rodando durante el día, para ello es común el uso de un filtro azulado, subexposición y al contraluz, pero más adelante os explicaremos a fondo cómo hacerlo bien. Esta técnica ha sido recurrente ya que, hasta hace varias décadas, era casi imposible rodar de noche porque las cámaras no podían rodar en unas condiciones lumínicas nocturnas, debido a que los sensores de las cámaras carecían del nivel de sensibilidad del ojo humano en estos entornos.
Toma realizada con esta técnica
El origen de la noche americana prácticamente se remonta a los albores del cine, en la primera década del siglo XX, cuándo para poder simular escenas nocturnas, lo que se hacía era añadir un filtro azulado a la escenas, en esos días además no se podía grabar el cielo pues con la tecnología de la época, se notaria demasiado que no es de noche. Cuando se extendió, en inglés se dio a conocer como Day for night, que en español seria “Día por la noche”, que deja bien claro el sentido de este efecto, mientras que en español se tradujo como noche americana, que es desde donde vino este método.
El paso del tiempo y el avance de la tecnología hizo que para llevarlo a cabo, lo que hubiera que hacer es subexponer y añadir un filtro rojo a las cámaras para rodar este tipo de escenas. El primer ejemplo de noche americana a color lo encontramos El Mago de Oz (1939) de Víctor Fleming.
Pero la edad dorada de este efecto fueron los años 70, tanto que una de las películas capitales de la filmografía del director galo François Truffaut la lleva por nombre, hablamos de la oscarizada La Noche americana (1973), un estudio metacinematográfico sobre las vicisitudes del rodaje de una película en la que se utilizar esta técnica.
Actualmente, los avances en la tecnología han perimido grabar de noche por lo que tener que falsear la noche con esta técnica ya no es necesario, aunque siga siendo usado, incluso mejorado, gracias a los efectos digitales, ejemplo reciente del uso de la noche americana como en Mad Max: Fury Road (2015) de George Miller. Pero aun así, la noche americana sigue siendo un recurso usado dentro del cine y la fotografía, ya sea por motivos económicos, creativos o contractuales, como rodar escenas con menores por ejemplo, que por contrato no pueden rodar escenas nocturnas.
Escena de Mad Max: Fury Road con Day for Night
¿Cómo realizar esta técnica de realización?
En este punto os enseñaremos cómo poder llevar a cabo en vuestro rodaje la noche americana. Os ilustraremos también con un tutorial en vídeo para que os resulte más práctico. Tal como se comentó anteriormente, para poder rodar mediante la noche americana, debemos usar un filtro, azulado si rodamos a color, y rojizo si es en blanco y negro, pero debemos tener más factores en cuenta. Si no disponemos de un filtro, una cámara digital, si la grabación es a color, lo que podemos hacer es ponerle en el balance de blancos en el de Tungsteno, de 3200 grados Kelvin.
Después debemos subexponer la imagen, para oscurecerla y que parezca que la luz que ilumina la escena es la de la luna y no el sol, para ello cerraremos la apertura del diafragma. Lo segundo a tener en cuenta es tener cuidado en no mostrar el cielo, si mediodía o la luminosidad es demasiado fuerte, se notará demasiado que es de día, por lo que es mejor evitar estos casos. Además, cuando se quiera grabar obligatoriamente el cielo, lo ideal es mostrarlo solo parcialmente.
El horario ideal para este tipo de escenas es la hora mágica, que la franja de tiempo entre la hora anterior al atardecer y la hora anterior a que amanezca, cuando la luz es más suave y por tanto favorable para rodar con esta técnica, facilitando posteriormente la corrección de color en la postproducción.
Tutorial realizado por ProfesDeCine
En cuanto a la meteorología, hay tener en cuenta que es mejor rodar un día nublado, pues esos días la luz es más suave que un día despejado. Otra opción puede ser la de usar un polarizador, que oscurece así un poco más la imagen y además viene mejor para evitar reflejos en el agua por ejemplo.
Otro elemento para tener en cuenta al grabar es el contraste, en especial de las sombras, que de día son más duras que de noche, lo mejor es grabar a contraluz, y usando para los focos difusores, con los que suavizar un más la luz, así de este modo las sombras serán más suaves y cercanas a la que tendrían en la hora nocturna.
Por último, hablar de la postproducción y montaje cinematográfico, tras grabar, se puede retocar en programas, corrigiendo el color o contraste, como por ejemplo en como en Adobe Premiere; para ello lo que habrá que hacer es crear una capa de ajuste y situándola encima del clip en la línea temporal. Tras esto seleccionamos el look SL BLUE DAY4NITE en el apartado de color, ajustamos la intensidad y temperatura. Para finalizar, reducimos la saturación a la vez que aumentamos el contraste. Si hubiera que retocar el cielo habrá que recurrir a la rotoscopia.