Charleston ofrece el encanto propio de las ciudades pequeñas, desde patios con sombra y antiguas casas victorianas hasta coches de caballos y seis (sí, ¡seis!) hermosas playas. Pero, aunque el ambiente clásico del sur de Estados Unidos es un gran atractivo, este maravilloso sitio costero tiene muchas atracciones equiparables a las grandes ciudades. Así que no dudes en visitar los lugares históricos (entre otros: Middleton Place, el Museo Nacional de Fort Sumter o el French Quarter, por ejemplo), pero reserva tiempo para conocer el lado más contemporáneo de la ciudad. Allí encontrarás el Museo Internacional Afroamericano, más de 30 galerías de arte y una oferta gastronómica dinámica y en constante evolución que tiene de todo, desde productos básicos del País bajo de Carolina del Sur (sí, estamos hablando de pollo frito) hasta tapas modernas.