Eternamente enamorados

Dura historia de un matrimonio maduro irlandés que años después de perder a su única hija, deben enfrentarse al cáncer de mama que se le declara a la mujer.
Tom y Joan son una pareja que llevan más de 30 años juntos y han pasado por muchas situaciones en la vida. Llevan una existencia monótona, rutinaria, podemos ver cómo van a hacer las compras al supermercado, las pequeñas discusiones de que comidas consumir y que no por la salud de Tom, observamos sus caminatas junto al río que practican por las frías mañanas en las vísperas de Navidad. Toda esa tranquilidad se ve totalmente alterada cuando Joan se descubre un bulto junto a uno de sus pechos y los posteriores estudios médicos arrojan que tiene cáncer de mama. De aquí en más todo en la película es la enfermedad de Joan, el tratamiento, la lucha, todo muy deprimente lo que provoca que en lugar de disfrutar la historia, el espectador la sufra.
Manville y Neeson si cumplen muy bien en la historia, haciendo a sus personajes totalmente creíbles. De no conocerla de antes, jamás podría creer que Lesley Manville sea actriz. En esta película parece una señora totalmente común, podría ser la mama o la vecina de cualquiera de nosotros, gran trabajo de la intérprete británica.