Conoce a Erik Messerschmidt un genio detrás de la estética visual en el cine
Erik Messerschmidt emergió en el ámbito cinematográfico como un talentoso gaffer en series televisivas de renombre, como Mad Men y Bones. Su salto al rol de director de fotografía tuvo lugar en el set de Perdida, donde David Fincher, impresionado por su habilidad y gusto, lo ascendió a fotógrafo principal en su serie de Netflix, Mindhunter. Esta colaboración llevó a Messerschmidt a trabajar en Mank, la película en blanco y negro de Fincher, por la que recibió un merecido reconocimiento y un Premio de la Academia.
En el caso de El asesino, la colaboración entre Fincher y Messerschmidt fue diferente desde el inicio. El foco de sus conversaciones no se centró en la estética visual, sino en la estructura narrativa y el ritmo del filme. La paleta y el estilo visual se desarrollaron más adelante en el proceso de producción.
La estética de El asesino fue moldeada por el personaje principal interpretado por Fassbender, cuya perspectiva es transmitida magistralmente por Messerschmidt y Fincher a través del uso de lentes y posicionamiento de la cámara. En cambio, Ferrari presenta dos enfoques distintos para las secuencias de actuación y las de carreras, cada una tratada como experiencias visuales separadas.
Messerschmidt describió cómo trabajaron para establecer un diálogo entre la subjetividad y objetividad en El asesino, ajustando el enfoque de la cámara para reflejar el control del personaje. En el caso de Ferrari, se esforzó por capturar la riqueza visual de la luz de los pintores italianos, creando imágenes que podrían ser sacadas de la película y convertirse en obras de arte independientes.
En ambas películas, Messerschmidt destacó la importancia de la colaboración entre los actores y el equipo de cámara, resaltando la rareza de esta conexión en la industria actual. Su meticulosa planificación y enfoque en la narrativa visual han contribuido a crear dos experiencias cinematográficas excepcionales que impresionan tanto por su estética como por su profundidad narrativa.
A lo largo de los años, Messerschmidt ha demostrado su capacidad para adaptarse a diferentes narrativas visuales y estilos cinematográficos, contribuyendo a la realización de filmes que han dejado una marca significativa en la industria. Con su dedicación a la narración visual y su agudo sentido estilístico, sigue siendo una fuerza destacada en la cinematografía contemporánea. @mundiario
