Frases célebres de Federico Fellini

Federico Fellini (20 de enero de 1920-31 de octubre de 1993) fue un director de cine italiano, considerado por muchos como el mejor de todos los tiempos. Conocido por su distintivo estilo narrativo y extravagancia visual, el trabajo de Fellini ha dejado una huella indeleble en el panorama cinematográfico mundial.

Su incursión en el cine comenzó en la década de 1940 cuando comenzó a escribir guiones para películas italianas y a trabajar con cineastas de renombre como Roberto Rossellini. La primera aventura como director de Fellini fue "Variety Lights" (1950), codirigida con Alberto Lattuada. Sin embargo, fue "El jeque blanco" (1952), su debut como director en solitario, la que marcó el comienzo de su ilustre carrera como cineasta.

Sus obras están repletas de escenas del mundo del circo que le apasionó desde niño y con un marcado tono autobiográfico y repleto de elementos fantásticos. Obtuvo su primer Oscar por “La Strada” y recibió hasta un total de 4 estatuillas (aunque no al mejor director) y estuvo nominado en 12 ocasiones a los premios de la academia del cine.

Es más, cuatro directores, entre ellos Fellini (Stanley Kubrick, Sidney Lumet y Peter Weir) han sido nominados el Óscar al mejor director en cuatro ocasiones y nunca llegaron a ganarlo. El más laureado ha sido John Ford.

Películas inolvidables de Fellini pasan por “La dolce vita”, “La Strada”, “Fellini ocho y medio”, “Aamcord”, “Satiricón”, “Los clowns”...

Os dejamos con sus frases más célebres:

"Cuando el director filma, cuando entra en contacto con la realidad, la página escrita ya no le interesa".

"La experiencia es lo que se obtiene al mismo tiempo buscando otra cosa".

“El único realista de verdad es el visionario”.

"Un buen vino es como una buena película: dura un instante y te deja en la boca un sabor a gloria; es nuevo en cada sorbo y, como ocurre con las películas, nace y renace en cada saboreador".

"El arte no resuelve los problemas, en todo caso los plantea, los crea".

“No me diga lo que estoy haciendo. No quiero saber”.

"Mi interés histórico es bastante escaso. Yo no soy un historiador, sino, en todo caso, un ficciohistoriador, y un ficciocientífico".

“El negocio del cine es macabro, grotesco: es una mezcla de partido de fútbol y de burdel”.

"Son necesarias las capitales para poner en circulación las ideas".

“Cada idioma es un modo distinto de ver la vida”.

"Todo arte es autobiográfico".

“No hay final. No hay principio. Es sólo la infinita pasión de la vida”.

"Con frecuencia se acusa a la gente de repetirse precisamente cuando cambia, cuando crece".

“No voy a demostrar nada, voy a mostrarlo”.

"Mi trabajo es mi única relación con el todo".

“Chaplin es el Adan del que todos descendemos”.

"Sólo existes por lo que haces".

“Un artesano que no tiene nada que decir, pero sabe cómo decirlo”.

"Los payasos son los primeros y más antiguos contestatarios, y es una lástima que estén destinados a desaparecer ante el acoso de la civilización tecnológica. No solo desaparece un micro universo humano fascinante, sino una forma de vida, una concepción del mundo, un capítulo de la historia de la civilización".

“La televisión es el espejo donde se refleja la derrota de todo nuestro sistema cultural”.

"Los museos y las bibliotecas no están hechos para los artistas; pero yo soy un lector casual y desordenado. No soy alguien informado".

"Un buen comienzo y un buen final hacen una buena película, siempre y cuando estén cerca uno del otro".

“Hablar de sueños es como hablar de películas, ya que el cine utiliza el lenguaje de los sueños: años pueden pasar en segundos y se puede saltar en un lugar a otro”.

"Una película debe ser, en algún modo, como la vida: debe contener imprevistos, eventos inesperados, errores.".