Biografía de Henry Cavill (1983)

Henry William Dalgliesh Cavill, más conocido como Henry Cavill, nació el 5 de mayo de 1983 en Jersey, concretamente en las Islas del Canal, que dependen de la corona británica. Hijo de Colin Cavill, corredor de bolsa, y Marianne, tiene 3 hermanos mayores, Piers, Nick y Simon; y uno menor Charlie.

Durante su niñez, Henry estudió en la escuela privada St. Michel’s, ubicada en Jersey. Más tarde fue inscrito en la escuela pública Stowe, un internado situado en Buckingham (Inglaterra). Durante estos años, Henry comenzó a actuar en obras de teatro escolares, donde se recreaban clásicos de la literatura inglesa como “El sueño de una noche de verano” o “Hamlet” de William Shakespeare y el musical “Grease”.

Su debut cinematográfico llegó en 2001 con Laguna, dirigida por Demis Berry y donde obtuvo el rol de uno de los personajes principales. De esta manera, se le abrieron las puertas en el mundo del cine, y en el año 2002 participó en La venganza del Conde de Montecristo dirigida por Kevin Reynolds y basada en la novela de Alejandro Dumas. Cavill tenía 18 años y ya había desarrollado la mandíbula cuadrada y mirada penetrante que pronto haría de él un hombre de éxito.

Tan buena fue la interpretación de Henry como el hijo joven del Conde de Montecristo que Stephenie Meyer, autora de la saga Crepúsculo, lo llamaba su “perfecto Edward”. Sin embargo, para cuando comenzaron a rodar Crepúsculo Henry Cavill tenía 25 años y ya era tarde para interpretar a un joven de 17 años. Y así, el papel de Edward Cullen recayó en Robert Pattinson. Henry ya había perdido otro papel con Robert Pattinson. Los fans de otra de las sagas llevada al cine, Harry Potter, hicieron todo lo posible para que el papel de Cedric Diggory fuera interpretado por Cavill.

Pero el camino de Henry Cavill a la inmortalidad ha sido turbulento. En 2005, Cavill era un contendiente final para el papel de James Bond en 007 Casino Royale. Los productores y el director Martin Campbell se debatían entre él y Daniel Craig. Finalmente los productores prefirieron a un Bond más cerca de los 30. Estuvo muy cerca de convertirse en el agente 007 y por estar pendiente de esta elección tuvo que rechazar el proyecto de Zack Snyder, 300. Pero la mala suerte de Henry Cavill fue más allá. Si era demasiado “viejo” para interpretar al vampiro Edward y demasiado joven para ser James Bond, Henry era perfecto para ser el nuevo Bruce Wayne. Pero este papel fue para Christian Bale.

Fue apodado por la revista Empire como el “hombre más desafortunado de Hollywood”. Sí, perdió estos papeles por actores más conocidos, pero el destino le tenía preparo un viaje más valioso. Comenzó por obtener pequeños papeles de cine en Tristán + Isolda (2006) y Stardust (2007).

Para más tarde conseguir el papel que le llevaría hasta lo más alto. Fue Charles Brandon, duque de Suffolk y cuñado del rey más atractivo y poderoso de la pequeña pantalla, Enrique VIII (interpretado por Jonathan Rhys Meyers). Ha brillado con luz propia en la serie Los Tudor y le ha conducido a ser uno de los actores con gran proyección del cine británico.

Ahora su suerte ha cambiado y en medio de la reciente oleada de cine superheroico que invade las pantallas de cine, Henry Cavill está llegando a la inmortalidad con Teseo, un mortal a quien Zeus le encargará una misión que puede salvar a todo la humanidad. Comparte cartel en Immortals con Mickey Rourke, Kellan Lutz, Stephen Dorff y John Hurt.

No obstante, el papel que lleva esperando toda la vida es el de poder ponerse el traje de Superman. Henry ha conseguido ser el actor perfecto para interpretar al superhéroe por excelencia. Snyder está convencido de que Cavill “es la mejor elección para vestir la capa y el emblema de la S”.

Henry es un apasionado del rugby, deporte que ya no practica debido a las lesiones sufridas en el pasado. Tiene un don para los idiomas y un profundo interés por la egiptología. Menos mal que la actuación le pilló primero, porque si no el séptimo arte hubiera perdido a un gran actor. De no haber sido actor, Cavill se hubiera unido a las Fuerzas Armadas movido por su “orgullo patriótico”. Ha declarado que nunca sale de casa sin dinero, tarjetas de crédito y pasaporte. Y su prenda favorita es una chaqueta de cuero marrón, un artículo que nunca puede faltar en su fondo de armario.

Desde el pasado 5 de mayo, Henry Cavill está comprometido con Ellen Whitaker, una amazona olímpica. Aunque sea el nuevo Superman, Henry Cavill le pidió matrimonio a la vieja usanza, llamó al padre de Ellen, Stephen, para pedirle la mano de su hija. “Yo no lo podía creer cuando me pidió que me casara con él porque pensaba que estábamos en Los Ángeles para celebrar su cumpleaños”, afirmó Ellen.