Margarita de Dinamarca y su marido, el fallecido príncipe Enriquepinterest

El príncipe consorte Henri Marie Jean André de Laborde, conde de Monpezat y esposo de la reina Margarita II, conocido en España como Enrique de Dinamarca, ha fallecido a última hora del martes 13 de febrero a los 83 años de edad a las 23.18 horas en el castillo de Fredensborg, residencia oficial de la familia real danesa.

La casa real de Dinamarca ha informado de su fallecimiento con un comunicado que ha publicado en su página web y redes sociales.

xView full post on X

Enrique de Dinamarca era un guapo aristócrata, hijo del conde André de Laborde de Monpezat, que pasó su infancia en la Indochina francesa. Se licenció en Derecho y Políticas en la Universidad de la Soborna en París, pasó largas temporadas en China y Vietman llevado por un espíritu aventurero y viajero. Tras su estancia por el continente asiático desarrolló una carrera diplomática. Este último hecho fue lo que le llevó a conocer en Londres a la entonces princesa Margarita que se encontraba en la capital británica estudiando un curso de Economía.

Margarita y Enrique de Dinamarca el día de su bodapinterest

Fue un amor a primera vista y la reina Margarita ha llegado a declarar que "cuando le vi por primera vez, sentí que el cielo explotaba".

La pareja protagonizó una de las bodas del siglo en la catedral de Holmen en Copenhage el 10 de junio de 1967. Un año después nacía el siguiente heredero al trono danés, Federico, y en 1969, Joaquín, el segundo hijo de la pareja.

En enero de 1972 Margarita fue proclamada reina, mientras que a él, las leyes danesas le obligaron a resignarse a un papel secundario como príncipe, hecho que nunca aceptó y que no tuvo reparos en declararlo a la prensa.

Familia Real Danesapinterest

"Hoy a la mujer se le da el título de reina, pero el marido de una reina no se convierte en rey, por lo que la relación de pareja queda desequilibrada a ojos de la opinión pública y eso es traumático" afirmó en una entrevista no autorizada por la casa real y en la que se quejaba abiertamente sentirse "relegado" e "inútil" y recriminaba a la sociedad danesa que él no pudiera ser rey al negarse a cambiar la legislación vigente respecto a ese tema cuando se suponía que era una de las más igualitarias del mundo.

Su mujer, enamorada de él, hizo todo lo posible por cambiar la situación, pero finalmente no pudo ser.

A partir de ese momento, el príncipe comenzó a protagonizar titulares que restaban importancia a su carácter abierto y cosmopolita. Tan dolido estaba con su papel de secundario en la monarquía de Dinamarca que llegó a decir que no quería ser enterrado al lado de su mujer, en el panteón real.

Margarita y Enrique de Dinamarca con Guillermo y Máxima de Holandapinterest

Uno de sus desplantes más sonados a la corona danesa fue en 2002 cuando se negó a acompañar a la reina Margarita a la boda de su ahijado, el príncipe heredero Guillermo de Holanda con Máxima Zorreguieta.

En 2005 fue ascendido a príncipe consorte, como el duque de Edimburgo, el marido de la Reina Isabel de Inglaterra y el príncipe Claus, consorte de la Reina Beatriz de los Países Bajos, pero no llegó nunca el título tan ansiado de rey.

Su malestar fue en aumento y se plasmó cuando tampoco acudió a los actos de celebración del 75 cumpleaños de su mujer alegando una gripe, y a los que sí acudió el resto de la familia al completo.

Reina Margarita de Dinamarca con su familia en el 75 cumpleañospinterest

Tras estas sonadas ausencias, la casa real danesa tuvo que reconocer que el marido de la reina Margarita padecía demencia senil que avanzaba con rapidez y en 2016 se anunció su retirada de la vida pública.

Finalmente, el príncipe falleció rodeado de su familia sin haber visto cumplido su sueño de ser rey.

Enrique de Dinamarca con su mujer, la Reina Margaritapinterest

El funeral se celebrará el 20 de febrero de forma privada ya que el marido de la reina Margarita no quería que su muerte se convirtiera en un asunto de estado. La ceremonia religiosa será oficiada por el obispo Erik Norman, tendrá lugar en la capilla del palacio de Christiansborg, en Copenhague y sólo asistirán sus familiares y amigos más cercanos.