Castillo de Clos-Lucé

A solo unos cientos de metros del centro de Amboise, en el valle del Loira, en Francia, se alza orgullo el castillo de Clos-Lucé.

En su interior se puede descubrir la fascinante casa e inventos de uno de los más grandes cerebros y artistas más conocidos del último milenio: Leonardo da Vinci.

Da Vinci en el castillo

Fue en 1516 cuando el rey Francisco I de Francia invitó a Leonardo da Vinci a vivir en el castillo de Clos-Lucé, ofreciéndole un hogar muy cerca del castillo de Amboise para que pudiera trabajar en paz y que pudiesen verse con frecuencia. Da Vinci, por su parte, proveyó dinero y sirvientes.

En aquel momento Leonardo ya era reconocido en toda Europa como poseedor de una mente brillante e inventiva.

Leonardo da Vinci vivió y trabajó en el castillo de Clos-Lucé durante tres años, hasta su muerte el 2 de mayo de 1519.

Durante los tres años que residió en el castillo, fue imposible caracterizar la obra de da Vinci. Y es que, entre otros, fue artista, ingeniero, botánico entusiasta e inventor.

Entre los logros obtenidos durante su estancia en el castillo de Clos-Lucé, Da Vinci trabajó en proyectos tan diversos como la gran escalinata del castillo de Chambord, el drenaje de las marismas en la región de Sologne y la planificación de una ciudad ideal en Romorantin.

Historia del castillo de Clos-Lucé

Cincuenta años antes de la llegada de Da Vinci, el castillo, en aquel momento llamado Manoir du Cloux, era una propiedad fortificada, aunque hoy día queda muy poco de las fortificaciones originales.

Carlos VIII compró el castillo de Clos-Lucé en 1490 y lo transformó de una fortaleza medieval a una propiedad más adecuada como residencia de verano para los reyes de Francia. También mandó construir la capilla para que la reina Ana de Bretaña tuviera un lugar donde llorar a sus hijos.

Fue el rey Francisco I, en ese momento el duque de Angulema, y ​​su hermana, quienes primero comenzaron a invitar a grandes artistas y arquitectos del Renacimiento al castillo.

Fue en este contexto cuando Francisco I invitó a Leonardo da Vinci a vivir en el castillo. Se dice que da Vinci cruzó los Alpes en una mula llevando consigo algunas de sus obras de arte más importantes, como la Mona Lisa y el San Juan Bautista.

Jardines del castillo de Clos-Lucé en los que se recrean las ideas de Leonardo da Vinci.

Con la muerte de Leonardo, los días de gloria terminaron para el castillo de Clos-Lucé, que únicamente sobrevivió porque la familia propietarioa del castillo de Amboise en aquel momento se hizo cargo de su reforma tras sufrir severos daños durante la Revolución francesa.

Los trabajos de restauración se han sucedido en el castillo de Clos-Lucé a lo largo de los últimos 50 años y partes sustanciales del edificio han sido restauradas a la apariencia que tenían en la época en la que Leonardo da Vinci residió allí.

Qué ver en el castillo de Clos-Lucé

Si con anterioridad se han visitado algunos de los castillos más imponentes e impactantes del valle del Loira, Clos-Lucé quizás se vea más como una gran casa solariega que como un castillo.

La visita al castillo de Clos-Lucé se divide en tres partes.

Habitación de Leonardo da Vinci.

Parte 1: la propia casa solariega. un edificio de ladrillo rojo muy atractivo con detalles en piedra. Dentro de la casa se han restaurado varias de las habitaciones importantes, incluidas las de Margarita de Valois y da Vinci, las cocinas, la Cámara del Consejo y los frescos de la capilla de la Reina Ana.

Máquina voladora ideada por da Vinci.

Parte 2: salas subterráneas del castillo. En ellas ahora se pueden ver recreaciones detalladas de 40 de los inventos de da Vinci. En estas salas se puede observar cómo muchas de aquellas ideas se materializaron siglos después, destacando una máquina voladora, una ametralladora y un automóvil.

Parte 3: jardines y zonas verdes que rodean el castillo. Son una parte fundamental de la visita. Incluyen más recreaciones de las ideas de Leonardo da Vinci, como un puente de dos niveles, presentaciones de algunas de sus obras en un entorno boscoso, el palomar del castillo original, un gran jardín natural llamado Jardín de Leonardo y un pequeño lago con botes.

Clos-Lucé tiene mucho para ver y disfrutar, y grandes áreas de césped donde poder sentarse y relajarse, además de una tienda de té y restaurante. El castillo está abierto todos los días del año, excepto el día de Navidad y el de Año Nuevo. La entrada cuesta alrededor de los 16€.

Información práctica: horarios, entradas y precios

Castillo de Clos-Lucé en el mapa

Castillo de Clos-Lucé desde el aire