Esta pequeña ciudad del este de Connecticut tiene pueblos pequeños, carreteras pintorescas que serpentean por el campo de montaña y restos de molinos de los siglos XVIII y XIX.
El paisaje está salpicado de espacios naturales públicos conectados por senderos como el Blue-Blazed Nipmuck Trail.
La presencia de la Universidad de Connecticut en Storrs da a Mansfield una verdadera pastilla cultural.
El Jorgensen Center for the Performing Arts de Uconn acoge una gran cantidad de artistas y grandes conjuntos, y el William Benton Museum of Art tiene una colección famosa de arte americano y exposiciones curadas por expertos.
El Ballard Institute and Puppet Museum es otra pluma de la gorra de Uconn, con una de las tres mayores colecciones de esta forma de arte del país.
Exploramos mejores cosas que hacer en Mansfield:
1. Centro Jorgensen de Artes Escénicas
Fuente: Ken Wolter / shutterstockLa presencia de Uconn da a Mansfield el tipo de lugar de artes escénicas que normalmente esperarías encontrar en una gran ciudad.
Construido a mediados de la década de 1950, el Jorgensen Center for the Performing Arts tiene capacidad para más de 2.600 personas y es el mayor programa de actuación universitario de Nueva Inglaterra.
Hasta 30 artistas y conjuntos de renombre nacional e internacional aparecen en el centro todos los años.
La selección es también ecléctica, que va desde la música clásica hasta la universal, la danza clásica y contemporánea, la comedia y el entretenimiento familiar.
Para una degustación, el artista de salsa Gilberto Santa Rosa, el humorista Hassan Minhaj, los Boston Pops y la Orquesta Sinfónica Nacional de Ucrania se han reservado para finales del 2019.
2. Museo de Arte William Benton
Fuente: Museo de Arte William Benton / facebookEl famoso museo de arte de la UConn se abrió en 1967 en el edificio gótico colegiado, que había sido diseñado en la década de 1920 como comedor principal de la universidad.
La colección del museo se remonta a 1933, cuando el presidente del Connecticut Agricultural College (como antes se conocía UConn), Charles Lewis Beach, legó su colección a la universidad, y ha ido creciendo a lo largo de las décadas .
Hoy en día destaca por su arte americano, de artistas como Ellen Emmet Rand, Ernest Lawson, Henry Ward Ranger, Childe Hassam, Thomas Hart Benton y Charles Harold Davis.
Esto se complementa con obras de un conjunto de luminarias europeas como Gustav Klimt, Georges Braque, Edward Burne-Jones y Käthe Kollwitz.
En total existen 6.000 pinturas, grabados, acuarelas, dibujos, esculturas y fotografías.
Una selección de este inventario se exhibe permanentemente, junto a exposiciones a corto plazo que cubren artistas individuales, regiones del mundo o temas.
3. Parque de aventuras Storrs
Fuente: Storrs Adventure Park / facebookLa diversión activa en familia te espera en esta atracción de cuerdas altas en el exuberante bosque mixto de Storrs.
El parque de aventuras tiene ocho pistas separadas de cuerdas altas, siete de las cuales han probado transiciones elevadas por superar, compuestas de madera, cable y cuerda.
El otro camino, Pine Rush, es un curso de tirolina designado con seis emocionantes líneas.
Hay 80 retos únicos en el Parque de Aventuras, por lo que la diversión durará mientras te quede energía! Se proporcionan arneses y equipamiento, junto con una sesión informativa de seguridad que le muestra cómo subir y utilizar las tirolinas del parque.
4. Instituto Ballard y Museo de la Nina
Fuente: Instituto Ballard y Museo de las muñecas / facebookLa Universidad de Connecticut gestiona un programa de artes de títeres sin igual en Estados Unidos y creado por el gran titiritero Frank W.
Ballard (1929-2010). En Storrs, el Instituto y Museo Ballard Doll es mantenido por la universidad y cuenta con una de las tres colecciones de muñecas más grandes del país.
Entre las 2.500 piezas de todo el mundo se encuentran títeres de cuerpo, títeres de sombras, marionetas, títeres de vara y títeres de guante, junto con escenografías y accesorios elaborados de forma compleja.
Las selecciones de esta reserva aparecen en las exposiciones del museo, y la biblioteca de investigación del instituto contiene libros, recortables, guiones, pósters, audio e imágenes que representan la historia de los títeres de todo el mundo.
También hay un calendario muy activo en el instituto para actuaciones, talleres de títeres en diferentes disciplinas, confección de máscaras y mucho más.
5. Mansfield Drive-In Theatre
Fuente: jjbers / FlickrLa mayor de las últimas salas de cine de Connecticut supervivientes está aquí mismo en Mansfield.
Inaugurado en 1954 y proyectando películas durante los meses de primavera y verano, el teatro cuenta con 950 plazas y tres pantallas de 110 pies de ancho (33,5 metros). Cada pantalla incluye una factura doble nocturna de nuevos estrenos de Hollywood, y las entradas para adultos cuestan 11 dólares en la puerta y 9,99 dólares por adelantado online.
Un snack-bar sirve clásicos del cine como palomitas, refrescos, perros calientes, pizza y hamburguesas.
El sitio funciona como un mercado de pulgas muy popular los domingos por la mañana, comercializando en una gran sala y decenas de vendedores al aire libre que vienen de todo, desde cristal hasta cerámica, instrumentos musicales, rótulos antiguos, muebles y objetos de colección.
6. Parque estatal de Mansfield Hollow
Fuente: tomorrowlong / FlickrInmediatamente después de la Segunda Guerra Mundial, el río Natchaug fue embalsado por el Cuerpo de Ingenieros del Ejército de Estados Unidos, creando un lago de 500 acres para el suministro público de agua.
Al ser un embalse, en el lago Mansfield Hollow no está permitido nadar, pero la pesca, la navegación no motorizada y el kayak están a la orden del día, mientras que el denso bosque de la orilla oeste se presta para realizar senderismo, paseos a caballo, bicicleta de montaña. , y esquí de fondo – esquí de fondo en una amplia gama de senderos en buen estado.
La parte sudeste del Blue-Blazed Nipmuck Trail pasa por el parque en su camino hacia 34,5 millas de los bosques del noreste del estado.
7. Museo deportivo del patrimonio husky J. Robert Donnelly
Los aficionados a los huskies o cualquier persona interesada en el mundo de los deportes universitarios encontrarán algo que amar en este museo del campus de Storrs de Uconn.
Todos los aspectos del atletismo interuniversitario de Uconn están documentados en el Husky Heritage Sports Museum, con más de un siglo de uniformes, banderolas, fotos de archivo, pelotas de época y trofeos.
La experiencia comienza con la Galería de Campeones Nacionales, celebrando los 12 equipos de cuatro deportes distintos que han recorrido la distancia.
El más dominante de ellos son los equipos de baloncesto femenino que conquistaron todos los entrenados por Geno Auriemma que ganaron cinco títulos entre 1995 y 2004. Una de las estrellas de esa época, Rebecca Lobo, es homenajeada con un recorte a medida real, junto con 10xNBA All. -Ray Allen, graduado de Star y UConn.
También verá sus nombres en 88 pancartas de gran tamaño que rinden homenaje a los 88 All-Stars de Connecticut de 17 deportes diferentes.
8. Connecticut Repertory Theatre (CRT)
Fuente: Connecticut Repertory Theatre / facebookAunque pertenece a la Universidad de Connecticut en el campus de Storrs, la CRT no debe tomarse a la ligera artísticamente, ya que sirve como piedra de toque cultural para Connecticut y Nueva Inglaterra.
Las producciones están diseñadas, dirigidas y emitidas con artistas profesionales visitantes para crear el entorno de aprendizaje perfecto para los estudiantes.
En tres salas, entre ellas Harriet S. de 485 de asientos del Centro Jorgensen.
El Teatro Jorgensen, CRT ofrece una serie de suscripción de seis obras y musicales cada temporada, vendiendo más de 20.000 entradas cada año.
CRT también es la plataforma principal para el aclamado programa de artes de títeres de UConn.
El curioso incidente del perro por la noche, The Cherry Orchard, Shakespeare in Love y Little Shop of Horrors se han preparado para la temporada 2019-20.
9. Cementerio Mansfield Center
Fuente: en.wikipedia.orgUna pieza rara de la historia temprana de Mansfield se encuentra en la esquina de Storrs Road y Cemetery Road.
El cementerio de Mansfield Center, en el Registro Nacional de Sitios Históricos, data de 1693 y su entierro final tuvo lugar en la década de 1870.
El sitio es aclamado por su cantidad de rotuladores delicadamente cortados (unos 180), hechos por algunos de los maestros del comercio de toda la Nueva Inglaterra colonial.
Presentan una gran variedad de símbolos funerarios, así como querubines y patrones geométricos, y se vuelven cada vez más elaborados a medida que avanza a lo largo de las décadas.
El marcador más antiguo es para un Ejercicio Conante, fechado en 1722.
10. Bosque de la UConn
Fuente: LangSun14 / shutterstockAl norte y al este del campus de Storrs y bordeada por el río Fenton existe una gran área de bosque que pertenece a la universidad, pero con senderos a los que se puede acceder el público.
El Nipmuck Trail atraviesa el bosque UConn y, además de arroyos idílicos y bosques tranquilos, existen algunos lugares abandonados para visitar.
En un terreno alto, cerca del punto de acceso de Horsebarn Hill, encontrará los restos bastante extraños de un remonte que va desde el río Fenton, que se remonta a los años 60, cuando aquí había una estación de esquí de corta duración.
Más cerca de Gurleyville Road, encontrará vestigios más curiosos en una serie de largas jaulas de alambre abandonadas erigidas para experimentos de cría de animales en los años 70 y 80.
11. Reserva Eagleville
Fuente: Lyzzette Rivera Montes / facebookEste lugar del río Willimantic de Mansfield tiene una historia industrial apasionante por descubrir en un bucle fácil de una milla.
Gran parte del camino se encuentra en una terraza a orillas del río, y en primavera escuchará los gritos de los pájaros migratorios y las ranas en las piscinas de primavera.
La reserva se encuentra en el lugar de una gran fábrica de algodón de principios del siglo XIX, una de las primeras del estado, cuyos cimientos se encuentran bajo el aparcamiento.
La presa del río se construyó como embalse del molino para alimentar una rueda hidráulica, que estuvo en funcionamiento hasta que el molino se convirtió en energía de vapor en el siglo XIX.
Aquí se fabricaron piezas de rifle durante la Guerra Civil y después de que el negocio fracasara en la Gran Depresión, el molino se reutilizó para hacer suelas de goma antes de cerrar definitivamente en los años cincuenta.
Una pasarela atraviesa la ahora todavía corriente y al este, donde la pista se encuentra con el río, hay una bonita zona de bosque de encinas en lo que antes eran tierras de cultivo.
12. Nathan Hale Homestead
Fuente: Jennifer Yakey-Ault / shutterstockUn viaje de fin de semana que vale la pena hacer, la casa de la infancia del héroe del estado de Connecticut es un cómodo camino hacia el oeste en Coventry.
Nathan Hale (1855-1876) fue colgado por los británicos como espía en la Guerra de la Independencia, con sólo 21 años, mientras estaba en una misión de recogida de inteligencia en Nueva York.
Sus últimas palabras fueron: «Sólo lamento que no tengo más que una vida que perder por mi país». La casa actual de Nathan Hale Homestead se erigió el año de su muerte y se puede visitar para realizar visitas los viernes y los fines de semana de mayo a octubre.
En el interior se encuentran las posesiones de la familia Hale recogidas por el anticuario del siglo XX George Dudley Seymour.
En la propiedad aprenderás como la granja que alimentó la riqueza de la familia Hale, mientras que en el norte y en el sur está el bosque estatal de Nathan Hale de 1.500 acres.
13. Museo del Ferrocarril del Este de Connecticut
Fuente: jjbers / FlickrUna buena idea un fin de semana de verano, este museo del ferrocarril se encuentra en el sitio del antiguo Columbia Junction Freight Yard en el centro de Willimantic.
Lo que encontrará es un largo de pista con una gran variedad de material rodante y una rotonda reconstruida con cimientos que se remontan a 1892. Echa un vistazo al edificio de la estación de Chaplin, que data de principios del siglo XX y se trasladó al museo de la década de 1990. .
En cuanto a locomotoras, existe una EMD SW-8 de 1950, una EMD FL9 de 1960, una SPV de Metro-North Railroad de 1981 (vehículo autopropulsado) y una locomotora Alco S-4 de 1955 que gestiona el ferrocarril Central Vermont .
Un toque divertido es el coche bomba de estilo de la década de 1850 que puede probar.
El gran evento del calendario del museo es el Día del Ferrocarril a finales de agosto, para la música, la comida y los viajes en tren.
14. Viña Cassidy Hill
Fuente: Cassidy Hill Vineyard / facebookEste viñedo en la línea de la ciudad desde Coventry cultiva uvas tintas y blancas como Merlot, Catawba, Cayuga White, Traminette, Vidal Blanc para una selección de vinos de gran prestigio.
El Pink Catawba Rosé de Cassidy Hill ganó el premio Amenti del Vino 2018 «Best in Show» de la Connecticut Wine Society en 2018. El entorno no podría ser más pintoresco en la bodega de cabañas de troncos del viñedo, con vistas lejanas de el este rural de Connecticut.
De abril a diciembre se puede visitar para beber vino en la veranda o un banco bajo el «Thinking Tree», un arce maduro solitario junto a los viñedos.
En verano, puede pasar un viernes por la noche degustando vinos aquí con música en directo.
15. Cuenca de Diana
Fuente: ctwaterfalls.comHay un bonito mirador natural pero poco transitado en el río Nauchug en las afueras de Chaplin.
Junto con los bosques caducifolios y las costas rocosas, la piscina de Diana se encuentra entre un par de pequeñas cascadas, una la llena y otra la vacía.
El más bonito de ellos es el salto de agua inferior, que tiene una mágica cortina de agua que cae desde algo más de un metro hacia arriba.
El escenario es glorioso en otoño con la abundante vegetación a orillas del río.
Tanto la caída superior como la inferior se encuentran a poco más de un minuto a pie de la zona de aparcamiento.
