'Susurros del corazón': Una muestra de por qué la magia de Ghibli siempre será la aspiración inalcanzable de Disney - Las Furias Magazine - Revista Cultural y Feminista

‘Susurros del corazón’: Una muestra de por qué la magia de Ghibli siempre será la aspiración inalcanzable de Disney

Soy Furius Fan, el Películero Porculero, el cinéfilo pérfido, el crítico que vive en estado crítico. A petición del fantástico Furius Fan Fan Robert Luis Stevenson, hoy 28 de octubre y Día Mundial de la Animación, traigo mi primera crítica dedicada al cine de animación… Así que ¡animaos! La película en cuestión es Susurros del corazón, dirigida por Yoshifumi Kondo en1995, y producida por los míticos Estudios Ghibli…

Los Estudios Ghibli han llegado a ser tan grandes e icónicos… ¡que ahora la Walt Disney Pictures ha empezado a llamarse el “Estudio Ghibli europeoamericano”!

La diferencia esencial entre un estudio y el otro está en que Disney intenta conquistar tu imaginación a través de mundos fantásticos idealizados e inalcanzables al tuyo, con historias tóxicas moralistas en una lectura maniqueísta, y Ghibli intenta estimular tu imaginación a través de mundos fantásticos alcanzables a través de la capacidad del ser humano de soñar, con personajes que se comportan como seres humanos de carne y hueso pese a estar dibujados en tinta, eso quiere decir moralmente imperfectos. Casi nada. 

Porque esos mundos que evocan de la factoría Ghibli, se esconden a la vuelta de la esquina, debajo de la alfombra, dentro de un libro y en lo profundo de la cabeza de un personaje que no tiene por qué ser un príncipe, una princesa o un animal humanizado, sino el niño o niña que todos llevamos dentro.

Susurros del corazón.
Susurros del corazón.

Susurros del corazón: Hayao Miyazaki y sus capacidad para abrir las puertas de tu imaginación

Susurros del corazón cuenta también en sus filas como firmante del guion al mismísimo Hayao Miyazaki, adaptando el manga de Aoi Hiiragi. Miyazaki es uno de los padres fundadores del estudio, jefazo de los mismos, el buque insignia, director y animador también de todos los grandes títulos: Nausicaa, Mi vecino totoro, Porco Rosso, La princesa Mononoke, El viaje de Chihiro, El viento se levanta Casi nada.

Pues aquí se vestía de guionista, y productor obviamente, cediendo la batuta de la dirección al malogrado Yoshifumi Kondo, quien fallecería en 1998 convirtiéndose Susurros del corazón en su única película dirigida y convirtiéndose él en el hijo heredero, metafórica- y literalmente, que Miyazaki nunca tuvo… Porque el que tuvo… aish… Como director no es que le diera muchas alegrías a su padre… Y si no, mirad la reacción al ver la primera película dirigida por Miyazaki Jr, Los cuentos de Terramar.

El cine de animación no es un género, es un medio distinto. De entrada, no necesitas cámaras, actores, rodajes… Bueno, técnicamente sí necesitas todo eso, porque el actor pondrá la voz, y al menos en la animación 2D, los dibujos se fotografiaban fotograma a fotograma… La cosa tenía truco… o truca (nombre de la cámara multiplano para cine de animación). Pero ya nos entendemos. 

Y lo que expresa el cine de animación al sintetizar la realidad en trazos, provoca que la ilustración y el diseño plástico sea lo que descubre el alma de lo representado. En ese sentido sirve como medio ideal para crear un puente entre el mundo y tu imaginación, porque está más cerca de lo abstracto. Y las películas de Ghibli como es el caso, su discurso mismo, su dedicación temática, tiene que ver con ese poder de la imaginación. 

Susurros del corazón.
Susurros del corazón.

Susurros del corazón, o cómo el amor por la literatura te puede reconciliar con la vida

Susurros del corazón nos cuenta un relato de iniciación en la adolescencia sobre una chica enamorada de los libros que aprende a enamorarse de la vida y acaba enseñándoselo a los demás. Sin héroes, sin malos… con personajes comportándose de manera humana, siendo generosos, egoístas, torpes… Una película divertida y poética, tierna, que te deja blandito… Casi nada. Como siga así voy a tener que cambiar el nombre a Blanditus Fan…

La animación es tan bonita que hasta perdonas la inconsistencia, por otro lado, constante en los estudios Ghibli, de unos guiones tal vez no muy bien armados, o mejor dicho, armados de una manera despreocupada en la armadura en términos de dramaturgia férrea… pero que sí consiguen desarmarte. Y si no me creéis, intentad escuchar solo una vez la cover japonesa que se marcan de la canción country de Country road. ¡Es mejor que la original! ¡Una apropiación cultural técnica, que se convierte en apreciación! Una escena épica… en la que no pasa nada… Porque cuando no pasa nada… pasan cosas…

¡Aquí Furius Fan!  Si te ha gustado este vídeo, si quieres que te haga llegar mi opinión de cualquier película, la que sea…, ¡las he visto todas! Incluyendo el vídeo de tu comunión o el de tus vacaciones en Matalascabras… pídelo ¡pide por ese teclado!

Yo solo pediré una cosa a cambio… ¡Suscribíos insensatos!

Y… ¡corten!