Biografia de Paul Hindemith

Paul Hindemith

(Hanau, 1895 - Francfort, 1963) Compositor alem�n. Fue una de las figuras m�s importantes dentro del panorama musical alem�n de la primera mitad del siglo XX. Su relevancia radica en que fue uno de los m�s fervientes experimentadores de la m�sica cl�sica del siglo, puesto que trat� de renovar la tonalidad que imperaba en el sistema musical desde hac�a m�s de trescientos a�os. Adem�s, fue uno de los pioneros en la creaci�n de la llamada "m�sica utilitaria" (Gebrauchsmusik), m�sica para poder ser escuchada a cualquier hora del d�a y en cualquier situaci�n. Hindemith ten�a la creencia de que el compositor deb�a actuar como un artesano, al tiempo que deb�a mostrar en su m�sica las necesidades sociales. Como profesor de m�sica, su influencia en las generaciones posteriores de compositores alemanes e internacionales fue muy destacada.


Paul Hindemith

El inter�s por el arte musical apareci� en Paul Hindemith desde que era apenas un niño. Comenz� a tocar el viol�n a muy temprana edad, e incluso realiz� actuaciones en caf�s y en teatros con bandas de baile. Para �l no hab�a trabajo musical que se debiera desde�ar, ya que afirmaba que el conocimiento de todo el espectro musical le favorecer�a en sus futuras composiciones. Inici� sus estudios de viol�n y composici�n a los catorce a�os en la ciudad de Frankfurt, en el Conservatorio Honch (entre 1908 y 1917), donde recibi� las ense�anzas de maestros tan destacados como Arnold Mendelsson y Bernard Sekles.

Desde muy pronto se labr� una merecida reputaci�n, en especial por su m�sica de c�mara y sus �peras expresionistas. Muestra clara de la precocidad de su arte fue que, a partir de 1915 y hasta 1923, desempe�� la labor de direcci�n de la Orquesta de la �pera de Frankfurt, con un breve intervalo para realizar el servicio militar (1917-1918).

Las primeras composiciones de Hindemith se enmarcaron en una �poca posrom�ntica, una etapa convulsa en todos los aspectos de la vida europea tras la Primera Guerra Mundial. Quiz� esta desorientaci�n general puede explicar el continuo cambio de trabajo en Hindemith, quien en este periodo cre� tanto composiciones para bandas de m�sica de baile, impregnadas de todo el ambiente jazz�stico de la �poca, como una Suite para piano (1922) o diferentes obras expresionistas (Der D�mon, 1922; Nusch-Nuschi, 1921). Una gran parte de estas primeras composiciones fue interpretada, con �xito, en los festivales de Donaueschingen, Salzburgo y Venecia entre 1921 y 1925.

Posteriormente, su visi�n creadora cambi� radicalmente, dando paso a una etapa neocl�sica en sus composiciones. En este sentido, trat� de distanciarse lo m�s posible de Stravinsky y lo logr�, ya que mientras �ste trabajaba con variaciones sobre la m�sica de Mozart, Hindemith estaba m�s interesado en las composiciones de Bach. Buena muestra de ello fue su m�sica de c�mara, que inici� con Kammermusik no.1, el primero de una serie de siete trabajos escritos entre 1917 y 1924, en los que Hindemith trataba de imitar los conciertos barrocos, aunque usando una armon�a tonal mucho m�s amplia y a�adiendo unos elementos jazz�sticos muy acordes con la moda de la �poca. Muchas de estas obras eran claros homenajes a los Conciertos de Brandeburgo de Bach.

La idea de experimentaci�n de Hindemith le condujo a utilizar diferentes orquestas de c�mara mezcladas, con las que intentaba llevar a sus extremos la m�sica de contrapunto. La mayor parte de esta m�sica de c�mara era compuesta para el conocido como Amar-Hindemith Quartet (1921-1929), en el que el propio Hindemith tocaba la viola. A pesar de estar volcado en la m�sica de c�mara, Himdemith no desde�aba otros trabajos, como la organizaci�n administrativa del Donaueschingen Festival (1923-30).

En esta d�cada de los veinte realiz� diferentes trabajos encaminados a unir el esp�ritu de los poetas de lengua alemana con el arte de la m�sica. As� fue como escribi� un ciclo de canciones conocido como Die junge Magd (1922), basado en poemas del escritor austr�aco George Trakl. Dos a�os m�s tarde compuso Das Marienleben ('La vida de Mar�a') inspirada en poemas de Rainer Maria Rilke. Tambi�n trat� de componer para orquesta sinf�nica y, as�, en 1926 escribi� la �pera Cadillac, inspirada en el poema de E.T.A. Hoffmann Das Fr�ulein von Scuderi ('La chica de Scuderi'), un melodrama fant�stico de estilo neocl�sico. Al mismo tiempo, no dej� de lado su conocida "m�sica utilitaria", puesto que compuso obras para juegos de ni�os, llev� a cabo sesiones musicales con grupos j�venes y bandas de metal, y realiz� numerosas actuaciones para la radio.

Toda esta productividad art�stica influy� decisivamente en el �mbito musical de la Rep�blica de Weimar, que se extendi� en el tr�nsito entre los dos conflictos mundiales. Una de las obras m�s celebradas de dicha etapa fue su colaboraci�n con Kurt Weill en la composici�n de una cantata conocida como Der Lindberghflug ('La fuga Lindbergh', 1928), dedicada a Bertolt Brecht, para una emisora de radio. Al a�o siguiente, Hindemith dirigi� la ejecuci�n, por primera vez en la historia, del Concierto de Viola de William Walton. Ya al final de esta d�cada, cuando ocupaba el puesto de director principal de la Orquesta de Frankfurt, era reconocido como el compositor m�s importante de su generaci�n. La aclamaci�n internacional que recibi� del mundo musical le vali� para que, en 1927, se le nombrase profesor de composici�n de la Academia de la M�sica de Berl�n.

En la d�cada de los treinta comenz� una nueva etapa en el trabajo de composici�n, que se iniciar�a con la obra maestra Concierto para M�sica de Cuerda y Viol�n (1930). En estos a�os cre� la que se ha calificado como su obra m�s importante, la �pera sobre el pintor Matthias Grünewald (Mathias der Maler). Al mismo tiempo escribi� Sinfon�a Mathias der Maler (1934), que compart�a temas con la anterior. En la citada �pera dramatizaba el dilema que sufr�an los artistas en la sociedad, subrayando el compromiso brechtiano que insist�a en la absoluta responsabilidad del arte y de los artistas.

Como muchos de sus contempor�neos, Hindemith sufri� la herida que produjo a la cultura alemana, y a la sociedad en general, el ascenso al poder del nazismo. La �pera fue puesta en escena en el a�o 1934 por la Orquesta Filarm�nica de Berl�n bajo la direcci�n de Wilhelm Furtw�ngler y caus�, por su tem�tica social, gran impacto en las autoridades nacionalsocialistas, que decidieron prohibirla terminantemente. El director de la orquesta fue expulsado por su osad�a y Hindemith fue denunciado por el mism�simo Goebbels, que lo calific� de bolchevique cultural y de ser un esp�ritu no ario.

Como era de esperar, ante el acoso nazi, Paul Hindemith tuvo que huir precipitadamente de Alemania para refugiarse en Turqu�a. En este pa�s trabaj� denodadamente para crear un sistema de educaci�n musical al estilo occidental, mientras impart�a clases de composici�n en el Conservatorio de Ankara (1935-1937). Su siguiente pa�s de destino fue Estados Unidos, en el que residi� durante m�s de una d�cada y donde logr� una c�tedra en la Universidad de Yale (1940-1951). En el a�o 1950 se le otorg� el Premio Bach de Hamburgo y en 1951 regres� a Europa para seguir con su labor docente en la Universidad de Z�rich, donde permaneci� hasta 1958. En esta etapa de exilio desarroll� una ingente labor creadora, hasta el punto de que suele consider�rsela como la culminaci�n de su carrera art�stica.

Por las muchas obras compuestas se labr� una enorme reputaci�n entre la cr�tica internacional. Tras Mathias der Maler, el contrapunto lineal de sus composiciones se hizo menos �spero, y la tonalidad apareci� con m�s claridad, lo que implic� una mayor belleza en sus piezas, frente a la austeridad caracter�stica de sus a�os anteriores. De esta manera aparecieron obras maestras como Pl�ner Musiktag; Trauermusik (1936), escrita en menos de veinticuatro horas; la coral Serie de canciones para los franceses, compuesta sobre poemas de Rilke (1939); el ballet Nobilissima Visione (1938), basado en la vida de San Francisco; Sinfon�a en Mi desafinado (1940); Sonata para dos pianos (1942); La Metamorfosis sinf�nica de los temas de Carl Maria von Weber (1943); La Sinfon�a Serena (1945); Los Cuatro Temperamentos (1940); Ludus Tonalis (1942); la Sonata para Arpa en Homenaje a Bach (1949); Sinfon�a en Re para banda; o Doce Madrigales.

Asimismo, compuso una impresionante serie de conciertos para diferentes instrumentos, entre los que destacan Viol�n Concerto (1939) y Cello Concerto (1940), aunque tambi�n los hubo dedicados al clarinete, a la trompa y al piano. Entre sus obras m�s personales se encuentra tambi�n When Lilacs Last in the Dooryard Blooms (1946), composici�n escrita tras la muerte del presidente de Estados Unidos Franklin D. Roosevelt y que completaba un poema de Walt Whitman. Adem�s de las obras expuestas destacaron dos magn�ficas �peras, Gran cena de Navidad y su �ltima composici�n, Die Harmonie der Welt ('La armon�a del mundo', 1957).

Finalizada la Segunda Guerra Mundial, la influencia que Hindemith ejerc�a en el mundo musical empez� a ser suplantada por Arnold Schoenberg y Anton Webern. La causa principal fue la oposici�n frontal de Hindemith hacia la dodecafon�a que se impon�a en las composiciones musicales, lo que incluso le llev� a calificarse a s� mismo como un anti-Schoenberg. Esto hizo que compusiese numerosas piezas sat�ricas en las que utilizaba once o trece notas seguidas, con las que intent�, sin resultado, cambiar el pensamiento musical de la �poca. Su trabajo te�rico para sustituir la dodecafon�a lo resumi� en la publicaci�n Unterweisung im Tonsatz ('El arte de la composici�n musical', 1937-1939). No obstante, su producci�n musical no decay� en los �ltimos a�os de su vida; en estas composiciones tard�as se puede encontrar una angustia antes no reflejada. Incluso en su �ltima obra, Die Harmonie del Welt, quiz� cansado de lo infructuoso de su empe�o, se permiti� coincidir en el sonido con las �ltimas composiciones de Schoenberg.

Paul Hindemith fue uno de los principales innovadores en el modernismo musical de la primera mitad del siglo XX. De los cuatro fundadores del modernismo (Arnold Schoenberg, Igor Stravinsky, Bela Bart�k y �l), sin lugar a dudas, Hindemith fue, con diferencia, el que desempe�� una labor educativa m�s importante y un compromiso intelectual m�s activo. De un inter�s te�rico exacerbado, estudi� de manera profunda la filosof�a medieval y los escritos de la iglesia primitiva, as� como los t�picos musicales a lo largo de la historia. Era capaz de tocar todos los instrumentos y fue considerado un virtuoso con la viola y la viola d'amore. Algunos de sus disc�pulos fueron Lukas Foss, Arnold Cooke, Franz Reizenstein y Norman Dello Joio. A su muerte, dej� tras de s� una enorme influencia en la m�sica europea y estadounidense.

C�mo citar este art�culo:
Fernández, Tomás y Tamaro, Elena. «». En Biografías y Vidas. La enciclopedia biográfica en línea [Internet]. Barcelona, España, 2004. Disponible en [fecha de acceso: ].