El calvario de Maria Schneider en el rodaje de El último tango en París

1972. María Schneider, de 19 años, sigue siendo una desconocida para el gran público. Sin embargo, acabamos de ofrecerle el escenario que podría cambiarlo todo. Dentro El último tango en París, lo hará junto a Marlon Brando. Y oficiará bajo la dirección de Bernardo Bertolucci, a quien debemos El conformista (1971): largometraje nominado al Oscar. Para este proyecto, Maria Schneider se negó a rodar con Alain Delon, por consejo de su agencia William Morris. “Es un papel protagónico con Marlon Brando; no puedes rechazarlo”, se la escucha decir. Sin embargo, la actriz tuvo un “mal presentimiento”, como luego le contaría al Correo diario en 2007.

Anatomía de un escándalo

Dentro El último tango en París, Maria Schneider interpreta a Jeanne, una joven que conoce a Paul (Marlon Brando), un cuarentón estadounidense, durante una visita a un apartamento parisino. Entonces comienza una tórrida aventura, en el secreto de estas paredes. Los dos amantes sólo tienen una regla: no revelar nada sobre su identidad. Ni siquiera sus nombres. Un largometraje cuyo rodaje se relata en María, de Jessica Palud, proyectada este lunes 20 de mayo durante el Festival de Cine de Cannes. El director también eligió a Anamaria Vartolomei para interpretar a María y a Matt Dillon para interpretar a Marlon Brando. La película también evoca la tormentosa acogida que tuvo el largometraje de Bernardo Bertolucci.

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A principios de los años 1970, la película causó escándalo con su estreno. Y esto, por sus escenas de sexo sulfurosas. Uno de ellos conmocionó especialmente a la opinión pública. Vemos a Paul clavar a Jeanne en el suelo, antes de sodomizarla usando mantequilla como lubricante, mientras le pide que haga comentarios blasfemos. Una secuencia que indigna a los espectadores. Hasta el punto de que la película fue catalogada como El cineasta también recibe, al igual que los dos actores principales, penas de prisión suspendidas en Italia por pornografía.

“Nunca volví a hacer una escena de desnudo”

Por no hablar del trauma sufrido por María Schneider. Cuando Jeanne llora en la película, su intérprete derrama lágrimas de verdad. En la entrevista concedida a Correo diario En 2007, Maria Schneider, fallecida en febrero de 2011, aseguró que no había sido advertida sobre la escena del trozo de mantequilla. “Sólo me lo contaron antes de hacer la escena y me enojó mucho”, dijo. Debería haber llamado a mi agente o pedirle a mi abogado que viniera al set, porque no se puede obligar a alguien a hacer algo que no está en el guión, pero en ese momento no lo sabía”.

Antes de agregar: “Marlon me dijo: ‘María, no te preocupes, es sólo una película’, pero durante la escena, aunque Marlon estaba fingiendo, mis lágrimas eran reales. Me sentí humillado y, para ser honesto, un poco violado, tanto por Marlon como por Bertolucci. Después de la escena de la “mantequilla”, Marlon no me consoló ni se disculpó. Afortunadamente, sólo fue necesaria una toma”. Una decisión que tendrá graves consecuencias en la carrera de Maria Schneider. Posteriormente, a la actriz sólo se le ofrecerán papeles similares al de Jeanne.

Cruce del desierto

“Nunca volví a hacer una escena de desnudo en una película después El último tango en Parísaunque me ofrecieron muchos papeles como este, dijo Correo diario. Hoy en día la gente está acostumbrada a este tipo de cosas, pero cuando se estrenó la película en 1972, provocó un escándalo”. Un largometraje que también tuvo repercusión en su vida privada. Una travesía por el desierto que la actriz describió en el tabloide.

“Me sentí muy triste porque me trataban como un símbolo sexual; quería ser reconocida como actriz y todo el escándalo y las secuelas de la película me volvieron un poco loca y tuve una crisis nerviosa”, explicó. Antes de revelar que la violencia de la escena la había vuelto adicta a las drogas y la había llevado a realizar varios intentos de suicidio. La guinda del pastel: Maria Schneider sólo habría ganado 2.500 libras (2.900 euros) por este rodaje…

“Ella me odia”

El último tango en París Sin embargo, es elogiada por la crítica y nominada en dos categorías a los Oscar. Bernardo Bertolucci sólo hablará del escándalo sufrido por María Schneider en 2013. “La secuencia de la mantequilla es una idea que tuve con Marlon esa misma mañana (…), explicó. Fui horrible, porque no le avisé a María lo que le esperaba”.

Un discurso durante el cual el cineasta intenta justificar sus acciones: “Para obtener algo, creo que hay que ser completamente libre. No quería que María fingiera humillación y rabia, quería que ella los sintiera como una niña. Ella me odia desde entonces”. Cuando se le pregunta sobre sus posibles arrepentimientos, Bernardo Bertolucci da en el clavo. “No tengo ninguno, pero me siento culpable por no arrepentirme de nada”, afirmó. En diciembre de 2016, en medio del revuelo Me Too, el cineasta mencionó esta escena por última vez, en un comunicado de prensa. “Acerca de El último tango en París“Me gustaría aclarar por última vez un ridículo malentendido que sigue siendo alimentado por los periódicos de todo el mundo”, escribió. Algunos pensaron y aún piensan que María no fue informada de la violencia que sufrió (en el lugar). Es falso ! María lo sabía todo porque había leído el guión donde se describía todo. La única novedad fue la idea de la mantequilla”.

Un alegato poco convincente para Hollywood. Algunos actores, como Jessica Chastain o Chris Evans, se mostraron indignados por su actitud. Dos años después, Bernardo Bertolucci murió en Roma. En 2021, CBS Studios también anuncia que comenzará la producción de la serie. Tango, dedicado a estos 18 meses de rodaje infernal. Un programa que aún no ha visto la luz.