Muere a los 98 a�os Jacques Delors, expresidente de la Comisi�n Europea y arquitecto de la Uni�n

Muere a los 98 a�os Jacques Delors, expresidente de la Comisi�n Europea y arquitecto de la Uni�n

La Voz REDACCI�N

INTERNACIONAL

Jacques Delors, expresidente de la Comisi�n Europea y padre de la Uni�n
Jacques Delors, expresidente de la Comisi�n Europea y padre de la Uni�n Jean-Paul Pelissier | REUTERS

Padre del euro y del programa�Erasmus, el pol�tico socialdem�crata franc�s fue un actor clave en la construcci�n del espacio pol�tico europeo

27 dic 2023 . Actualizado a las 18:56 h.

Europa ha perdido a uno de sus principales referentes pol�ticos, una figura clave en el proceso de construcci�n del espacio pol�tico y econ�mico com�n, el franc�s Jacques Delors, fallecido a los 98 a�os.

Arquitecto de la Uni�n, padre del euro y del programa Erasmus, fue presidente del Gobierno comunitario, la Comisi�n Europea, entre 1985 y 1994.�

En Bruselas�Delors fue�fundamental para hacer avanzar la integraci�n europea. Uno de sus grandes�logros fue la creaci�n en 1987 del programa Erasmus, del que se han beneficiado millones de estudiantes desde entonces.

Ese mismo a�o entr� en vigor el Acta �nica Europea, que supuso la culminaci�n de la creaci�n de un mercado �nico y la consiguiente libre circulaci�n de bienes, servicios, capitales y personas.�

La noticia de la muerte de Delors (Par�s, 1925), que represent� al ala centrista del Partido Socialista franc�s, la dio su hija, la exministra socialdem�crata y actual alcaldesa de Lille, Martine Aubry. El pol�tico franc�s form� parte del primer Gobierno�de�Fran�ois Mitterrand.

En 1994, cuando abandon� la presidencia de la Comisi�n Europea, Delors era uno de los grandes favoritos para competir por la presidencia de Francia, pero renunci� y puso fin a su carrera pol�tica con solo 69 a�os.

Pietro Naj-Oleari

El �ltimo gran europeo

Luis Miguel Pascual (Efe)

Delors, fallecido hoy a los 98 a�os, pas� media vida trabajando para que el sue�o europeo fuera realidad y armado de su infatigable pragmatismo impuls� durante una d�cada la construcci�n comunitaria basada en tres pilares, �la competencia que estimula, la cooperaci�n que refuerza y la solidaridad que une�.

El hombre que presidi� la Comisi�n Europea entre mediados de los 80 y de los 90, un momento clave en el que se conform� el mercado �nico, el euro o la integraci�n de la Alemania del este, fue para muchos el �ltimo gran europeo, el �ltimo que supo encarnar el ideal de la integraci�n frente a las ambiciones nacionales.

Nadie desde su salida del Ejecutivo de la Comisi�n Europea en 1995 ha representado mejor el contrapoder de Bruselas a los intereses de los jefes de Estado.�Delors�y su irrefrenable fe en Europa arrastraron al continente a la mayor aceleraci�n de la integraci�n jam�s conocida.

�Al servicio de los gobiernos, no de un ideal abstracto�

Pero este pol�tico de formaci�n cat�lica y credo socialista, al�rgico a los focos p�blicos y al aplauso adulador, nunca pronunci� grandes salvas en favor de Europa, prefiri� los hechos a las palabras y nada m�s hacerse con las riendas de Bruselas afirm�: �El presidente de la Comisi�n est� al servicio de los gobiernos, no de un ideal abstracto europeo�.

Delors�estaba convencido de que un mercado �nico convertir�a a Europa en un polo econ�mico sin igual, lo que permitir�a preservar el modelo social en el que cre�a.

La competencia como est�mulo no vino acompa�ada de la cooperaci�n y la solidaridad y �l denunci�: �Nadie se enamora solo de un mercado�.

Su pasi�n europea le llev� a renunciar a un destino nacional que aparc� durante a�os, antes de dejar v�a libre a su hija, la exministra Martine Aubry, fiel heredera de su socialismo pragm�tico.

Ministro de Econom�a con Mitterrand

Nacido el 20 de julio de 1925 en Par�s, sigui� los pasos de su padre, contable en el Banco de Francia, y tras completar sus estudios ingres� en esa instituci�n poco despu�s de la Segunda Guerra Mundial.

Afiliado pol�ticamente a un sindicato cristiano, en 1962 comenz� a trabajar en la planificaci�n econ�mica para gobiernos gaullistas, hasta que en 1969 fue fichado por el entonces primer ministro, Jacques Chaban-Delmas.

Considerado la corriente social de aquel Ejecutivo, promotor de los contratos de progreso y la formaci�n continua,�Delors�no perdi� su independencia porque, como �l mismo dec�a, era �demasiado socialista para la derecha y demasiado pragm�tico para la izquierda�.

En 1974 dio el paso y se afili� al Partido Socialista, atra�do por la personalidad de Fran�ois Mitterrand m�s que por sus ideas, como reconoci� en sus memorias.

Nombrado ministro de Econom�a (1981-1984) de sus primeros Gobiernos, impuls� las nacionalizaciones, la devaluaci�n del franco y una pol�tica de inversiones, antes de verse obligado a una austeridad presupuestaria para preservar la paridad entre el franco y el marco.

Candidato a liderar el Ejecutivo, qued� descartado del mismo por el joven Laurent Fabius. Su destino hab�a sido ya sellado entre Mitterrand y el canciller alem�n, Helmut Kohl, y estaba en Bruselas.

Ampliaci�n de la UE a Espa�a y Portugal

Sucesor del luxemburgu�s Gaston Thorn al frente del Ejecutivo comunitario, su llegada en 1985 supuso un aceler�n a una Europa anquilosada.

En diez a�os puso en marcha el mercado �nico, los fondos de cohesi�n, el tratado de Schengen, la ampliaci�n a Espa�a y Portugal, el Acta �nica que sustituy� al Tratado de Roma, los programas Erasmus, la Pol�tica Agraria Com�n y el tratado de Maastricht.

Delors�volvi� a encarnar Europa como antes lo hab�a hecho su admirado Jean Monnet. Su salida de Bruselas en 1995, sustituido por el luxemburgu�s Jacques Santer, dej� hu�rfana aquella funci�n.

Su popularidad era tal que los sondeos le situaban como la �nica personalidad de izquierdas capaz de evitar una derrota socialista en las presidenciales de 1995.

Pero se neg� a dar el paso, alegando motivos personales y una falta de adhesi�n a sus ideas, y se convirti� en el primer apoyo de Lionel Jospin, que acab� derrotado por el conservador Jacques Chirac.

Apartado de la primera l�nea pol�tica, solo romp�a el silencio para apoyar todo intento de integraci�n europea o criticar la tibieza comunitaria.

Reconocimiento en el 2015

En 2015, la UE le reconoci� su aportaci�n nombr�ndole ciudadano de honor de Europa, una distinci�n que solo tienen tres personas, Jean Monnet, Helmut Kohl y �l mismo.

Casi molesto con los aplausos, en medio de la crisis provocada por la bancarrota de Grecia que pon�a en jaque el trabajo de toda su vida, un�Delors�de 90 a�os mostr� ante los jefes de Estado y Gobierno su rostro m�s severo: �No hay tiempo para celebraciones�.�