La truculenta historia de Tiggy, la niñera de los príncipes Guillermo y Harry que avivó los celos de Lady Di

La cadena británica BBC ha anunciado este jueves que deberá indemnizar a Tiggy Legge-Bourke, la que fuera niñera de los príncipes Guillermo y Harry, por afirmaciones falsas que hicieron sobre ella para obtener una entrevista con Lady Di en el año 1995. Una charla que fue seguida en directo por más de 22,8 millones de espectadores en Reino Unido, y que pasaría a la historia como “la entrevista del siglo”. La transmisión de dicha entrevista tuvo lugar en el programa Panorama, y se produjo tres años después de que la princesa Diana y el príncipe Carlos de Gales se hubieran separado; debido en gran parte a las aventuras extramatrimoniales del heredero al trono británico.

La investigación ya determinó el pasado año que el periodista Martin Bashir utilizó información falsa y documentos manipulados para ganarse por aquel entonces la confianza de la princesa Diana de Gales, con el objetivo de conseguir la que finalmente sería su primera entrevista en solitario desde que contrajera matrimonio con el príncipe Carlos. El juez John Dyson decretó entonces que la BBC no cumplió con los “altos estándares de integridad y transparencia” para la realización de esta entrevista. En el informe de Dyson se decía que Bashir había mentido a varias personas (algunas de ellas de la propia BBC) para sacar adelante dicha entrevista. El periodista ya se disculpó públicamente hace tiempo y actualmente no trabaja para esta corporación.

La “entrevista del siglo” fue descrita por los analistas de aquel entonces como una “bomba” que terminaría por destruir la imagen de la Familia Real británica. Tiggy, también conocida como Alexandra Pettifer, ya recibió una disculpa por parte de la BBC ante el Tribunal Superior de Londres por las afirmaciones que la cadena británica hizo sobre su persona. Y es que, además de afirmar que había tenido una aventura con el príncipe Carlos, aseguraron que la niñera tuvo que someterse a un aborto. Su abogada dijo que esto le había causado "graves consecuencias personales" a su clienta, al tratarse de "acusaciones muy graves y totalmente infundadas de que la demandante estaba teniendo una aventura con el príncipe de Gales, lo que resultó en un embarazo que supuestamente fue abortado". Según el mencionado comunicado; en octubre de 1995, cuando las negociaciones de la BBC con Diana se encontraban en una etapa crítica, la princesa de Gales le dijo a su abogado que le habían hecho saber que Tiggy se había sometido a un aborto, y que “en breve recibiría un certificado” del mismo.

La abogada también señaló que su clienta estaba "aliviada de que la BBC aceptara que los señalamientos eran completamente falsos y sin fundamento alguno"; ya que “estas acusaciones fueron fabricadas”. Como parte de la declaración acordada ante el Tribunal Superior de Londres, la BBC dijo que aceptaba plenamente que las afirmaciones contra la exniñera "eran totalmente infundadas y que nunca debieron haberse hecho". Tras la audiencia, el director general de la BBC, Tim Davie, dijo que la disculpa es para Pettifer, el príncipe Carlos y sus hijos, Guillermo y Harry "por la forma en que la princesa Diana fue engañada y el impacto posterior en todas sus vidas". También afirmó que lamentaba "extremadamente el daño grave y prolongado", asegurando que “ahora que sabemos la forma en que se obtuvo la entrevista, he decidido que la BBC nunca vuelva a emitir la misma, ni la licenciaremos en su totalidad o en parte a otras emisoras".

La exniñera de Guillermo y Harry expresó su opinión sobre este asunto a través de un comunicado publicado por el diario Sunday Times; en el que confesaba sentirse decepcionada por el hecho de que “la BBC necesitara una acción legal para reconocer el daño grave al que he estado sujeta". También afirmó que ella tan solo es “una de las muchas personas cuyas vidas han quedado marcadas por la forma engañosa en que se realizó la entrevista de Panorama y el posterior fracaso de la BBC para investigar adecuadamente la realización del programa”. Alexandra Pettifer recibirá una suma sustancial por parte de la BBC, que también deberá pagar sus costes legales; además de asumir sendos pagos al exsecretario privado de la princesa Diana y a un exproductor relacionados con este programa.

Tiggy Legge-Bourke fue contratada por el príncipe Carlos como niñera de sus hijos en el año 1993, poco después de separarse de Diana de Gales. Contaba a su favor con la confianza que la Casa Real británica tenía en su familia; ya que su madre había sido dama de compañía de la princesa Ana de Inglaterra en los años ochenta, mientras que su hermano fue paje de honor de la reina Isabel II. Poco después de que el príncipe Carlos la contratara, la princesa Diana confesó a su mayordomo que creía que su marido estaba enamorado de Tiggy y que planeaba casarse con ella. Las sospechas de Diana sumadas a los rumores de embarazo hicieron que la relación entre ambas mujeres estuviera lejos de ser buena. La revista Time informó en 1996 de que Diana incluso solía pedirle a Tiggy que saliera de la habitación cuando llamaba por teléfono a sus hijos; y que en una carta le pidió a su exmarido que “no les leyera por las noches ni supervisara su hora del baño”.

La niñera cuidó de los príncipes Guillermo y Harry hasta el año 1999 y siempre mantuvo una excelente relación con ambos. Prueba de ello fue el hecho de que Tiggy asistiera como invitada a la boda del duque de Sussex y Meghan Markle en el año 2018.