En uno de los barrios más ricos de Inglaterra, Maidenhead es una ciudad con mercado en el Támesis, no lejos de Windsor.
La circunscripción de Maidenhead de la primera ministra Theresa May tiene un centro aseado, que fue remodelado tras la Segunda Guerra Mundial.
Gran parte del encanto de la ciudad proviene de la orilla del río, donde hay un puente de ferrocarril de época diseñado por Brunel, un elegante puente de carretera del siglo XVIII y el pintoresco Boulter’s Lock.
Allí podrá llegar a Ray Mill Island, donde hay un pequeño parque dulce con una cafetería y un parque infantil.
El Támesis será el centro de sus planes en Maidenhead, tanto si realiza excursiones en barco, pruebe actividades acuáticas, pasee por el Thames Path o pase unos días en Windsor, Cliveden House o Cookham.
Exploramos las mejores cosas que hacer en Maidenhead:
1. Cerradura de Boulter
Fuente: timo_w2s / FlickrBoulter’s Lock, uno de los lugares más bonitos del Támesis Medio, se encuentra a pocos minutos del centro de Maidenhead.
La esclusa es la tercera que se construye en este punto del río, data de 1912 y sustituye a una de 1772 y una esclusa aún anterior construida en el siglo XVI.
El Boulter es un pub/restaurante de lujo junto a un balcón con vistas al río.
Si se pregunta cómo navegan los barcos por el Támesis, puede pasar unos minutos observando los barcos estrechos y los yates levantados por la esclusa.
La barra, que modera el nivel del río, se encuentra un poco río arriba en el extremo norte de la isla Ray Mill.
Éste es un lugar popular para practicar kayak de aguas bravas en verano cuando tiene un canal instalado durante varios meses.
2. Isla Ray Mill
Fuente: timo_w2s / FlickrCruza el puente de la esclusa y se encuentra en Ray Mill Island, un encantador parque público en medio del río.
«Ray Mill» proviene de un molino harinero construido en la isla en 1726 y derribado en los años 20.
La isla es propiedad del barrio desde la década de 1950 y tiene muchas comodidades en un entorno idílico.
Una cafetería, Island Piazza, abre durante los meses de verano y puede disfrutar de su té o café en una mesa de picnic junto al agua.
Hay un parque de aventuras para niños de tres a ocho años y también estarán encantados con el aviario y los conejitos de indias.
3. El arco del sonido
Fuente: M Rose / shutterstockEl paso del Támesis al sudeste de la ciudad es una estructura de gran valor histórico.
Diseñado en la década de 1830 por el legendario ingeniero Isambard Kingdom Brunel para el Great Western Railway, era el puente de arco de ladrillo más plano y ancho del mundo en ese momento.
Cada arco tiene una luz de 39 metros, pero sólo se eleva siete metros por encima del agua.
Como prueba del ingenio de Brunel, el puente es aún utilizado por el ferrocarril, aunque los trenes actuales son diez veces más pesados que en la época de Brunel.
El nombre, Sounding Arch, proviene del extraordinario eco creado por el diseño innovador de Brunel.
JMW Turner pintó el puente en Rain, Steam and Speed – Great Western Railway (1844), una de sus obras más conocidas.
4. Maidenhead Heritage Center
Fuente: John Raine / WikimediaPequeño pero lleno de cosas interesantes, Maidenhead Heritage Centre es el museo de la ciudad.
La exposición permanente tiene un esqueleto romano enterrado cerca de Bray en el siglo V, detalles del negocio Profumo y su conexión con Cliveden y una historia del equipo de Fórmula 1 Vanwall que se basó en Maidenhead en los años cincuenta.
Hay una «Historia de Maidenhead» en profundidad que le pone al día, que cubre los años de auge de la ciudad en la época victoriana y su papel como lugar de rodaje de las películas de terror de Hammer en años 50, 60 y 70.
Algo fuera de lo normal es un simulador Spitfire, que le permite coger los controles para sobrevolar la isla de Wight, Windsor o el Londres del siglo XXI.
5. Casa Cliveden
Fuente: timo_w2s / FlickrUna de las casas más preciadas del National Trust se encuentra a pocos minutos del Támesis.
La mansión descansa sobre una terraza italiana, a 40 metros por encima de la orilla este del río.
Fue reconstruido en 1851 por Charles Barry (famoso por las Casas del Parlamento) y tiene una combinación de arquitectura palladiana y del Cinquecento.
Cliveden fue el hogar de Nancy Astor, la primera mujer diputada británica, en los años 20 y 30, mientras que John Profumo conoció a Christine Keeler por primera vez en una fiesta en 1961. La casa ahora es un hotel exclusivo, pero The National Trust ofrece visitas cortas. de marzo a octubre, durante el cual escucharás anécdotas sobre invitados como Winston Churchill, Charlie Chaplin y la Reina Madre.
En los terrenos podrá disfrutar del jardín acuático, alquilar un barco para remar en el Támesis e intentar resolver el laberinto de tejos, formado por más de 1.000 árboles.
6. Norden Farm Centre for the Arts
Fuente: Norden Farm Centre for The Arts / facebookEste vibrante local de entretenimiento en directo goza de una ubicación inusual en una antigua granja lechera.
El complejo tiene dos edificios catalogados, un granero largo del siglo XVIII y una masía georgiana.
Maidenhead había estado planeando un sitio de arte desde la década de 1970 y finalmente se instaló en el sitio en la década de 1990.
Abierto desde el año 2000, el premiado Norden Farm Center for the Arts tiene una agenda apretada de comedia, drama, danza y música en directo, así como una amplia gama de clases y talleres.
Estos pueden ser tan variados como la fabricación de joyas, pilates, yoga y dibujo de la vida.
También puede ver proyecciones de películas, así como emisiones en directo o grabaciones de la Royal Opera House o el Teatro Nacional.
7. Cookham
Fuente: Fotogenix / shutterstockUna parada en el tren oa diez minutos en coche, Cookham es un pueblo muy rico y pintoresco en el Támesis.
Para un lugar tan pequeño, Cookham ha tenido a algunos residentes distinguidos como Guillermo Marconi, Kenneth Grahame (autor de Wind in the Willows) y el artista del siglo XX Stanley Spencer.
Éste último nació en Cookham, se educó en Maidenhead y murió en Cliveden.
Cookham tuvo un sitio especial en su corazón y después de su muerte la antigua capilla Wesleyana se convirtió en una galería para sus obras.
La colección de la galería incluye más de 100 cuadros y se va rotando a través de exposiciones.
El propio Spencer adoró en ese edificio cuando era niño y pintó el Rapto en una capilla de Wesley basándose en recuerdos de la infancia 30 años después.
Este cuadro está ahora en la colección.
Luego pasee por Cookham Moor, un campo rodeado de arroyos que mantiene el National Trust.
8. Corte de Dorney
Fuente: Stephen Mulligan / shutterstockEsta mansión Tudor de principios está abierta para realizar visitas todas las tardes de agosto, así como durante los dos festivos de mayo.
La hermosa casa con entramado de madera se construyó alrededor de 1440 y se ha mantenido prácticamente igual desde 1500. Dorney Court pertenece a la familia Palmer desde el siglo XVI y es todavía una casa familiar alegre.
Se acercará a la casa a través de un trozo de antiguo bosque de castaños y fresnos, pasando por un estanque excavado en la época medieval.
El recorrido le llevará por una serie de salas con paneles como el salón, la sala grande y el maravilloso vestíbulo de bóveda.
También verá fosas de sacerdotes, una bodega, mantequilla, despensa, pequeños pasillos y la maravillosa cocina antigua.
Se han actualizado algunas piezas pequeñas, como el comedor William and Mary del siglo XVII y un luminoso baño decorado en la década de 1970.
Hay una sala de té en el huerto y una tienda que vende golosinas como la miel dorada producido en el aviario de la finca.
9. Parque Ockwells
Abierto al público en la década de 1980, Ockwells Park se encuentra en un terreno que antes perteneció a la finca Ockwells Manor.
La mansión con entramado de madera del siglo XV puede verse al oeste del parque y fue construida con roble del bosque de Winsor, que en ese momento se extendía hasta Maidenhead.
El parque tiene un área de conservación etiquetada con señales de vida salvaje.
Dependiendo de su suerte y de la temporada, puede ver mariposas marrones de prado, pájaro carpintero, cuco y margaritas azules comunes.
Recarga las pilas en el Cafe Andrea, que dispone de una zona de juegos para los más pequeños.
10. Camino del Támesis
Fuente: timo_w2s / FlickrSi prefieres utilizar tus propias piernas para moverte, puedes acceder a muchas de las atracciones de esta lista, como Cliveden, Cookham y Dorney Court, por Thames Path.
Ésta es una ruta nacional que sigue el río durante 184 millas desde su nacimiento cerca de Cirencester hasta la barrera del Támesis en Londres.
Puede caminar hasta Windsor en medio día, pasando por el lago Dorney, sede de los eventos de remo y remo del 2012.
Para las personas que se alojan en Maidenhead, caminar por el río hasta Bourne End a través de Cookham es especialmente conveniente, ya que puede volver en tren en cuestión de minutos.
En el camino puede mirar a través del agua hasta la finca Cliveden justo antes de entrar en Cookham.
11. Salidas en barco
Fuente: Thipwan / shutterstockDe martes a sábado, de mayo a septiembre, la compañía de cruceros French Brothers ofrece un viaje de regreso al Támesis desde Maidenhead hasta Windsor.
Es una buena forma de visitar esta ciudad real, saliendo de Maidenhead Promenade a las 11 de la mañana y llegando a Windsor 90 minutos más tarde.
Tendrá más de tres horas para caminar por el centro de la ciudad y por el Gran Parque y quizás ver el castillo.
El barco de regreso sale a las 15:45. El viaje por el Támesis es comentado y pasará volando ya que hay tanta historia en las orillas.
Verá el idílico pueblo de Boveney, espléndidas casas de campo como Oakley Court y Monkey Island Estate y, por supuesto, el castillo de Windsor y el Eton College.
12. Torre del reloj del jubileo
Fuente: BasPhoto / shutterstockVen a Maidenhead en tren y una de las primeras vistas que ves después de salir de la estación es esta histórica torre del reloj con florituras neogóticas y barrocas.
El monumento se completó en 1899 para celebrar el jubileo de diamante de la reina Victoria, que había tenido lugar dos años antes.
Si tiene curiosidad, la torre mide 14 metros de altura y está coronada con almenas ornamentales y torretas de tracería.
Justo debajo hay cuatro caras de reloj, cada una apuntando a uno de los puntos de la brújula.
Mira de cerca los diales del reloj y notará un sutil patrón de diamantes como un sutil guiño al jubileo.
13. BCA Zoo
Fuente: BCAAMC / facebookEl Berkshire Agricultural College tiene una gran colección de animales vivos y en los últimos veranos ha empezado a dar la bienvenida al público para venir a conocerlos en jornadas de puertas abiertas especiales.
Las entradas deben comprarse con antelación para la clase de la mañana o de la tarde y puede hacerlo en la web de la universidad.
Requerido para los cursos universitarios de ganadería, el zoo está totalmente acreditado y tiene almejas, cerdos espines, lémures, nutrias, armadillos, suricatas y monos.
También hay una casa de reptiles, mientras que los guardianes realizan charlas educativas, gestionan exposiciones y demostraciones de alimentación.
Por un suplemento, puede reservar un encuentro con primates o suricatas.
14. Lago Taplow
Fuente: Lake Taplow / FacebookEste tramo del Támesis medio es un centro de deportes acuáticos.
Hay una serie de lagos junto al río justo al este de Maidenhead, mientras que unas cuantas millas río arriba se encuentra Henley, la sede de la famosa regata.
Puede ir al agua en el lago Taplow, a pocos minutos de Maidenhead.
En la costa se encuentran Engage Watersports, que ofrece cursos y sesiones de cata de piragüismo, kayak, paddleboard y wake kayak.
Si ya tienes experiencia y tienes ganas de palista, la empresa también alquila material, desde embarcaciones hasta trajes de neopreno.
A orillas del lago se encuentra el recientemente inaugurado Lake House Cafe, con una terraza sobre el agua.
También un poco más lejos de la ciudad se encuentra el lago Bray, catalogado como el principal centro de deportes acuáticos de Berkshire y disponible para la vela, el windsurf, el paddle, el kayak, el remo, la natación en aguas abiertas y la pesca.
15. Helado Hitcham Farm
Fuente: Hitcham Farm Ice Cream / facebookCerca de Burnham, Hitcham Farm Ice Cream es una empresa familiar en plena naturaleza.
La granja elabora una selección de sabores de helados tentadores como ruibarbo y nata, vainilla, caramelo de toffee crujiente, panal y chocolate belga.
Lo que hace que el helado sea tan especial es que la leche proviene del rebaño de vacas Ayrshire de la granja.
Puede ver estos pastando en los campos, junto con ovejas, cabras, patos, gansos y gallinas.
Hechos de forma natural, los sabores de los helados cambian con las estaciones y también puede comprar huevos de ganso, gallina y pato recién colocados en la tienda de la granja.
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