Guía básica para entender a Wes Anderson

¿Qué tienen en común el presidente Joe Biden en la Casa Blanca, un jugador del River Plate entrenando y el actor Bill Murray en La crónica francesa? Que los tres fueron filmados en el centro del encuadre para un video, con la canción “Obituary” de Alexandre Desplat de fondo, al puro estilo de Wes Anderson. 

En las últimas semanas Wes Anderson ha sido tema de conversación; primero por un trend de TikTok en el que los usuarios intentaban retratar un momento de sus vidas como si fuera una película del director estadounidense, y luego porque Asteroid City, su nueva película, se estrenará en la segunda mitad del mes de junio. Esta cinta se encuentra participando por la Palma de Oro en el Festival de Cannes.

Es entendible que sea un director que llame la atención, tiene factores que hacen que sus producciones sean, además de atractivas y curiosas, reconocibles. Aunque en entrevistas ha dicho que quiere que los espectadores no vean cada trabajo igual que el anterior, también es consciente de que ya creó un estilo que está marcado en todas sus producciones, incluso comerciales de marcas. 

Wes Anderson estudiaba filosofía cuando comenzó a hacer películas. En la universidad conoció a Owen Wilson, actor y guionista con quien empezó a colaborar. Juntos hicieron un corto llamado Bottle Rocket, que posteriormente se convirtió en su primera película. Esta es sobre dos ladrones que con ayuda de un amigo, quieren llamar la atención de un importante mafioso.

En esta ya podemos ver un poco de los elementos que con el tiempo se convertirían en parte del sello de Anderson. Por ejemplo, los planos en los que detalla desde arriba los objetos que están robando los personajes o movimientos de cámara en los que sigue a los protagonistas mientras caminan, como cuando salen de jugar en una máquina de la tienda o antes de que entren a la casa a robar. Pueden parecer elementos comunes, como si cualquiera los pudiera hacer en sus películas, pero la recurrencia con la que los usa es lo que los hace especiales.

Anderson es un apasionado por la simetría, en la mayoría de escenas ubica personajes o elementos en la mitad exacta, con una precisión que llega incluso a transmitir paz y adentra en la perfección que solo podría tener la ficción. 

Entre otras de las estrategias con la cámara a las que más recurre, están los zoom tanto para alejar como para acercar; ya no interesa solo ver al personaje, sino ver de manera gradual lo que sucede a su alrededor que también nos dice cosas. Al acercarse con zoom al personaje es como si nos estuvieran sumergiendo en el momento.

Una de las mejores maneras que tiene Anderson de hacernos sentir parte de lo que vemos es con las escenas hechas con la técnica POV (punto de vista), que funciona para mostrarnos lo que está viendo el personaje. Enseñarnos cómo se verían nuestras manos escurriendo sangre por un intento de suicidio, como en Los excéntricos Tenenbaums, es una situación que no se puede ignorar.

Se podría decir que esos aspectos son los más fáciles de reconocer en su trabajo. El director ha dicho que no hay una razón en específico por la que haga sus producciones así, simplemente es algo que disfruta hacer.

El uso de colores también es algo característico. Primero porque suele utilizar tonos pastel junto con saturados y llamativos como el rojo o el azul, acompañados de iluminación y tonos cálidos como el amarillo o café. Es inevitable llamar la atención si pone en escena un elevador completamente rojo en su interior, y a 3 actores con un uniforme morado y cara de incomodidad dentro de él como en El gran hotel Budapest. 

Lo curioso de la manera en que los usa es que a veces hay colores vivos en escenas que son trágicas o tristes, rompiendo con el paradigma de usar colores fríos, oscuros y con un bajo contraste para transmitir esas emociones. En esa misma película ocurre un enfrentamiento con armas, y lo que hay alrededor es color rosa pastel, pareciera no tener sentido, pero Anderson sabe hacerlo funcionar.

Es recurrente en sus trabajos que los personajes sean considerados “raros”. Aunque Anderson en ocasiones ha dicho que para sus personajes se inspira en personas reales, por lo que así parezcan peculiares, los espectadores nos podemos sentir identificados. Tal vez todos tengamos algo de personaje de Wes Anderson. 

Las historias que cuenta Anderson tienen algo en común, y es que en la trama hay problemas en las relaciones con los padres, o ausencia de estas figuras fundamentales. En Los excéntricos Tenenbaums, nos da un ejemplo de cómo la ausencia o el trato de un padre en la infancia nos puede marcar de por vida. Igualmente podemos sentir frustración viendo El fantástico Sr. Zorro, recordar si se ha tenido, ese miedo de no ser suficiente para quienes nos rodean.

Sumado a esto Anderson también incluye una subtrama amorosa, que aunque a simple vista pareciera desviar la narrativa y confundir, al final todo tiene sentido como en La crónica francesa. A sus historias también les añade tintes cómicos que llegan a ser irónicos o incómodos, puede que algunos los consideren chistes malos, pero se acomodan a la trama por mezclar la fantasía con la cotidianidad. 

Eventualmente esas historias están contadas por un narrador y divididas en partes; narración que puede llegar a hacer sentir que quien nos está contando la historia es alguien cercano.

Anderson cuenta con un grupo exclusivo de actores con los que colabora para dar vida a sus ideas. Aunque no todos ellos participan en todas sus películas, al menos han aparecido en tres de ellas: los Hermanos Owen y Luke Wilson, con quienes inició su carrera, Bill Murray, Willem Dafoe, Tilda Swinton, Adrien Brody, Anjelica Huston y cada vez lo amplía con más estrellas.

Le recomendamos algunas películas ya mencionadas para descubrir el mundo de este director, si aún no lo conoce, o para percibir nuevos detalles si ya las vio.

Los excéntricos Tenenbaums (2001)

Con esta cinta se puede empezar a explorar el mundo de Wes Anderson, una historia divertida con personajes extraños. Es una familia de renombre, con 3 hijos traumatizados por la infancia que vivieron y que en su adultez no saben lidiar con lo que sienten y con el reintegro de su padre a la familia. Este quiere ser buen abuelo de un par de niños que son tal vez igual de raros a su padre, al punto de que los tres visten igual. De aquí en adelante, las películas de Anderson ya se hacen reconocibles.

El fantástico Sr. Zorro (2009)

Inspirada en el libro de Roald Dahl, es la primera película animada de Anderson hecha en stop motion. Es un recordatorio de que la animación no siempre es para niños: aunque parezcan unos tiernos zorros peludos, la cinta tiene conversaciones de doble sentido y violencia, que siendo muñecos ya no luce tan preocupante realmente. Cuenta la historia de un zorro que buscaba de alguna manera destacar mientras descuidaba a su hijo. Este siente que su padre prefiere a su primo antes que a él, por tener habilidades que él no tiene. 

El gran hotel Budapest (2014)

Con nueve nominaciones a los Oscar, de los cuales se llevó cuatro, es posiblemente la película más popular del director. Un elegante conserje de un famoso hotel, conoce a su nuevo empleado, un chico migrante lleno de nervios, pero también de ganas de ser el mejor. Al intentar entrenarlo, lo incluye en sus asuntos personales y lo protege como si fuera su hijo. Tiene sentido que sea de las producciones más populares del director, ya que cuenta con una historia emocionante de drama, persecuciones, amor y más, que combinadas con la estética que le pone Anderson, engancha y es un sube y baja emocional  porque los momentos tristes llegan en los instantes menos esperados.

La crónica francesa (2021)

La más reciente de sus películas. Esta tiene un tinte diferente, ya que cuenta cuatro historias distintas, pero que terminan convergiendo en la redacción de la revista con la que inicia la película. Anderson alterna en gran parte del filme el blanco y negro, que recuerda al corto de Bottle Rocket, con sus clásicos colores. Ese tipo de transiciones sacan al espectador de un sentimiento con una historia, a otro completamente diferente en minutos.

Asteroid City se estrenará el 23 de junio en nuestro país. Conociendo el trabajo de este cineasta, podemos esperar sorpresas en esta producción centrada nuevamente en historias familiares. A continuación, le compartimos el tráiler.

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