Las bajas laborales cuestan 464 millones a las mutuas y a las empresas de la Región - La Opinión de Murcia

Empleo

Las bajas laborales cuestan 464 millones a las mutuas y a las empresas de la Región

El importe de las prestaciones abonadas en la Región aumentó en 2023 un 19%, según los cálculos de la patronal de las mutuas

Casi 150.000 trabajadores cobraron la prestación por incapacidad temporal 

El tiempo de espera para intervencionesquirúrgicas llega a los 114 díasen la Región.

El tiempo de espera para intervencionesquirúrgicas llega a los 114 díasen la Región. / Juan Caballero

María José Gil

María José Gil

El importe de las bajas laborales aumentó el pasado año en la Región un 19%, según los datos recogidos en el último informe de la patronal nacional de las mutuas, mientras que la cifra de trabajadores con protección de la Seguridad Social solo había crecido un 0,5% en comparación con el año anterior. Las prestaciones por incapacidad temporal abonadas por la empresas y las mutuas alcanzaron los 464 millones millones de euros, lo que supone 74,6 más.

De esta cantidad, 261,4 millones fueron abonados por las mutuas y 203,5 por las empresas.

En España el coste de las prestaciones de la Seguridad Social aumentó un 16,18% y alcanzó los 13.081 millones de euros. Esta cantidad representa un aumento del 55,38% con respecto a 2019. Está motivado por "el incremento generalizado de los salarios y, principalmente, de los procesos de incapacidad laboral en el año 2023, que continua con una significativa tendencia ascendente desde el año 2019".

La Asociación de Mutuas de Accidentes de Trabajo (AMAT) culpa a las listas de espera de la sanidad pública de la prolongación de las bajas laborales, lo que unido a "la carga asistencial en las comunidades autónomas, provoca una duración superior de los procesos de incapacidad temporal".

El tiempo de ausencia de los pacientes alcanzó los 53 días, trece más que la media nacional

Añade que "las listas de espera de la sanidad pública, unidas a la carga asistencial en comunidades autónomas, genera una duración superior de los procesos de incapacidad temporal. También apunta que, "pese a que uno de cada 10 empleos creados en 2023 se han producido en el sector sanitario, existe una excesiva carga burocrática en lo que respecta a la separación de funciones entre quien presta la asistencia sanitaria (servicios públicos de salud ) y quien satisface la prestación económica (mutuas colaboradoras y entidades gestoras de la Seguridad Social)".

El pasado año se registraron en la Región 148.585 bajas laborales, que alcanzaron una duración media de 53 días.

El absentismo de los afiliados murcianos motivado por enfermedades comunes se alarga 13 días más que la media de España, aunque está lejos de la duración que alcanzan las dos comunidades con las bajas más prolongadas: Extremadura, con 79,27 días, y Galicia, con 78,53.

Los navarros, que solo faltan al trabajo 26,12 días de media, son los que menos tiempo permanecen de baja por enfermedad.

El tiempo necesario para la recuperación se alarga, sobre todo en las lesiones traumatológicas. Los 36.251 lesionados de la Región requirieron una media de 83,88 días para curarse, lo que equivale a cerca de tres meses.

La curación se alarga especialmente en el caso de las lesiones traumatológicas, que necesitan 84 días

En Galicia (107,77 días) y Extremadura (106,94) alcanzan los tres meses y medio, mientras que el plazo de recuperación de las lesiones traumatológicas en España está en 68 días.

"Los más de 1.264.000 trabajadores que han sufrido un proceso de contingencia común diagnosticado como patología traumatológica tardan en recuperar su salud 26 días más", se lamenta la Asociación de Mutuas. 

Desde hace años estas entidades tratan de conseguir que la Seguridad Social les asigne el tratamiento de los trabajadores con lesiones traumatomatológicas y defienden que su intervención ayudaría a acortar el absentismo provocado por este tipo de patologías.  

Señalan que "el laberinto burocrático de las listas de espera en la sanidad pública y el riesgo moral del que se deriva un uso indebido de estas prestaciones" aumentan "la carga asistencia de la sanidad pública" y contribuyen a "su saturación", al tiempo que suponen "un gasto innecesario, una importante merma de la competitividad de las empresas y un pesado lastre para la creación de empleo".

Defienden que la intervención de las mutuas agilizaría la tramitación administrativa, con lo que se podría "recuperar en la mitad de tiempo la salud de los trabajadores diagnosticados con esas patologías".

Añade que también ayudaría a "reducir las listas de espera en los servicios públicos de salud y a reducir el gasto".

La patronal de las mutuas apunta que la recuperación de los trabajadores que sufren lesiones óseas "ahorraría" 87,7 millones de euros en la Región. De esta cantidad, las empresas dejarían de gastarse 33 millones, mientras que las prestaciones abonadas se reducirían en 54,6 millones.

En España AMAT calcula que "podrían ahorrarse 2.630 millones de euros con la intervención de las mutuas, 1.650 de los cuales repercutirían en las cuentas públicas de Seguridad Social y otros 980 con cargo directo a las empresas".