Tipos de disco duro

¿Necesitas comprar discos duros? Muy bien, todos tenemos necesidades en la vida.

¿Tienes claro para qué los necesitas? Estupendo, por ahí se empieza.

¿No tienes claros los tipos de disco duro entre los que puedes elegir? Tal vez podamos darte algunas pistas…

La elección de discos duros depende, sobre todo, de cuál es el uso que vayas a darles. Es posible que los necesites para servidores o bases de datos, o para entornos de alto rendimiento. Pero también es posible que solo los quieras para guardar en el ordenador de tu casa Petabytes de videos del lorito bailón.

En este artículo vamos a conocer los principales tipos de disco duro que existen en la actualidad. ¡Vamos allá!

Tipos de disco duro. Una breve introducción

Antes de entrar en mayores profundidades hemos de decir que los discos duros se dividen fundamentalmente en 2 categorías: HDD y SSD.

De igual forma, a la hora de distinguir entre clases de discos duros también se puede distinguir en función del tipo de conectores que utilizan. Así, hablamos de modalidades como SATA, SCSI o SAS, entre otras.

De hecho, podríamos incluso utilizar otros criterios para clasificar los tipos de disco duro, como el lugar en el que se encuentran (internos o externos) o incluso para qué se utilizan, pero en este artículo vamos a quedarnos con los dos primeros.

A continuación veremos en qué consiste cada tipo de disco duro. Eso sí, algo que debemos tener en cuenta es que tanto los HDD como los SSD podrán utilizar diferentes tipos de conectores.

Tipos de disco duro: HDD y SSD

Discos duros HDD

Conocemos por HDD o (Hard Drive Disk) a los tradicionales discos duros mecánicos que graban la información de forma magnética en uno o varios platos. Los HDD están formados por piezas mecánicas; básicamente consisten en uno o varios discos rígidos que giran a gran velocidad (miles de RPM) entorno a un eje, en el interior de una caja. En cada disco, un cabezal lee o graba datos sobre cada una de sus caras.

Para que puedas visualizarlo con sencillez, sería algo parecido a un pequeño tocadiscos que estuviera guardado dentro de una caja (salvando las distancias).

Los HDD han sido los discos más utilizados durante las últimas décadas. Más económicos, duraderos y con capacidades de almacenamiento cada vez mayores, los HDD llevan décadas reinando como dispositivos de almacenamiento y, aunque les haya salido un duro competidor en los SSD, siguen teniendo una gran aceptación.

Discos de Estado Sólido (SSD)

Constituyen una novedad reciente, y cada día tienen más adeptos. En realidad, cuando hablamos de SSD (Solid State Drive), no estamos hablando de un “disco duro” como tal. Sin embargo, dado que comparten su objetivo fundamental, que es el de guardar datos, también suelen ser llamados “discos duros”.

La estructura de los dispositivos SSD poco o nada tiene que ver con la de los clásicos HDD, por lo que solo son llamados “discos duros” por dedicarse a funciones similares. Los SSD no son, de hecho, discos, y carecen de partes mecánicas; por el contrario, disponen de un microprocesador propio (llamado “controlador”) que se encarga de las tareas de lectura/escritura de datos, y almacenan los datos en microchips que disponen de memorias flash interconectadas.

Durante los últimos años los discos duros SSD están teniendo mucho éxito gracias a su mayor velocidad. Eso sí, también tienen algunas desventajas, como su precio y su menor capacidad de almacenamiento. Por ello, algunas personas optan por la solución de utilizar un disco duro SSD para ejecutar el sistema operativo y destinan un HDD para el almacenamiento de datos.

Tipos de disco duro en función de sus conectores

Discos duros Serial ATA (SATA)

En sus diferentes versiones -la más actual es la III-, se trata de los discos duros más habituales en equipos domésticos; si estás accediendo a este artículo a través de un portátil o un equipo de sobremesa es probable que este sea el tipo de disco duro que esté funcionando en tu ordenador.

El Serial ATA utiliza un conector serie para la transmisión de datos y en su versión III alcanza velocidades de unos 600 Mb/s.

Como ya decíamos, se trata de los conectores para discos duros que han sido más populares durante los últimos años. Tanto su precio como su velocidad de transmisión de datos han conseguido que sean muy utilizados.

Discos duros SCSI o SAS

Se trata de conectores de discos duros para uso profesional que suelen encontrarse en entornos de alto rendimiento.

Suelen estar instalados en RAID y hallarse en el interior de racks o blades.

Una de sus principales características es que son capaces de sustituir a otros discos duros similares (que, por ejemplo, se hayan averiado), sin necesidad de apagar el ordenador, lo que ayudará a que el servicio pueda seguir funcionando sin una interrupción.

Monitorizando, que es gerundio

Y ahora que ya hemos visto algunos de los principales tipos de disco duro que existen, ¿qué tal si dedicas unos minutos a descubrir algo tan importante como la monitorización de sistemas?

Los sistemas de monitorización se encargan de supervisar los sistemas informáticos (hardware, redes y comunicaciones, sistemas operativos o aplicaciones, por ejemplo) con el fin de analizar su funcionamiento y su rendimiento, y de detectar y alertar acerca de posibles errores.

Y si hablamos de monitorización, como no, debemos hablar de Pandora FMS. Pandora FMS es un software de monitorización flexible, capaz de monitorizar dispositivos, infraestructuras, aplicaciones, servicios y procesos de negocio.

Por supuesto, una de las cosas que Pandora FMS puede monitorizar son los discos duros de tus equipos.

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