Orthez

Antigua capital bearnesa, Orthez, con más de 10.000 habitantes, es una auténtica ciudad rural situada entre el océano Atlántico y los Pirineos, entre Pau, en Béarn, y Bayona, en el País Vasco.

Gaston VII de Moncade, vizconde de Béarn, fortificó Béarn e hizo de Orthez su capital, como demuestran la Torre Moncade y el Puente Viejo de arcos desiguales, restos de la fortaleza del siglo XIII, en lo alto de la ciudad. Desde su terraza, se ven los tejados de la ciudad cubiertos de pizarra y tejas de picón, tejas rojas planas. Orthez es también el lugar de nacimiento de Gaston Fébus, personaje extraordinario que reivindicó la autonomía del Béarn. La torre del homenaje del castillo Moncade, de 110 metros de altura, está abierta a los visitantes y cuenta la historia de este príncipe pirenaico.
Juana de Albret, madre de Enrique IV, rey de Francia y Navarra, fue la líder política del partido protestante. Vivió en la casa solariega que hoy lleva su nombre y está dedicada a la historia del protestantismo en Béarn.
La Maison Chrestia, residencia del siglo XVIII con la etiqueta «Maison des Illustres», fue la residencia bearnesa del poeta Francis Jammes, y presenta su obra y su historia. Otras figuras destacadas del siglo XIX fueron los cinco hijos de la familia protestante Reclus, que desarrollaron extraordinarias carreras como geógrafos, sociólogos y cirujanos, y Félix Pécaut, profesor y activista laico.

Desde el siglo XI, la ciudad de Orthez, en la ruta de Vezelay, es una etapa imprescindible del Camino de Santiago. En el número 14 de la rue de l’Horloge, el Hôtel de la Lune, del siglo XV, se ha convertido en parada para los peregrinos que se dirigen a Santiago de Compostela. Esta casa fortificada ofrece alojamiento a los peregrinos que pasan por la ciudad de camino a Saint-Jean-Pied-de-Port. Salen de la ciudad por el Bourg Vieux y cruzan el Pont Vieux en dirección a Sauveterre-de-Béarn, pasando por el Hôpital d’Orion.

A las afueras de la ciudad se encuentra el centro de ocio de Orthez-Biron, con su parque sombreado y su sendero, su zona de juegos infantiles y su campo de petanca.

Está permitido nadar en el lago de 40 hectáreas, bordeado por una playa de arena y vigilado durante los meses de verano. La oferta de deportes acuáticos es muy amplia: pedales, botes de remos, piragüismo y esquí acuático. La Saligue aux oiseaux (reserva ornitológica) , a orillas del lago, es un auténtico lugar de observación de aves para ornitólogos en ciernes.

No lejos del jardín zen, hay mesas de picnic y tumbonas para descansar y relajarse.

» Je découvre Orthez, la vieille ville» (Descubro Orthez, la vieja ciudad) es el cuaderno de descubrimientos que propone la Oficina de Turismo para divertirse en familia en la ciudad bearnesa.
También se puede explorar la ciudad de Gaston Fébus participando en la increíble búsqueda del tesoro «Terra Aventura «, que utiliza anécdotas y acertijos para explorar el patrimonio de Othezia.
En Sainte-Suzanne, los niños pueden probar el curso de agilidad con cabras en la Ferme pédagogique des Marnières, un parque de animales de tres hectáreas con gallinas, conejos, cobayas…