Dos tipos de cuidado (1952) | CINEMATÓGRAFO
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Recomendación
Dos tipos de cuidado

Año: 1952

Dirección: Ismael Rodríguez

Guión: Ismael Rodríguez y Carlos Orellana

Fotografía: Ignacio Torres

Elenco: Jorge Negrete, Pedro Infante, Carmelita González y Yolanda Varela

​Música: Manuel Esperón

16 de noviembre de 2017

El próximo 18 de noviembre se conmemora el centenario del natalicio de Pedro Infante, actor referencial del cine de oro mexicano, ícono de la música ranchera e ídolo de millones de mexicanos para quienes Infante fue una figura pública que brillaba por su sencillez y carisma, tanto en su vida privada como en las pantallas. 

Pedro tuvo una carrera meteórica ya que en tan sólo 22 años participó en 61 filmes; y, además, grabó 351 temas musicales de diversos géneros como rancheras, boleros, corridos, canciones festivas, valses, huapangos y la música de sus películas. Sin duda, una de las películas más importantes de Pedro Infante es Dos tipos de cuidado (Ismael Rodríguez, 1952) en la que comparte protagonismo con otro grande de la época: Jorge Negrete, el “charro cantor”.

Dos tipos de cuidado es considerada una de las mejores películas de la época del cine de oro y, en su momento, fue uno de los proyectos más ambiciosos de la cinematografía nacional. En este sentido, José Ernesto Infante (2015: 114) ha sostenido que la cinta fue promovida por Miguel Alemán, entonces presidente de México, y esta recomendación contribuyó a que ambos actores se reunieran para iniciar el proyecto. 

El reto no era sencillo. El director Ismael Rodríguez tardó dos años en perfeccionar el guion, ya que ambos histriones querían que sus personajes brillaran por igual. Con todo, Dos tipos de cuidado inició su filmación el 4 de agosto de 1952 en los estudios Churubusco y fue estrenada el 5 de noviembre de 1953, en los desaparecidos cines México y Mariscala en Ciudad de México.

 

Actualmente la cinta es recordada como una comedia ranchera con un argumento disruptivo para la época. La trama gira en torno a Jorge Bueno (Negrete) y Pedro Malo (Infante), dos amigos de un poblado innombrado de la provincia mexicana que galantean a la menor provocación. Así, ambos personajes se ven enfrentados cuando Pedro Malo asume la paternidad de la hija de su prima Rosario —interpretada por Carmelita González—, pues Rosario fue también pareja de Jorge Bueno y, después de la ruptura con éste último, víctima de abuso sexual en su huida a la capital. Vale la pena destacar precisamente este antagonismo entre la representación de la gran ciudad como un símbolo de la perdición frente a la vida bucólica y pura de la provincia. 

Por otra parte, técnicamente la película es de gran factura y destacan muchas escenas que fueron filmadas por un Ismael Rodríguez en estado de gracia: las escenas en el casino donde ambos juegan a las cartas, la pelea a golpes, las “coplas de retache” en la fiesta de compromiso de Jorge, o la escena donde se retan a un duelo con pistola; y el desenlace: una gran fiesta mexicana que encabezan los dos charros en medio de un jolgorio de papel picado, frutas frescas, charros y chinas poblanas.

 

La película también nos regala muchos de los momentos más icónicos de la cinematografía nacional. Una de ellas es la de la serenata, posiblemente una de las secuencias más seductoras del cine mexicano. En dicha escena Jorge canta la “Serenata Tapatía” y Pedro entona “Alevantate”. Al final ambas estrellas aparecen al mismo tiempo —por medio de una pantalla dividida, recurso que nunca había sido utilizado en el cine mexicano— cantando a dúo “Ojos Tapatíos”. Sobre esta secuencia se puede decir que el duelo vocal evidentemente lo ganó Jorge Negrete, pues contaba con una voz privilegiada y relegó a Pedro a una modesta segunda voz. 

Finalmente, se ha sostenido la leyenda de que ambos astros del cine mexicano se detestaban e incluso llegaron a los golpes, lo cual es falso. Pedro Infante le tenía una gran admiración a Jorge Negrete al grado que nunca pudo tutearlo. También es sabido que una de las últimas visitas que recibió Jorge antes de morir en Los Ángeles fue la de Pedro y que jugaron con un tren eléctrico que éste le llevó de regalo. De igual forma, podemos recordar que a la muerte de Jorge Negrete, un mes después del estreno de Dos tipos de cuidado, el 5 de diciembre de 1953, Pedro hizo guardia de honor y acompañó el cortejo fúnebre, enfundado en su traje de patrullero de tránsito —que recuerda a su personaje en la cinta A toda máquina (Ismael Rodríguez, 1951) —; y, meses más tarde, grabaría el corrido “Jorge Negrete”, compuesto por Enrique Crespo, en honor al “charro cantor”.

 

No sobra decir que la película tampoco está exenta de crítica, porque muchos señalan que el filme resalta clichés que nuestra sociedad sigue luchando por erradicar. A pesar de ello, Dos tipos de cuidado se consagró como una de las mejores cintas de Ismael Rodríguez y aún es valorada por su estupenda manufactura y por haber reunido a dos grandes del cine mexicano: Jorge Negrete y Pedro Infante.

REFERENCIAS

José Ernesto Infante Quintanilla, Pedro Infante. El ídolo inmortal, Ciudad de México, Océano, 2015.

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