En un mundo lleno de demandas y responsabilidades, a menudo sentimos que el día nos controla en lugar de ser nosotros quienes lo controlamos. Pero ¿y si te dijera que puedes tomar las riendas y diseñar el día que deseas vivir? Podemos crear deliberadamente, de manera consciente el día perfecto para nosotros, adaptado a nuestras necesidades y deseos.
Te dejo algunos puntos importantes a considerar… quizás quieras entrenarte y hacerlo. Vamos?
Visualiza tu día ideal:
Imagina cómo sería tu día perfecto. ¿Qué actividades estarías realizando? ¿Con quién estarías? ¿Cómo te sentirías al final del día? La visualización te ayuda a definir tus metas y a establecer una dirección clara.
Establece intenciones para manifestarlo:
Define tus objetivos y prioridades para el día. ¿Qué acciones te acercarán más a tu visión? Al establecer intenciones, te comprometes a tomar las medidas necesarias para crear el día que deseas.
Practica la planificación deliberada:
Este punto es clave para crear el día perfecto. Toma el control de tu agenda y asigna tiempo para actividades que te acerquen a tus objetivos. Prioriza las tareas importantes y elimina las distracciones innecesarias. Al planificar con intención, maximizas tu tiempo y energía.
Practica el autocuidado:
Dedica tiempo para cuidar tu mente, cuerpo y espíritu. Esto puede incluir meditación, ejercicio, tiempo al aire libre o simplemente descansar. Al priorizar tu bienestar, te aseguras de tener la energía y la claridad mental necesarias para alcanzar tus metas.
Cultiva la gratitud:
La gratitud es una poderosa herramienta para crear una vida deliberada. Tómate un momento cada día para reflexionar sobre las cosas por las que estás agradecido. Esto te ayuda a mantener una perspectiva positiva y a enfocarte en lo que realmente importa. La gratitud te conecta con el presente y te permite disfrutar plenamente de cada momento.
Crear el día que queremos vivir es posible para todos nosotros. Requiere de hábitos, compromiso y disciplina.
Te dejo algunas preguntas que pueden ayudarte a reflexionar y hacer los ajustes que hagan falta:
¿Estoy dejando que las circunstancias dicten mi día, o estoy tomando decisiones deliberadas para dar forma a mi experiencia diaria?
¿Me siento satisfecho con la forma en que paso mi tiempo, o hay áreas que me gustaría mejorar?
¿Estoy priorizando actividades que son importantes y significativas para mí, o estoy dejando que las distracciones tomen el control?
¿Cuánto tiempo dedico realmente al autocuidado y la autorreflexión en comparación con otras actividades menos importantes?
¿Estoy aprovechando al máximo cada día, o estoy dejando pasar oportunidades importantes por falta de planificación y enfoque?
¿Estás listo para empezar a crear tu día perfecto?
Si crees que por el momento, no estás pudiendo hacerlo sola/o, estoy para acompañarte.
Pedí posibilidad, ¡pedí coaching!
Ester Inglese
Coach Ontológico Profesional
Coach de Prosperidad en formación
wsp 3751 660207 / ig ester.inglese