Nuevo desplante de Carlos III a su hijo Harry, nombra coronel jefe del Cuerpo Aéreo al Príncipe William

La situación en la Casa Real británica es más complicada que nunca. A los problemas de salud de los miembros de la familia se le suma un nuevo malestar con el duque de Sussex tras varias idas y venidas, la última protagonizada por Meghan Markle en Nigeria. En esta ocasión el Rey Carlos III ha querido dedicar un nuevo “desplante” a su hijo menor, lo que ha sido considerado por muchos como la evidencia de las grietas y problemas irreconciliables que hay en la familia Windsor.

Este lunes el monarca, en su cuarta aparición pública desde que retomó sus responsabilidades oficiales, ha reaparecido junto al Príncipe William en el Centro del Ejército del Aire en Middle Wallop. En un primer momento se esperaba que, después de 31 años al mando, Carlos cediera este puesto a su hijo Harry por su doble misión en Afganistán a los mandos de un helicóptero Apache. Sin embargo, a pesar de que se llevaba algunos días rumoreando que esto podría cambiar, el golpe en la ceremonia del nombramiento del príncipe William como coronel jefe del Cuerpo Aéreo ha sido igualmente duro. Esta confirmación simbólica, para darle un punto más cruel, ha tenido lugar delante de un helicóptero Apache, un guiño que no pasará desapercibido a los ojos del príncipe Harry. De igual modo que el pequeño, William también tiene experiencia como piloto, pero en su caso se dedicó a las ambulancias aéreas en lugar de naves de combate.

Este acto ha tenido lugar al mismo tiempo en el que Harry y Meghan regresaban a su casa en California tras su gira en Nigeria, un viaje que ha recordado mucho a su último tour como parte activa de la familia real británica en Sudáfrica (2019). Los últimos meses han sido especialmente tensos en las relaciones internas. A pesar de que el príncipe Harry acudió a Londres para la inauguración de los “Premios Invictus”, padre e hijo no se han vuelto a reunir desde el último encuentro de 45 minutos después del anuncio oficial de cáncer del Rey Carlos III.

Por el momento, ni Harry ni Meghan han reaccionado a esta decisión por parte del hijo de Isabel II, pero no se espera que vayan a salvar las distancias que los separan y que hacen más evidente las remotas posibilidades que tienen de reconciliarse.