¿Qué fue el Gran Salto Adelante? - El Orden Mundial - EOM
EOM explica Economía China

¿Qué fue el Gran Salto Adelante?

El Gran Salto Adelante fue el intento de Mao de modernizar la economía china aumentando masivamente la producción agrícola e industrial. Sin embargo, el resultado fue una gran hambruna, millones de muertos y el aislamiento del país
¿Qué fue el Gran Salto Adelante?
Propaganda del Partido Comunista Chino con el mensaje "avanzar con valentía bajo la guía de la bandera roja del pensamiento de Mao Zedong". Fuente: Thomas Fisher Rare Book Library (Flickr)

El Gran Salto Adelante fue un plan de la República Popular China para modernizar su economía agraria que se implementó entre 1958 y 1962. Impulsado por Mao Zedong, consistía en un aumento masivo de la producción agrícola e industrial mediante una serie de medidas económicas, sociales y políticas. Sin embargo, los errores del megaproyecto y la represión resultaron en una gran hambruna y millones de muertos, hasta que Deng Xiaoping asumió la gestión económica y reformó la China comunista.

Un plan para una nueva China

Después de una guerra civil de dos décadas, el Partido Comunista Chino liderado por Mao Zedong se impuso al nacionalista Kuomintang en 1949. El resultado fue la creación de la actual República Popular en la China continental, y la República de China en la isla de Taiwán. En la primera, Mao impuso en los años cincuenta un régimen comunista e instaló una economía agraria adaptando el modelo soviético. Se abolió el sistema agrícola para colectivizar la tierra y hubo una purga de funcionarios e intelectuales disidentes.

Sin embargo, China no tenía la capacidad industrial de la Unión Soviética y no podía desarrollarse tan rápido. Frente a ello, Mao lanzó el Gran Salto Adelante en 1958 para convertir al país en una potencia por dos vías, la agrícola y la industrial. Después de la colectivización forzosa de la tierra, quiso convertir a China en líder de la producción de acero. Se crearon comunas populares que agrupaban a los campesinos, pero se impusieron altas cuotas industriales que les llevó a descuidar el trabajo de la tierra. Como consecuencia, las cosechas no pudieron recogerse y muchas plantaciones se abandonaron. Durante un año, la producción de alimentos casi se paralizó y la comida gratuita que el Partido proporcionaba se agotó.

A su vez, las reformas del Gran Salto Adelante estuvieron marcadas por errores en las técnicas de cultivo, en los datos proporcionados o en la planificación de las cuotas. Mucha gente murió por accidentes en las fábricas, de hambre o por enfermedad en campos de trabajo. El resultado fueron millones de muertos por una gran hambruna, decenas según estimaciones que suman las personas ejecutadas, pues las autoridades locales extendieron la represión contra quien no cumpliera los objetivos de producción o robara comida. El Gobierno chino ocultó la hambruna durante años y atribuyó la catástrofe a desastres naturales, pero el Gran Salto Adelante ya provocaba críticas dentro del Partido contra Mao y el aislamiento de China en el mundo.

Del Gran Salto Adelante a la Revolución Cultural

El sistema de megaproducción de las comunas y de las fábricas ya era insostenible entre 1960 y 1961. Fue entonces cuando el secretario general del Partido Comunista, Deng Xiaoping, el presidente de la República Popular, Liu Shaoqi, y el primer ministro, Zhou Enlai, empezaron a tomar el relevo en la dirección del país. Adoptaron una vía más pragmática para revertir el daño de las reformas igualitarias de Mao: abrieron el país permitiendo la entrada de inversiones extranjeras, integraron el capitalismo en la China comunista en un modelo llamado “socialismo con características chinas” y restablecieron los lazos con Occidente.

No obstante, aunque había sido apartado de la economía, Mao continuó como líder supremo del país y presidente del Partido Comunista. Con influencia en la cultura y la educación, lanzó en 1966 la Revolución Cultural para reimponer su pensamiento en el propio Partido y la sociedad, depurándolos de los que consideraba elementos burgueses infiltrados que querían implantar el capitalismo. La purga y las luchas entre facciones dejaron miles de muertos en un nuevo proceso que duró hasta la muerte de Mao en 1976.

Carlota García

Gijón, 1998. Graduada en Estudios Internacionales y Máster en Geopolítica y Estudios Estratégicos. Interesada en el análisis de conflictos, geopolítica, seguridad y las relaciones internacionales.