Forty Little Mothers es una película de comedia dramática estadounidense de 1940dirigida por Busby Berkeley y protagonizada por Eddie Cantor .
El profesor desempleado Gilbert Jordan Thompson impide que una extraña suicida llamada Marian Edwards salte de un muelle y la ayuda a conseguir un trabajo para poder mantenerse a sí misma. Luego, encuentra un bebé abandonado con una nota pidiendo que alguien le dé un buen hogar. Cuando no encuentra a nadie que reclame al bebé, Gilbert lo "adopta" para que no acabe en un orfanato.
Mientras tanto, la madre del bebé, Marian, llega unos minutos tarde para reclamar a su hijo y trata desesperadamente de encontrarlo, sin saber que el hombre que le salvó la vida está cuidando a su hijo.
Pronto Gilbert consigue un trabajo docente con alojamiento en una escuela para niñas que no permite que las maestras tengan familias. Esto lo obliga a esconder al bebé, al que llama "Chum". Los estudiantes acosan al profesor e intentan un plan tras otro para que lo despidan porque están enojados con él por reemplazar al profesor rompecorazones que amaban.
Cuando las niñas descubren a Chum y escuchan su historia, se convierten en sus "cuarenta pequeñas madres" y luchan por el privilegio de cuidarlo, decidiendo además que el profesor no es tan malo después de todo.
Después de que los miembros del personal ven a las niñas haciendo ropa de bebé y asumen lo peor, alertan a la estricta y sensata directora, quien encuentra a Chum y despide al profesor Thompson por romper las reglas. Las chicas se amotinan y se atrincheran en su dormitorio, jurando que no saldrán hasta que el profesor recupere su trabajo. El profesor les hace entrar en razón y se prepara para irse, sin saber que Marian ha aparecido y ha reclamado a su hijo.