Leo von Klenze

Franz Karl Leopold von Klenze, conocido como Leo von Klenze (1784-1864), fue un destacado arquitecto, pintor, dibujante y arqueólogo alemán. Sus estudios transcurrieron entre 1800 y 1803 en Berlín con David Gilly y luego en París con Fontaine. En 1808, Jerónimo Bonaparte lo designó arquitecto de su corte en Kassel, posición que mantuvo después de la era napoleónica.

Von Klenze desarrolló una relación especial con el príncipe Luis I, futuro rey de Baviera, a quien acompañó en un viaje a Roma. Esta amistad le permitió recibir numerosos encargos para rediseñar la ciudad de Múnich. Entre sus proyectos, destaca la calle Ludwig, una ampliación urbana axial desde la plaza Odeon hacia el norte, inspirada en modelos italianos.

El arquitecto también fue responsable del diseño de la Gliptoteca (1815-1830), un museo situado en la plaza Real. Otras obras sobresalientes de Von Klenze incluyen la Residencia (1826-1835), la reconstrucción del Palacio Tórring y la Vieja Pinacoteca (1826-1836), una galería de arte que gozó de gran prestigio en toda Europa.

En 1830, comenzó la construcción del Walhalla, un panteón para personajes célebres alemanes con forma de templo antiguo. Con gran interés en reproducir la arquitectura de los templos dóricos griegos, Leo von Klenze se inspiró en el Partenón. Esta galería se erigió en una ladera junto al Danubio, creando un impresionante telón de fondo para el edificio en un paisaje idílico. La fachada delantera cuenta con seis columnas dóricas de pequeño diámetro, que según el rey Luis, proporcionaban una gran perspectiva de profundidad. Una escalera libre conduce a una terraza que resalta el aspecto monumental del templo, cuyo programa ornamental abarca desde la mitología antigua hasta el espíritu nacional del siglo XIX.

Como reconocido arquitecto del clasicismo, Leo von Klenze recibió encargos en Atenas a partir de 1839, incluyendo la reordenación del plano urbano. Además, en San Petersburgo, se construyó el Museo del Ermitage (1839-1852) siguiendo sus diseños.