Los Arcos del Romero son una de las
joyas arquitectónicas de la Ribera y la principal seña de identidad de
Cascante. Y es imposible mirarlos y que la mente no vuele hasta el Santuario della Madonna di San Luca, lugar de peregrinaje y uno de los enclaves con más encanto de Bolonia.
La magnífica galería barroca de ladrillo visto, compuesta por 39 arcos que se extienden a lo largo de 136 metros, conecta el núcleo urbano de
Cascante con la popular Basílica del Romero, ubicada extramuros y construida medio siglo después que la de Italia. Aunque se desconoce la autoría de la galería navarra, levantada con limosnas y aportación popular, sí parece probable que fuera obra de algún religioso del pueblo vinculado a Italia. En cualquier caso, su singularidad le otorga
una sorprendente belleza y un valor histórico- artístico innegable que tanto lugareños como visitantes no pueden dejar de admirar. A todo ello habría que añadir el gran valor simbólico que tiene este monumento, ya que marca el camino hasta la parroquia donde se cobija la Virgen del Romero, de primitiva talla románica, a quien los cascantinos profesan una gran devoción.
Descubrimiento arqueológico
Fue Cascante una villa romana que entre los siglos siglos I-III d.C. se dedicó a la producción de vino en el valle del río Queiles. Y precisamente hace apenas unas semanas se dio a conocer el hallazgo en el yacimiento de Piecordero I de la localidad de
una reja de arado romana clave para entender la agricultura en Hispania. Esta reja de arado ha sido objeto de un complejo proceso de restauración para su estudio y será expuesta en junio en la próxima Semana Romana de Cascante, cita de divulgación del patrimonio local que cumple veinte años en 2025.
Centro Termolúdico
A un municipio con orígenes romanos no podían faltarle sus termas. Por eso, Cascante cuenta con un centro termolúdico destinado a reportar bienestar a sus usuarios.
El espacio estrella es una laguna interior de hidroterapia con más de 50 elementos, entre los que destacan jacuzzis, camas de burbujas, chorros subacuáticos y aéreos, o ríos de corriente con múltiples beneficios para la salud. Todo un lujo para una localidad que no llega a 4.000 habitantes y para la zona que le ha valido a este espacio la obtención de excelentes calificaciones de los viajeros en Trip Advisor, la plataforma de viajes más grande del mundo. Además, en las inmediaciones, se encuentra un parking de autocaravanas, perfecto para los amantes del turismo itinerante.
Ya estamos viendo las razones por las que Cascante bien merece una parada a todo aquel que visite la Ribera de Navarra: patrimonio arquitectónico, ocio saludable, naturaleza y una oferta cultural que ya la quisieran otras localidades de su entorno y tamaño. Su ciclo musical
Estaciones Sonoras se ha hecho un merecido hueco entre los principales festivales de España de pequeño formato y ha convertido a esta pequeña localidad en cita obligada dentro del panorama cultural musical no solo navarro sino nacional.
Estaciones Sonoras
Estaciones Sonoras no es un festival al uso, es un festival de conciertos y es mucho mas que música. Es intergeneracional, es gastronomía, es cultura, es una experiencia única, es una de las citas imprescindibles en el panorama cultural de Navarra. Así lo demuestra su entregado público,
agotando las entradas en cada uno de sus eventos, llenando Cascante de vida. Este año celebra su edición número once y a lo largo de todo este tiempo se calcula que por Cascante han podido pasar hasta 85.000 espectadores llegados de 30 provincias españolas. El retorno económico de sus actividades para comercio y hostelería de la zona es de más de 250.000 euros, el doble del presupuesto anual del festival.
Cómo llegar a Cascante
Desde Pamplona, tomar bien la AP-15 o la N-121 en dirección Zaragoza. Abandonar la autopista o la A 68 para acceder por la
N-121-C hasta Cascante.
Los imprescindibles
1 Naturaleza, Laguna de Lor.
Rodeado de leyendas sobre hadas que exhalan lamentos y suspiros, surge este pequeño embalse natural, ubicado entre Cascante y Ablitas, que recoge las aguas del Moncayo con fines de regadío. Se trata de un lugar ideal para pasear, así como para practicar la pesca y la observación de aves, como el ánade silbón o la gaviota reidora.
Enoturismo
Bodegas Malón de Echaide. Descubre la identidad de una bodega con más de 60 años de historia, situada en unas tierras donde ya los romanos hacían vino. Con la opción de visitar los viñedos en todoterreno o buggy y visitar la bodega con degustación de algunos de sus vinos.
Yacimiento arqueológico de Pie Cordero
Espacio de gran valor en proceso de excavación desde 2007, que ha dado lugar a hallazgos interesantes como una zona de producción de vino del siglo I a.C.
Museo etnográfico con la historia de Cascante
Guarda la memoria de la ciudad
Iglesias
La Iglesia de la Victoria, antiguo convento de los Frailes Mínimos, y la Iglesia de la Asunción son otras dos visitas imprescindibles
XIX Semana Romana
Proyecto de divulgación del patrimonio arqueológico de Cascantum, denominación de Cascante en la época romana.
Museo de Santa Vicenta María
Ubicado en la casa natal de la primera santa navarra.
ALBERTO AÑÓN, ALCALDE DE CASCANTE
"“Cascante tiene pasado, pero sobre todo tiene presente y futuro”
Es evidente que uno de los tesoros que puede poseer cualquier municipio tiene que ver con el papel ejercido en diferentes momentos de la historia y con su patrimonio arquitectónico y artístico que encontramos en edificios no sólo religiosos sino también civiles. A Cascante, uno de los municipios más antiguos de Navarra y una de sus nueve ciudades históricas, esa posición nos la da, en gran parte, el legado que nos dejaron los romanos y que vamos descubriendo con nuevos hallazgos. Pero además de enorgullecernos de ese pasado, es necesario proyectarlo en nuestros días desde enfoques innovadores, sostenibles y participativos, que aportan alma y potencial social. En Cascante hemos comprendido el valor de lo que supone llevar a cabo iniciativas con estos enfoques que garantizan su continuidad en el tiempo y el refuerzo de todos nuestros atractivos turísticos. La Semana Romana y Estaciones Sonoras son claros ejemplos. Junto a ello, no podemos olvidar otra de nuestras grandes fortalezas: el aprecio por el entorno natural y por el bienestar humano. Y es que Cascante es también un buen destino para los amantes de la naturaleza, la gastronomía y el ocio saludable, con un centro termolúdico que es referente en Navarra, una hostelería que ofrece los mejores productos de la tierra y un entorno ideal para los paseos y rutas en bicicleta.
