Joan Baez: I Am A Noise (2023)

Documental sobre una de las cantautoras más influyentes del siglo XX y un icono del pacifismo en los convulsos años 60 y 70 en Estados Unidos. Joan Baez (1941) alcanzó la fama muy temprano, pues con sólo 18 años ya participó en el Festival de Folk de Newport y poco después hizo apariciones en la televisión, guitarra en mano, con una voz potente y melodiosa y una belleza natural de aspecto sencillo que desde luego no presagiaba su papel protagonista en el activismo político pocos años después.

Joan I Am a Noise –un título que hace referencia a una frase de su diario en donde explicaba que su cabeza estaba llena de música y canciones– es desde luego una película muy trabajada, que tiene detrás a tres directoras, Karen O'Connor, Miri Navasky y Maeve O'Boyle. A lo largo de casi dos horas hacen un recorrido cronológico de la vida de la cantante y a la vez intercalan un hilo conductor paralelo con diversos momentos de la última gira de Joan Baez por varias ciudades de Estados Unidos y Europa. Aunque hay algunas declaraciones ajenas o procedentes de grabaciones antiguas de padres y hermanas, casi todas las palabras que escuchamos en el documental proceden de la propia Joan Baez, recogidas en distintos momentos de su vida, a través de su diario, de entrevistas y programas de televisión del pasado o realizadas ya en la actualidad para este documental.

Lo que más llama la atención de Joan Baez I Am a Noise es que no estamos ante una historia alegre. Hay pocos momentos para el regocijo y la música. La misma Joan Baez explica que su éxito fue compatible con una infelicidad que se prolongó durante toda una vida llena de altibajos emocionales, ansiedad y tristeza. Asistimos así a una especie de terapia en donde la cantante habla de las diferentes etapas de su vida sin ocultar sus fracasos, sus decepciones, sus inseguridades o sus secretos más ocultos, como el del sentimiento de haber sido abusada de niña. Y por supuesto salen a relucir en la narración hitos vitales como su procedencia de una familia cuáquera y pacifista, su esporádica experiencia homosexual, su relación feliz y luego dolorosa con Bob Dylan, los cinco años de matrimonio con David Harris, el nacimiento de su hijo, sus problemas para compaginar trabajo y maternidad, la difícil relación con sus hermanas y sobre todo su implicación activa en diversas causas pacifistas, contra el racismo con Martin Luther King, la Guerra de Vietnam, Camboya, etc.

Desde mi punto de vista, no es Joan Baez I Am a Noise un documental de música, ni siquiera de una cantante, sino más bien un testimonio biográfico sobre la diferencia entre el éxito o la fama y tener una vida lograda. Porque, a través de un envoltorio visual de imágenes de archivo, fotografías familiares, películas caseras o grabaciones de conciertos, más que nada tenemos aquí una confesión de los problemas y sinsabores que han ocupado toda la vida de una reconocidísima y querida artista, legendaria en su lucha contra la violencia y a favor de los derechos civiles.