Golpe a Wall Street

Cuando ocurrió el caso GameStop estaba claro que iba a ser llevada al cine, y he estado esperando con impaciencia ese film que lo relatase. Además, soy fan de todas las películas que tratan de Wall Street, de las que he visto todas, así que mis expectativas eran altas...

Sin embargo, me he llevado una pequeña decepción con esta película, que casi tiene la factura de un telefilm.

Paul Dano no consigue transmitir nada, y los secundarios tampoco destacan. El ritmo es cansino, los gags no resultan, y la película en general carece de alma y fuerza. ¡Qué diferencia con La gran apuesta, Boiling Room o Rogue Trader, que tratan temas similares!

Lo único por lo que vale la pena verla es para tener una idea de lo ocurrido, como si fuera un documental dramatizado, pero creo que como entretenimiento no funciona, una lástima.

*Estilo

Dentro de un tema como es el mundo financiero podría pensarse que la película puede llegar a provocar el sopor del espectador. Nada más lejos de la realidad. Golpe a Wall Street toma un camino cercano a La gran apuesta en el tratamiento de su historia. Apuesta por una dirección dinámica, salpicada por puntos de comedia que vienen, en su mayoría, derivados del personaje del hermano interpretado por Pete Davidson. Además, sabe sacar provecho de una banda sonora muy cuidada, reconocible por el público joven y que aumenta en muchas ocasiones la vena cómica de la película, provocando enseguida la empatía del espectador. A diferencia de La gran apuesta, la película no se enfoca en una visión didáctica, sino que gasta todas sus energías en convertirse en un espectáculo de entretenimiento bien narrado.

*Unión del iguales

Golpe a Wall Street no solo muestra al protagonista interpretado por Paul Dano y a sus familiares contra los agentes de Wall Street, sino que se compone de una galería de personajes que acabarán uniéndose en esa guerra. Se muestra concretamente a un dependiente de GameStop, una enfermera y dos estudiantes universitarias. Todos ellos se presentan al espectador, que entiende la situación económica que comparten todos ellos. Entre ellos, el resto de seguidores y Keith Gill se acaba conformando una unión de individuos que se consideran iguales. Forman una masa que se revela contra lo dictado en las esferas superiores. Durante toda la película aguantaran la presión para vender sus acciones a pesar de la impresionante subida del valor de GameStop.

Un inconveniente que puede surgir al ver Golpe a Wall Street es una sensación de repetición, sobre todo con la pareja universitaria, que aparecen en pantalla cada cierto tiempo para plantear siempre la misma situación, aplanando un poco los personajes.

*Lucha de clases

Lo que al principio solo es el estudio de evolución de una acción y la apuesta para aumentar un patrimonio individual, se convierte en una batalla por acabar con quién mira desde arriba e impone sus normas. Se trata, al final, de una auténtica lucha de clases. Se crea alrededor del personaje de Paul Dano toda una comunidad, que va sumando adeptos continuamente. Gente del mundo corriente, trabajadores con preocupaciones más allá de dónde colocar la nueva pista de tenis o qué cuántos trabajadores contratar para la limpieza de la mansión. Todos ellos comparten con su líder las ansias de demostrar algo a los de arriba, existimos. No somos dinero tonto. Juntos tenemos poder y podríamos hacer temblar vuestro ático de cristal.

Desde el primer momento de Golpe a Wall Street se menosprecia las acciones y movimientos de los pequeños inversores. Realmente se marca la distancia entre las dos clases sociales, despreciando el dinero que proviene de abajo. Esta forma que los agentes de Wall Street usan de manera despectiva para referirse al dinero de los pequeños inversores da título a la película.

Al final se acaba dotando a Golpe a Wall Street de una cierta epicidad. El protagonista corre desnudo, va de frente contra todo, luchando contra lo que creo injusto. Y no está solo. Detrás tiene a mucha gente que sabe ver la manipulación a la que son sometidos y quieren dar una patada al sistema y reafirmar su posición.

Todo esto provoca, como se explica al final, que los peces gordos deban estar más atentos a lo que sucede con “los pequeños inversores”. La batalla de Keith Gill ilumina un camino donde no solo las altas esferas tienen peso en el mercado y se concede al ciudadano de a pie el valor que merece.

*Conclusión

Golpe a Wall Street supone un auténtico espectáculo de entretenimiento y una oda a la lucha de clases, acompañado por una notable banda sonora que nos hace saltar de la butaca y arramblar contra Wall Street.

Escrito por Carlos Moreno Latorre

Es muy buena aún si no tienes nociones de economía como es mi caso. Sí que debes saber qué son las acciones a corto plazo, ese es el único concepto para entender la situación. Me ha parecido una película documental muy estimulante ¿Cómo no va a ser estimulante que millones de gente de clase media/pobre se junte para jugársela a Wall Street y el que lo empezó todo acabe con 34 millones en el banco? Qué lástima no haber sabido que existía Reddit por esa época, todos mis problemas estarían solucionados posiblemente.
La forma que tienen de narrar los hechos cronológicamente es perfecta. Las referencias al caso real están muy bien y la música cuadra con todas las escenas, te hace vibrar.
'Si un grupo de hienas se juntan pueden tumbar a un león', desde luego.

Dumb money está dirigida por Craig Gillespie, y se traduce como "dinero tonto", que es como se refieren a las inversiones de la "gente común" los grandes inversores de Wall Street. Es decir, dinero que no hay que tener en cuenta. Sin embargo, Keith Gill o Roaring Kitty en Youtube (Paul Dano). Este analizó el mercado y decidió invertir muy fuerte por GameStop (53 mil dólares), una empresa que estaba ya casi en bancarrota. Pero el movimiento salió bien y poco a poco fueron incrementando el precio de las acciones, algo que hizo temblar a Wall Street por las ventas en corto. Las ventas en corto consisten en vender de manera anticipada acciones apostando por una caída en sus precios con el objetivo de recomprarlas por un precio más económico más adelante. De esta forma, los inversores obtienen una ganancia sustancial. El caso es que la gente lo siguió y lo que eran 50 mil dólares pasaron a ser más de 24 millones en poco tiempo, algo que lo llevó a ser multimillonario, incluso cuando Wall Street intentó detenerlo.

La película no es didáctica como sí lo fue La gran apuesta en su día, pero sí engancha por lo peculiar de su protagonista, un friki de los gatos con una bandana roja cuya intuición y poder de convicción provocó que los demás lo siguieran e incrementaran el precio de las acciones más de un 1000% en cuestión de días. La película también narra la precaria situación matrimonial por la que pasaba, con una hija recién nacida, una mujer que lo apoya y un hermano que trabaja de repartidor (Shailene Woodley y Pete Davinson) y de otros inversores con trabajos normales que arriesgan sus pocos ahorros por GameStop (America Ferreira). Es la típica película que gusta porque acaba perdiendo el rico, aunque el protagonista, que era pobre, acaba siendo el más rico de todos.

En definitiva, GOLPE A WALL STREET es una película entretenida. Quizás no os enteréis de nada, porque maneja conceptos bursátiles y demás palabrejas que sonarán a chino, pero la esencia se mantiene, pues todo va de la cabezonería y visión de un hombre, y de cómo el resto lo siguió e hizo que Wall Street se tambaleara. Basada en hechos reales, por supuesto, cosa que es un plus añadido. No os la perdáis.

Esta película nos relata un caso real guionizado, para endulzar la cruda realidad del sueño americano.
La bolsa de valores es el máximo exponente del capitalismo y en USA Wall Street, ha sido el camino donde muchos han intentado hacer realidad su sueño, pero solo muy pocos lo han conseguido.
En los 104 minutos de duración conocemos una caso de éxito actual, donde las aplicaciones y las redes sociales muestran todo su poder cuando son sabiamente utilizadas por Keith Gill (PAUL DANO), asimismo se pone de manifiesto el dramatismo de los damnificados, que en toda la historia del capitalismo, han sido muchos y anónimos.
El lenguaje es muy rudo, maquillando la jerga económica, jurídica y financiera, que pensamos merecería ser explicada para comprender el alcance de todo lo que se nos relata.
Es una película ideal para el tradicional CINE FORUM, donde un profesional técnico nos introduce en el tema y una vez visionada, contesta todas nuestras preguntas para abrir un debate.
Es destacable el trabajo de la pareja protagonista especialmente el de SHAILENE WOODLE, la señora GILL, donde el director GRAIG GILLESPIE, consigue sacar su mejor versión.
PUNTUACIÓN. *** (sobre 5) . Francis New Press.