En el ámbito educativo, Loris Malaguzzi es reconocido como un líder innovador, siendo el principal impulsor del enfoque pedagógico Reggio Emilia. Su vida y trabajo han dejado una profunda huella en la educación infantil, desafiando las normas establecidas y promoviendo un enfoque centrado en el niño. En la siguiente nota exploraremos el legado de Malaguzzi y los principios de la pedagogía Reggio Emilia, que continúan inspirando la educación en la actualidad.

Una trayectoria transformadora en la educación

El niño es un ser activo, constructor de conocimientos, competente y curioso; por lo tanto, la escuela debe ser un lugar que responda a su capacidad de aprender, donde se sienta protagonista y donde pueda expresarse de manera plena.

Malaguzzi (2011)

Loris Malaguzzi, nacido en 1920 en Italia, fue un influyente pedagogo reconocido por su trabajo revolucionario en el campo de la educación infantil. Durante la década de 1960, Malaguzzi trabajó como secretario de educación en la ciudad de Reggio Emilia, donde comenzó a desarrollar su enfoque pedagógico.

Loris Malaguzzi
Scuole e Nidi d’infanzia. (2020). Loris Malaguzzi, impulsor del método educativo Reggio Emilia. [Fotografía]. Recuperado de www.eldiariodelaeducacion.com

Su trabajo fue inspirado por autores como Froebel, Montessori, Dewey y Piaget, entre otros. Loris Malaguzzi abogaba por una educación que fomentara la reflexión, el diálogo y la cercanía con los niños, rechazando las prácticas tradicionales centradas en el adulto.

Así, la pedagogía Reggio Emilia se basa en la idea de que los niños son activos, exploradores y poseen muchas formas de expresión. En consecuencia, el pedagogo apuesta por un currículo que promoviera la creatividad y el trabajo basado en proyectos. Todo ello en relación con el contexto cultural de los infantes.

La pedagogía de Malaguzzi

Su trayectoria pedagógica cobró relevancia después de la Segunda Guerra Mundial cuando apoyó a un grupo de residentes en la reconstrucción de una escuela en Villa Cella, cerca de Reggio Emilia, Italia. Esta iniciativa llevó al establecimiento de una escuela para niños pequeños. La pedagogía de Malaguzzi, reconocida por Newsweek en 1991 como uno de los mejores sistemas educativos del mundo, desafía las visiones tradicionales de la infancia. Y es que, al considerar a los niños como seres activos y exploradores, Loris Malaguzzi cambió el enfoque hacia el menor como protagonista en una sociedad que a menudo marginaba sus voces.

Una educación sin límites

La creación de una comunidad educativa fue un elemento clave en el enfoque de Malaguzzi. El trabajo colaborativo con docentes de diversos campos, padres y miembros de la comunidad buscaba fomentar el desarrollo emocional, social e intelectual en cada niño. De esta manera, la pedagogía Reggio Emilia no solo se limita al espacio físico de la escuela, sino que se extiende a toda la comunidad, convirtiéndola en un entorno educativo en constante interacción y enriquecimiento mutuo.

Más tarde, para la década de 1970, algunos de los logros de las escuelas de Reggio Emilia, eran las reuniones familiares, formación docente, conferencias educativas y creación directa de materiales educativos (Reis et al., 2022). Como inciso, para profundizar tu formación en esta área, te sugerimos acceder a nuestro curso en educación emocional.

Esencia de Reggio Emilia: Principios fundamentales

El enfoque se basa en varios principios básicos que buscan promover un ambiente de aprendizaje centrado en el niño, participativo, constructivista y democrático. Principios fundamentales que, por un lado, guían la práctica pedagógica en las escuelas Reggio Emilia y han influido en sistemas educativos de todo el mundo; y, por otro, reflejan la visión de los niños como seres competentes y activos en su propio proceso de aprendizaje, así como la importancia de la colaboración entre educadores, familias y la comunidad en el entorno educativo.

A fin de cuentas, el entorno educativo es un esfuerzo conjunto en el que todos juegan un papel importante. En este contexto se destacan cinco principios clave, que son fundamentales para comprender y aplicar dicha pedagogía de manera efectiva; éstos se presentan a continuación (Valencia, 2017):

Los 5 fundamentales

Boada, R. (2017). El impacto de la Segunda Guerra Mundial marcó a Malaguzzi, que se comenzó a replantear el método educativo establecido, ya que para él empobrecía a los niños. Según Loris este método subestima a los niños, los encasillaba, no los deja expresarse, ni experimentar, ni aprender por sí mismos. [Fotografía]. Recuperado de www.ticumiku.com
  1. El niño como protagonista: Se reconoce al infante como un ser fuerte, capaz, curioso e interesado en establecer relaciones. Se valora su potencial, curiosidad e interés en construir su aprendizaje dentro de su entorno.
  2. Docente competente, colaborador, investigador y guía: Los educadores en el marco de educación Reggio Emilia acompañan a los pequeños en la exploración de temas, proyectos e investigaciones, actuando como facilitadores del aprendizaje y guías en el proceso de construcción del conocimiento.
  3. Espacio como tercer maestro: De acuerdo a lo propuesto por Loris, se considera que el diseño y uso del espacio en el entorno educativo promueve relaciones y encuentros significativos. Así, cada rincón y elemento de este se valora y se organiza de manera que fomente la interacción, creatividad y aprendizaje.
  4. Las familias como aliadas: Por supuesto, la participación activa de las familias es fundamental en la pedagogía Reggio Emilia. De esta forma, se reconoce a los padres como colaboradores en la educación de sus hijos, y se fomenta una estrecha relación entre la escuela y la familia para garantizar el bienestar y desarrollo integral.
  5. La documentación pedagógica: Se emplea para mostrar cómo tanto los pequeños como los adultos colaboran en la creación de cultura y conocimiento, y puede manifestarse a través de diversas formas de arte. Esto de cara a informar a los padres sobre las experiencias de sus hijos, ayudar a los educadores a comprender mejor a los niños, evaluar su propio desempeño y compartirlo con otros.

El rol del entorno en el aprendizaje según Reggio Emilia

Sabemos que el entorno desempeña un papel vital en el proceso de crear experiencias de aprendizaje significativas. Dicha idea es tan crucial que Malaguzzi definió al entorno como el “tercer maestro”. Y esta especie de “tercer maestro” debe ser adaptable y flexible, ofreciendo oportunidades para que los alumnos y los maestros aprendan de forma colaborativa. Incluso la disposición y ambiente del aula influyen en la percepción que se generan los niños de sí mismos.

La importancia de un entorno adaptado

Pedagogía Reggio Emilia
Reggiochildren (s.f.) Gianni Rodari y Loris Malaguzzi, Reggio Emilia, 1972. [Fotografía]. Recuperado de www.reggiochildren.it

En esto, los maestros observan las elecciones de los pupilos con respeto, prestando atención al significado detrás de lo que deciden representar, así como lo que dicen. Lo que les permite desarrollar una profunda conciencia y comprensión de los intereses y progresos de cada uno. Son las relaciones de los niños con sus padres, maestros y entorno las que estimulan su curiosidad y su impulso por descubrir más (Scott, 2023).

El mobiliario, por su parte, suele estar diseñado para crear pequeños espacios donde los niños puedan relacionarse en grupos pequeños, fomentando su socialización. De modo que cada rincón del espacio del aula debe tener su propia identidad y propósito. Incluyendo áreas para la lectura, juego simbólico, experimentación con materiales, entre otros. ¿El fin? Crear un ambiente ordenado y bello que estimule la exploración a través de los sentidos y el aprendizaje (Valencia, 2017).

Conclusión

La pedagogía Reggio Emilia subraya el papel esencial del niño como protagonista activo de su aprendizaje. Y en esto no podía faltar la colaboración entre maestros, padres y la comunidad, que fomenta un entorno de aprendizaje enriquecedor. Por lo tanto, se les brinda la libertad y el apoyo necesarios para que puedan expresarse, investigar y descubrir de manera activa.

Malaguzzi ha expresado muy claramente que nada en la escuela debería suceder sin alegría, lo que resalta la importancia de un enfoque educativo que inspire felicidad y entusiasmo en los niños. La creación de espacios físicos y emocionales que estimulen la creatividad y la interacción social refleja el compromiso de Malaguzzi con una educación centrada en el alumno.

Referencias bibliográficas

  • Malaguzzi, L. (2011). La educación infantil en Reggio Emilia. Editorial Octaedro.
  • Reis, R., Filgueiras, I. P. y De Siqueira Farias, U. (2022). A educação física com a educação infantil. Revista Corpoconsciência (Impresso), 201 220. https://doi.org/10.51283/rc.v26i1.12970
  • Scott, W. (2023). The pre-schools of Reggio Emilia: their foundations, their philosophy and their practice. Education Journal Review28(3).
  • Valencia, N. (2017). Ver, escuchar, sentir; Metodología Reggio; Estudio en primera infancia. [Trabajo fin de grado]. Instituto público Narcís Monturiol.