Por la trascendencia del Himno Nacional es toral y relevante que los mexicanos desde la infancia conozcan la historia de este símbolo patrio, de ahí la propuesta del investigador Federico Vale, autor de Memoria sinfónica e histórica de himnos nacionales, libro que presenta una investigación de la convocatoria que hizo Antonio López de Santa Anna para realizar el Himno Nacional.
Luego de su participación en la segunda edición de la Feria Internacional del Libro en Coyoacán, Federico Vale habló sobre la necesidad de crear lo que sería el Museo del Himno Nacional.
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En entrevista con MILENIO, el investigador y periodista dijo: “No solamente he buscado a autoridades locales, desde alcaldías en la ciudad de México, también he contactado a la secretaria de Cultura de la capital del país, así como a la secretaria de Cultura federal, además de gobiernos de algunos estados, haciéndoles la propuesta muy precisa”.
El planteamiento es hacer un Museo del Himno Nacional, así como existe un santuario dedicado a la Bandera Nacional, pero a las autoridades de todos los niveles, no les interesa el tema. El investigador cuenta que anteriormente sometió como proyecto a la Secretaría de Cultura federal su iniciativa.
“De un símbolo patrio tan importante para los mexicanos, como el Himno Nacional, no hay un recinto exclusivo. Además de eso, he propuesto conciertos para que la gente se percate de la existencia de las 11 partituras que se hicieron para el concurso lanzado por Santa Anna; me parece fundamental que los mexicanos las conozcan desde la infancia”.
Quien tenga en sus manos este libro —subrayó— conocerá tanto literatos, como músicos que tuvieron el honor y el tino de darse la oportunidad de concursar en un certamen tan importante. “Es un honor y nos llena de sensibilidad, pues nos conmueve hasta las lágrimas”, afirma.
“En las escuelas no nos enseñan que hay distintas versiones. Los himnos eran realmente sofisticados y elegantes, eran verdaderas óperas. Quien tenga el libro, en la página 99 hay un código QR para que pueda escuchar la primera versión grabada oficial del Himno Nacional cantada por una soprano y por un tenor, se oye magistral, a mí me encanta”.
También propuso hacer un disco con las 11 versiones completas de los himnos que concursaron “eso es parte del proyecto que propuse, vamos a grabarlas todas con los implementos tecnológicos que tenemos ahora”.
Relató cómo encontró los sobres originales con cada una de las partituras. En el Museo Nacional de Historia, que estaba en el Castillo de Chapultepec, estaba la biblioteca Orozco y Berra, pero su acervo lo trasladaron a Tlalpan, que está en la calle de Allende y Juárez en el Centro Histórico: “cuando los vi, casi lloro de la emoción al tener en mis manos esas partituras de los músicos y escritores de gran nivel que concursaron”.
Al finalizar su presentación, Federico Vale autografió varios ejemplares de Memoria sinfónica e histórica de himnos nacionales, al tiempo que recibió la felicitación de Gerardo Valenzuela Nava, director y fundador de la Feria Internacional del Libro en Coyoacán.
PCL
