Avances en la agricultura sustentable: probada sinergia entre la siembra directa y el uso de rastras multipropósito – Giorgi S.A. Skip to main content

Cuidando la salud del suelo y la productividad agrícola a través de herramientas innovadoras y prácticas agroecológicas.

La siembra directa ha demostrado ser una revolución en términos de conservación del suelo y eficiencia agronómica, y esta realidad se pone de manifiesto, año tras año, en la actividad agrícola de nuestro país. Esta técnica, que evita el laboreo convencional para proteger la estructura del suelo, puede potenciarse aún más con el uso de tecnologías como es la rastra de discos multipropósito que hemos desarrollado, una herramienta que prepara el terreno para una siembra más eficiente y ecológica.

La agricultura sustentable se ha convertido en una prioridad en Argentina, donde la siembra directa (SD), conocida internacionalmente como “agricultura de conservación”, ha emergido como una práctica clave. Al minimizar la remoción del suelo y promover la diversidad de cultivos, la SD preserva la estructura del suelo y reduce su degradación por erosión hasta en un 90-96%.

Salud del suelo: oxigenación y preparación eficiente

Desde la perspectiva de la agroecología, el suelo se percibe como un ecosistema activo y diverso, poblado por una amplia gama de microorganismos y mesofauna. Esto conlleva la necesidad de adoptar prácticas de cultivos que imiten los ciclos naturales con gran interacción entre el suelo y las plantas.

El suelo provee nutrientes y diversos compuestos a las plantas, mientras que éstas -a su vez- generan la materia orgánica esencial para mantener la vitalidad, la fertilidad y la estructura del suelo.

Airear el terreno, utilizando la maquinaria adecuada, es el paso previo fundamental a la siembra, ya que, con esta técnica, se consigue la cantidad adecuada de oxígeno que las raíces necesitan para crecer con total seguridad.

Desafíos y costos asociados a la actividad agrícola argentina

Además de las buenas prácticas agrícolas antes mencionadas, que impactan en la manera de tratar y trabajar los suelos, los productores deben constantemente evaluar los costos asociados a la actividad y que influyen en su rentabilidad.

El control de malezas, especialmente con los altos precios de los herbicidas, representa uno de los principales desafíos. Además, el incremento en la resistencia y tolerancia de diversas especies de malezas en los últimos años también ha aumentado este costo de producción.

Ante estas situaciones complejas, hemos desarrollado un equipo cuya utilización permite mantener los atributos de la siembra directa (en cuanto a cobertura y retención de humedad), con un muy eficiente control de malezas de manera mecánica.

Rastras Multipropósito: potenciando la siembra directa

Las rastras de discos multipropósito acondicionan y preparan los suelos, trayendo una serie de beneficios agronómicos, económicos y ambientales.

Se trata de un sistema que complementa la utilización de la técnica en SD, reduciendo notablemente los costos, durante la preparación del suelo y la siembra en general, según opiniones de usuarios y profesionales del sector.

Estas máquinas realizan un tratamiento superficial del suelo en los primeros 3 a 5 cm, provocando un desenraizamiento de las malezas. Poseen un sistema de discos vinculados entre sí por medio de uniones flexibles, que forman una “cadena de discos” que giran y rozan sobre el suelo, emparejando el perfil, por lo que -además de desmalezar- también van eliminando huellas de maquinarias y pisadas de animales, y tapan pozos y demás desniveles o imperfecciones que el lote pueda presentar.

Al estar cada paquete con las concavidades de los discos orientados en línea con el avance, el funcionamiento que realizan es asimilable al que realiza una rastra de discos tipo doble acción, pero con la gran ventaja que lo hace sólo en la capa superficial del suelo, sin perturbar estratos profundos ni incorporar el material a los horizontes subsuperficiales.

Esto contribuye a mejorar la permeabilidad del suelo y a preparar la cama de siembra, y es un paso inicial fundamental para asegurar que la tierra mantenga su humedad y estructura óptima, preparándola para una mejor germinación y desarrollo radicular.

Una sinergia con múltiples beneficios

El uso de la rastra multipropósito en la preparación del suelo entre siembras, en combinación con la capacidad de la SD de mejorar la agregación del suelo y aumentar el almacenamiento de carbono orgánico redunda en claros beneficios:

  • Se preserva la estructura del suelo, evitando la compactación y erosión, mejorando también, la salud del mismo.
  • Se facilita la incorporación de cultivos de cobertura, los cuales son esenciales para la mejora continua del contenido orgánico del suelo y la biodiversidad microbiana, como destacan desde AAPRESID (Asociación Argentina de Productores en Siembra Directa).
  • El paso de la rastra posibilita un tránsito de la sembradora más estable y mejora la uniformidad en la profundidad de siembra.
  • El uso de rastras multipropósito entre siembras, contribuye a aumentar la temperatura del suelo durante las épocas de heladas (entre 4/5 °C extras), lo que mejora significativamente las condiciones para la campaña posterior, ya que facilita la germinación de semillas, promueve la actividad microbiológica y reduce el riesgo de daño por heladas a las plántulas emergentes.
  • Se puede acotar el tiempo entre siembras y las plántulas emergen de forma más vigorosa y pareja.
  • La aplicación previa a la siembra de fertilizantes nitrogenados, adicionando a la rastra una tolva presurizada tipo air-drill y pequeños ciclones (conos) distribuidores de productos, aumenta la efectividad, dado que los incorpora, entremezclándolos en esa delgada capa de suelo que se está tratando.
  • La oposición que manifiestan las comunidades al uso de agroquímicos alrededor de sus poblaciones, es otro factor que vuelca la balanza hacia la práctica de tratamientos mecánicos superficiales, como lo es el uso de estas máquinas.
  • Según el análisis económico realizado por productores agrícolas y usuarios, al utilizar esta tecnología en vez de esparcir herbicidas, se genera un ahorro de entre U$S 20 y U$S 40 por hectárea. Este dato ha sido corroborado por una agencia de extensión, integrada por profesionales especializados en tratamientos contra malezas.
  • Como consecuencia de todo esto, las explotaciones agrícolas incrementan su sostenibilidad a largo plazo y su viabilidad económica.

En síntesis, la adopción de maquinaria destinada a la preparación y el tratamiento de suelos entre campañas, en combinación con la práctica de siembra directa, está definiendo el futuro de la agricultura en Argentina.

Gracias a la línea de rastras de discos multipropósito que producimos, continuamos liderando con innovaciones que respetan la tierra y maximizan los beneficios, tanto para los productores, como para la sociedad en general.