15 mejores cosas que hacer en Huntingdon (Cambridgeshire, Inglaterra)

Donde la carretera romana Ermine Street cruza el tercer río más largo de Inglaterra, Huntingdon es una ciudad pequeña pero encantadora con un mercado que data del año 1100.

Oliver Cromwell nació en Huntingdon en 1599, y en la plaza del mercado se encuentra probablemente el mejor museo de Inglaterra para el Lord Protector, alojado en un hospital del siglo XII donde Cromwell fue más tarde a la escuela.

Hay un itinerario de pequeños lugares de interés para cazar en el sendero de la ciudad histórica, como los pubs con estructura de madera y Huntingdon Castle Mound.

Volverás al río Great Ouse para descansar en el Riverside Park, realizar excursiones en canoa o visitar lugares maravillosos aguas abajo, como Houghton Mill y el próximo puente de la capilla medieval de St Ives.

Exploramos mejores cosas que hacer en Huntingdon:

1. Houghton Mill

El National Trust es propietario de este molino histórico en un entorno muy pintoresco en el río Great Ouse, en el este de Huntingdon.

Houghton Mill tiene raíces desde el siglo X, pero el edificio actual data de la década de 1600 y se amplió 200 años más tarde.

El molino dejó de producir harina en la década de 1930 y, tras ser donado al National Trust, fue utilizado como albergue juvenil durante la mayor parte del siglo XX.

En 1999 se instalaron nuevas muelas y la harina molida con piedra se utiliza para hornear pasteles y otras golosinas en la casa de té Houghton Mill.

Desde Huntingdon puede caminar junto al Great Ouse para llegar al molino y desde allí seguir el curso sinuoso alrededor de St Ives.

Houghton Mill también ofrece alquiler de canoas y puede remar por el Houghton Trout Stream hasta Hemingford Lock y regresar a través del Great Ouse, o probar el viaje de regreso de dos horas a St Ives.

2. El Museo Cromwell

El museo del Lord Protector se encuentra en una parte de la escuela secundaria donde recibió su primera educación.

Fue una adaptación del Hospital Medieval de San Juan, del siglo XII, y se puede observar el diseño románico conservado en el portal de muros de arquivolta y en la hilera de cinco ventanas de arriba.

El museo tiene la mejor colección de artefactos del Protectorado del Reino Unido. Existen varios retratos contemporáneos de Cromwell y su familia, así como monedas y medallas de retratos.

También se puede consultar una muestra absorbente de efectos personales, como su frasco personal e incluso el sombrero que llevó a la disolución del Parlamento Largo en 1653. Se exponen algunos documentos contemporáneos importantes, como la Petición y el Consejo Humildes de 1657, junto con el boticario personal de Cromwell y un gabinete florentino que le dio el duque de Toscana.

3. Hinchingbrooke Country Park

A un corto paseo de la estación de Huntingdon se encuentra en un paisaje pastoral rodeado de campo abierto.

En el río Alconbury, el Hinchingbrooke Country Park de 170 acres incluye lagos, prados abiertos y bosques de roble maduro.

Aunque hay naturaleza virgen en todas partes, el parque está atravesado por caminos de superficie dura, por lo que es bueno para cochecitos y sillas de ruedas.

En verano, puede utilizar las paradas de barbacoa o llevar un picnic, mientras que la cafetería está equipada con pasteles caseros, aperitivos salados calientes y fríos y helados.

Las tres especies de pito británicos se pueden ver en el parque, y si caminas lentamente por el agua, es posible que veas un martín pescador o una nutria.

4. Ruta de la ciudad histórica

‘Huntingdon First’ tiene un folleto que se puede descargar en su sitio web para una ruta circular que muestra más de 40 atracciones que merecen la pena por la ciudad.

Comenzará en la plaza del mercado frente al Ayuntamiento del Rey Georgian (1745) y la puesta Falcon.

Falcon Inn, que data del siglo XVI, es el pub más antiguo de la ciudad y se cree que fue utilizado por Cromwell durante la Guerra Civil.

La Cromwell House on the High Street es un edificio del siglo XIX construido en el lugar de una casa más antigua en la que Cromwell nació en 1599. El Market Inn, con entramado de madera, detrás del Ayuntamiento se encuentra en una pequeña red de pasajes históricos, mientras se encuentra en el lado lejano. El extremo sudeste de Main Street es la antigua prisión del condado y distrito utilizada para deudores y delincuentes.

Castle Hills on Great Ouse es el movimiento de tierra del castillo normando de Huntingdon, erigido en 1068 pero derribado después de un asedio en 1174 durante la Gran Revuelta.

5. The Manor, Hemingford Gray

A unas pocas millas por el río Great Ouse se encuentra una de las casas habitadas continuamente más antiguas de Gran Bretaña. La casa solariega data del año 1130 y aunque su jardín es de acceso gratuito durante todo el año, debe ponerse en contacto si desea ver la casa o apuntarse a una visita diaria en mayo.

Una residente durante la mayor parte del siglo XX fue la autora infantil Lucy M. Boston, quien escribió la serie Green Knowe aquí.

La casa ha cambiado poco desde que murió en 1990. Para aquellos familiares con la obra de Lucy M. Boston, Manor está llena de recuerdos de Green Knowe, así como de bonitos mosaicos cosidos por la propia Lucy.

También diseñó los jardines, que están rodeados por un foso y plantados con caprichosos topiarios, iris galardonados, rosas saúcas y bordes herbáceos.

6. Iglesia de Todos los Santos

Una de las pocas iglesias que había en el lado norte de la plaza, la Iglesia de Todos los Santos es un edificio gótico perpendicular de principios del siglo XVI.

Es un edificio precioso para mirar desde fuera, con mucha piedra original en las almenas, ventanas anchas, nichos de estatuas y pináculos de ganchillo.

El interior fue reelaborado por el maestro restaurador Sir George Gilbert Scott en el siglo XIX, cuando se añadió la cubierta de roble de la nave y las paradas del corazón (la magnífica cubierta del presbiterio es original del año 1500). Pero hay un resto de época medieval en forma de fregadero del siglo XII con cuenco y tallo poligonal.

Se cree que proviene de la antigua iglesia de Sant Joan y se utilizó para el bautizo de Oliver Cromwell.

7. Parque de la Ribera

Un largo tramo del río Great Ouse en Huntingdon ha quedado libre de desarrollo, ofreciendo un espacio idílico para andar, montar en bicicleta, observar la naturaleza y conciertos en las orillas del agua en verano.

También puede sentarse y ver los barcos estrechos flotando en una tarde cálida.

Con dos millas atrás hasta la iglesia de Hartford, el parque tiene un refugio de barcos y Purvis Marine, que alquila barcos mayores por horas o días.

En el extremo superior hay una gran vista sobre el agua hasta el molino Riverside del siglo XIX, que sirvió como fábrica de tartas de aceite, depósito de ropa militar de guerra y fábrica de medias antes de ser convertido en pisos .

8. Agua de Grafham

El octavo embalse más grande de Inglaterra se encuentra a unas pocas millas en el suroeste de Huntingdon en Grafham Water.

Con casi 2.000 acres, el embalse se construyó en 1965 y está lleno de agua del río Great Ouse.

En cuanto se construyó, Grafham Water empezó a atraer vida salvaje, y en la orilla oeste hay una reserva de vida salvaje formada por bosques de 400 años de antigüedad.

Los zorros, los patos y los grupos pasan el invierno en el lago si está aquí para dar un paseo o en bicicleta en mayo enfriado

Antes de venir, echa un vistazo al sitio web del Grafham Aquatic Center, ya que organizan varios días de alquiler de deportes de pádel «Paga y juega» durante el verano en el que puedes venir y utilizar un kayak, una canoa o una mesa de pádel durante 30 minutos o 60 minutos. minutos sin reserva previa.

9. El Museo Norris

Abierto todo el año, este museo gratuito situado cerca de St. Ives documenta 160 millones de años de historia de Huntingdonshire.

Con un entorno histórico a orillas del río, el Museo Norris se estableció en 1933 después de que el anticuario Herbert Norris diera su vasta colección de reliquias de Huntingdonshire en la ciudad.

El museo está mejor que nunca gracias a una renovación y ampliación de 1,5 millones de libras que se completó en 2017. Las galerías albergan artefactos históricos de esta colección de casi 33.000 artículos, junto a pantallas inteligentes interactivas y tableros de información a medida para mantener a los niños a bordo.

Algunas de las muchas curiosidades interesantes incluyen fósiles jurásicos, un colmillo de mamut, cerámica romana, herramientas de la edad del bronce y puntas de lanza.

También le esperan pinturas, textiles, herramientas, muebles y fotografías específicos de Huntingdonshire, mientras puede entrar en el antiguo estudio de Herbert Norris.

10. Buckden Towers

Una visita obligada si eres por la zona es esta casa solariega fortificada del siglo XII en el pueblo cercano de Buckden, construida por primera vez para los obispos de Lincoln.

Éste era originalmente un edificio de madera antes de ser reconstruido en ladrillo en la década de 1470.

Gran parte del conjunto fue derribado entonces por orden de los Comisarios Eclesiásticos en 1632, pero se conservan las puertas interiores, la gran torre y fragmentos de la muralla interior almenada, defendido por una puerta exterior y muralla.

Buckden Towers es propiedad de los claretianos, una orden católica romana, y mientras el edificio está cerrado a los visitantes, puede pasear por el recinto, inspeccionando el antiguo foso y el jardín ornamentado de nudos en el patio.

Fuera de la muralla hay un huerto y un campo abierto con ovejas pastando.

11. Johnsons de Old Hurst

A primera vista, Johnsons of Old Hurst es una granja, aunque bien provista, con su propia panadería, carnicería y mostradores de frutas y verduras, quesos, delicatessen y alimentos especiales.

Pero, además de la brasería y la casa de té del sitio, Johnsons también tiene mucho que ver para las familias.

En la granja hay avestruces, vacas, peces, patos, loros, cabras, burros y una variedad de peces.

Pero lo más raro de todos son los cocodrilos.

Tienen más sentido de lo que podría pensar, ya que se utilizan para eliminar los residuos de la carnicería.

También puede pasear por el bosque para tomar el aire fresco después de comer, mientras que hay un parque infantil.

12. Puente de St Ives

Uno de los puntos de interés esenciales de St Ives es el puente del siglo XV que cruza el río Great Ouse.

Éste es uno de los cuatro puentes del país que conserva una capilla.

Puede entrar pidiendo una llave en el Museo Norris o en el ayuntamiento.

La capilla es inusual por su cripta, que se encuentra a tan sólo dos metros por encima de la línea de flotación.

Fue restaurado en 1930 después de siglos de usos extraños, como una consulta médica, un pub e incluso un burdel en el siglo XVIII, cuando St. Ives era una parada clave en el camino hacia Londres.

De pie en la orilla, notará que el puente presenta dos arcos de medio punto en el lado sur, en contraste con los otros arcos góticos apuntados.

Esto se remonta a cuando el puente fue parcialmente derribado en 1645 durante la Guerra Civil y se instaló un puente levadizo con fines defensivos.

13. Hamerton Park Zoo

Esta atracción animal es un poco más remota, pero no se puede perder si va de vacaciones con niños.

Hamerton Zoo Park está dedicado a primates, gatos y pájaros, con más de 100 especies, muchas de las cuales son raras o en peligro de extinción.

Entre los primates hay una variedad de lémures diferentes, incluidos los blancos y tintos, de collar y de cola anillada.

El parque tiene grandes felinos como los guepardos y los tigres blancos de Bengala y Malay, mientras que parte de la diversidad salvaje de otros mamíferos incluye hormigueros gigantes, pudú chileno, cebras de Damara y marsupiales como los wallabies de Bennett, los wallabies de Parma , los potoroos de nariz larga y los pademelones negros. .

Su hijo también podrá alimentar animales domésticos como burros y cabras, mientras que el ‘Express Railroad’ le transporta desde los paddocks de los burros a los recintos de los leones durante las vacaciones escolares y los fines de semana.

14. Alpacas Winwick Barn

Otro tipo de encuentro con animales se puede realizar en esta granja que cría alpacas Huacaya por su lana.

Aquí hay unas 70 alpacas en los campos y, aunque Winwick Barn es una granja privada, puede iniciar sesión en su sitio web para reservar una experiencia de Alpaca Walk de dos horas.

Aquí, adultos y niños a partir de seis años pueden pasar dos horas conduciendo a estos animales dóciles por grandes paddocs, conociendo a sus crias (bebés) y aprendiendo sobre su comportamiento, su dieta y personalidades individuales.

15. Reserva natural de la isla Holt

Otra cosa que hay que hacer en St Ives es andar por la pasarela hasta esta isla del Great Ouse.

Abierto en verano, la isla es una reserva natural en un lugar que hasta el siglo XX fue un próspero cañaveral.

Aún se puede andar entre los sauces que antiguamente se cortaban y se cosechaban para la cestería.

Desde que los carrizales fueron abandonados después de la Segunda Guerra Mundial, la isla se ha convertido en un hábitat de zorros y de numerosos pájaros, entre ellos el martín pescador, el carrizal, el broncodil y el mirlo.

Las plantas incluyen la consola, el iris de bandera amarilla y la salicaria púrpura, mientras que las ortigas proporcionan alimento para las orugas que se convierten en mariposas de almirante rojo, pavo real y tortuga en verano.

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