Cuando conocemos nuestro cuerpo a la perfección y tenemos un estilo de vestir muy claro y trabajado durante años, es muy fácil encontrar la manera de destacar en cualquier situación. Si no, que se lo digan a Carolina de Mónaco, que en su última aparición pública acompañando a su hermano pequeño Alberto, ha conseguido sorprender a todos, e incluso a hacer sombra a Charlene que no puede competir en estilo con su cuñada. 

Nadie duda del estilo y buen gusto de Carolina de Mónaco, que durante toda su vida ha sabido mejor que nadie sacarse partido y ser una de las royals con el armario más interesante de Europa, pero a sus 67 años, la socialité sigue sacándose trucos de la manga para conseguir que cada una de sus apariciones nos deje con la boca abierta, ¡aunque ella ni siquiera sea la protagonista! 

Homenaje a su hermano 

El pasado miércoles día 15 de mayo se celebró en París un acto de homenaje a Alberto II de Mónaco, el Príncipe de Mónaco, en el que Emmanuel Macron le otorgaba la insignia de Comandante de Mérito Agrícola en el Palacio del Elíseo, que es la sede de la Presidencia de la República francesa. Hasta allí se trasladaron toda la familia de Alberto: Su mujer Charlene y también sus hijos, los mellizos Jazmin Grace y Alexandre Coste. Allí también estuvo presente la mujer del actual presidente francés, Brigitte Macron, que tiene muy buena relación con los Grimaldi. Pero a esta especial cita tampoco ha querido faltar alguien muy especial para el monegasco, su hermana Carolina de Mónaco.

Alberto Charlene hijos
Palais Princier de Monaco

El conjunto de Carolina de Mónaco que no ha dejado a nadie indiferente

Carolina de Mónaco ha sorprendido a todos en este emotivo evento internacional con un vestido por encima de la rodilla, en riguroso negro, y le ha sobrepuesto una blazer con doble botón, un patrón bastante moderno levemente oversize y en un precioso color blanco roto, ejerciendo como si de abrigo se tratara pero dotando al conjunto de mucha más actualidad y naturalidad. Es una combinación tremendamente clásica y sencilla, pero que cambiando un abrigo por una blazer larga funciona a la perfección y refuerza la esencia de fashionista de la hija de Grace Kelly. A este conjunto sumaba un bolso pequeño y negro de Chanel y cómo únicas joyas apostaba por un collar dorado y unas sencillas pulseras.

Charlene, Alberto y Carolina de Mónaco
Palais Princier de Monaco

Sin límites de edad y opacando a Charlene  

Carolina de Mónaco tiene grabado a fuego que la edad no es impedimento para disfrutar de la moda y por ese motivo no dudó en apostar por un look tan moderno con vestido corto, algo que mucha gente podría asociar a alguien más joven, pero que la royal ha sabido defender como nadie. Su unión con la casa Chanel ha hecho que apostar por el blanco y el negro en conjunción sea una cierto seguro para la princesa. 

Y no solo ha destacado por su look en sí, sino también porque ha opacado a la mismísima esposa del homenajeado, Charlene de Mónaco, que para esta ocasión escogió un traje de chaqueta rosa palo y estampado de cuadros. El conjunto de dos piezas, con botonadura cruzada y énfasis en los hombros, sigue la estela de la propia monarca en cuanto a sencillez se refiere.

Carlota vs Charlene: histórica enemistad 

La relación entre Carolina de Mónaco y princesa consorte, Charlene, ha sido objeto de estudio y cotilleos durante años, y es que se dice que la rivalidad entre ambas y la tensión en Palacio se vive desde el mismo día de la boda con el Príncipe Alberto II en 2011. Aunque ellas no han comunicado nada oficialmente, sí se conocen algunas de las razones de por qué podrían llevarse regular que la prensa monegasca ha ido explicando a lo largo de los años. 

Comentan que la llegada de Charlene al principado desplazó en atención a Carolina de Mónaco, y esta no llevó bien lo de pasar a segundo plano en interés mediático e institucional. Además, parece que las personalidades de cada una de las royal son muy diferentes y personalmente chocarán. Mientras Carolina es muy desenfadada y activa socialmente, Charlene es bastante seria y reservada. Esta forma de ser tan diferente entre la royal y la ex nadadora haría imposible poder mantener una amistad dentro de los muros de Palacio. 

La verdadera naturaleza de la relación entre Carolina y Charlene sigue siendo un misterio que pasará a formar parte de los grandes enigmas de las casas reales europeas. Aunque parece ser que con el tiempo han aprendido a entenderse y ha podido producirse un “posible acercamiento” entre ambas puesto que han aparecido juntas en más eventos públicos, como por ejemplo la aparición de nuevo de Charlene en el icónico Baile de la Rosa en Mónaco, o la presencia de ambas esta semana en París, e incluso se han mostrado apoyo mutuo en momentos difíciles. Solo el tiempo dirá si su relación se fortalece en el futuro.