Alec Baldwin lleva 40 años limpio: así combate el actor sus adicciones
Aunque sigue viviendo con la tentación permanente, Baldwin asegura que gracias a la meditación ha podido superar su adicción a las drogas y el alcohol.
El famoso actor Alec Baldwin, de 66 años, se ha abierto en canal compartiendo con todos sus seguidores la lucha que lleva librando durante 40 años contra las adicciones. A principios de los 80, Baldwin abandonó Nueva York para mudarse a Los Ángeles con el fin de avanzar en su carrera cinematográfica. Este cambio en su vida supuso su descenso a los infiernos, enganchándose a las drogas y excediéndose con el alcohol.
"Solo menciono esto de vez en cuando, cuando realmente tiene un propósito. He estado sobrio durante 39 años. Lo dejé todo el 23 de febrero de 1985", comentó el intérprete durante su visita al podcast americano Our Way. Más sincero que nunca, Baldwin confesó que, aunque su coqueteo con las drogas fue breve, la experiencia fue extremadamente intensa: "Fue un problema diario durante dos años", reveló antes de explicar la gravedad de su situación con estas palabras: "Creo que me metí una raya que iría desde aquí hasta Saturno. Luego me haría otra en Saturno y otra de vuelta a casa. Quiero decir, la cocaína en aquellos años era como el café: todo el mundo lo hacía todo el día
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Cuando Alec Baldwin logró superar su adicción a la cocaína, su consumo de alcohol aumentó considerablemente. "Cuando dejé las drogas, empecé a beber alcohol, que es lo que comúnmente se dice que ocurre. Y eso fue precisamente lo que pasó. Simplemente comencé a beber más", explicó el actor, quien se siente muy orgulloso de haber superado esta difícil etapa en su vida.
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Aunque se niega a volver a caer y vive centrado en su trabajo y su familia, Baldwin admite que, ocasionalmente, siente el deseo de beber: "No extraño las drogas en lo absoluto, pero sí extraño beber. Me gustaba beber". ¿El truco para evitar caer en la tentación? El protagonista de La sombra asegura que, gracias a la meditación consigue frenar sus impulsos.
Claro que, también afirma que, con siete hijos pequeños en casa, es muy complicado encontrar momentos de paz: "Es como intentar jugar al ping pong en la cubierta de un portaaviones". Recordamos que, Alec no ha sido el único miembro de su familia que ha tenido problemas con las adicciones. Sus hermanos, Daniel, William y Stephen, también ha tenido problemas de este tipo que han logrado superar gracias al apoyo familiar.