Impresiones con Gray Zone Warfare: ¿Ha creado Madfinger la próxima fiebre de los videojuegos?

Habitualmente, no soy el tipo que busca una simulación militar hardcore, salvaje y con un toque sadomasoquista del estilo de ARMA, Escape from Tarkov y, sí, ahora también Gray Zone Warfare. No obstante, también me ha fascinado esta cultura viral de la industria del videojuego, en la que millones de personas, especialmente gracias a las redes sociales, deciden promocionar determinados juegos y transformarlos en éxitos multimillonarios de la noche a la mañana.

Simplemente piensa en los juegos del último año como Manor Lords, Palworld, Helldivers II, Lethal Company... La mayoría aparecen de la nada y crecen tan increíble e infinitamente rápido. Y yo ya era consciente de que Gray Zone Warfare podría ser un serio candidato para el próximo éxito viral, así que me senté para el lanzamiento en un escritorio aquí en la oficina y estuve en primera fila cuando finalmente se lanzó.

Entonces, ¿qué es Grey Gray Zone Warfare? Bueno, es un FPS cooperativo de extracción militar muy serio en el que te encuentras en un mundo grande y persistente, donde participas en combates PvE y en ocasiones PvP contra otros equipos cooperativos. Si digo «serio» es porque no hay marcadores de impacto, ni elementos de la interfaz de usuario que separen a tus compañeros de los enemigos de la IA, y si te disparan no tardarás en morir.

Existen tres facciones, si eliges formar parte de una de ellas, automáticamente te aliarás con jugadores de la misma facción y lucharás contra jugadores de las otras dos. Al completar tareas bastante simples en el juego, consigues botín nuevo, pero también puedes encontrarlo de forma más dinámica buscando en las aldeas, o puedes conseguirlo de los jugadores enemigos a los que hayas matado.

Hay una cantidad de espacios de equipo, armas y mods para esas armas, que se mejoran recogiendo nuevo botín o mejorando el que ya tienes en tu base al hacer misiones. ¿Y qué pasa si mueres? Sí, pierdes todo lo que tienes. Bueno, casi todo, porque tienes una pequeña caja fuerte donde puedes guardar los objetos que quieras usar más tarde. Pero por lo demás, es bastante hardcore, sobre todo para alguien que no se maneje con frecuencia en este género.

¿Y se sostiene bien? Bueno, hasta cierto punto sí. Los servidores han sido bastante inestables desde el principio y, no solo eso, también ha habido muchos problemas de optimización que han perjudicado a los jugadores de PC, lo que ha provocado que las críticas de Steam sean relativamente negativas. Sin embargo, el desarrollador parece haber introducido ya algunos parches, y como la máquina del trabajo cuenta con un i9-13900K y una RTX 4090, yo, como es lógico, no experimenté ningún problema importante.

Pero es intenso, hasta atemorizante, aterrizar con tu equipo y moverte de forma totalmente sistemática en una formación precisa hacia tu enemigo mientras te centras en los movimientos y sonidos que hay a tu alrededor. Sí, el único mapa es muy bonito, pero también se vuelve rápidamente monótono, ya que no hay una gran variedad, pero sí está bastante detallado.

La sensación al moverte y disparar es cómoda. Todavía le queda mucho trabajo por hacer al desarrollador en lo que respecta a la creación de armas que suenen del todo satisfactorias. Asimismo, gran parte de la diversión sigue proviniendo de la comunicación directa con tus compañeros y de la toma de decisiones tácticas que rinden sus frutos. Nos abrimos paso por un pequeño pueblo lleno de enemigos de la IA, solo para acabar en una emboscada hostil de otro equipo, que finalmente superamos en apenas 30 minutos. Fue intenso, cada disparo era decisivo, y jugar así al gato y al ratón fue muy... digamos, molón.

Sin embargo, no todos los aspectos están bien elaborados, y a veces da la impresión de que el estudio Madfinger se limita a proporcionar una dinámica de juego básica, pero le falta un poco de variedad en momentos. Por ejemplo, hay una excesiva cantidad de tiempo de transporte, hay demasiado poco dinamismo en el mundo del juego, a pesar de que es precioso estéticamente, y algunas misiones son simplemente demasiado largas para ser completadas de golpe.

Pero la verdad es que Madfinger está bien encaminado, sobre todo si este mundo se expande con la inclusión de la IA, diversos tipos de enemigos y algo más de dinamismo en el sonido y los gráficos. Los combates contra otros jugadores ya funcionan de maravilla, es la estructura en torno a estos tiroteos lo que hay que retocar.

No he jugado lo suficiente para evaluar realmente el potencial del juego, y aún necesita más optimizaciones y ajustes antes de funcionar a la perfección, pero es posible que Madfinger tenga algo entre manos, y es incluso evidente para mí.