GHANDI Y SU FILOSOFÍA DE VIDA - Joya Life

La cultura de la no violencia hacia otros seres vivos es una de los virtudes del pensamiento hinduista. El país asiático con una religión monoteísta, profesa la paz y el respeto mutuo desde hace siglos según su peregrinación. Uno de los más fervientes promotores de este estadio de conciencia es Mahatma Ghandi, una filosofía de vida asumida por el conocimiento interior.

Aunque pudiésemos sintetizar que nació en India el 2 de octubre de 1869, Mohandas Karamchand Gandhi (su nombre de pila), vio la luz en Porbandar, una pequeña ciudad costera ubicada en el estado de Guyarat en la actualidad; que en su momento pertenecía al Raj británico que dominó el territorio entre 1858 y 1947.

Durante la niñez su progenitora, Putlibai Gandhi, fue de vital importancia en la formación espiritual de Mahatma, -que al traducido al castellano significa “Gran Alma”– en crearle conciencia por el respeto por todos los seres vivos, los beneficios y virtudes que se obtiene al convertirse en vegetariano, y lo elevado que se puede ser al tolerar las diversas formas de pensar, sin importar el credo o la religión que se profese.

Perteneciente a una familia humilde, de su padre, Karamchand Gandhi, quien logró la primera magistratura de la ciudad, heredó su lado político al recibirse de abogado en la University College de Londres, Inglaterra, país al que consideraba como “cuna de filósofos y poetas, el centro de la civilización”.

Su pensamiento ocupó finales del siglo XIX y la mitad del XX hasta la fecha de su muerte el 30 de enero de 1948, cuando fue asesinado por el fanático ultra-derechista hindú relacionado con el gobierno, Nathuram Godse, quien encontró en el líder pacifista un obstáculo para el alzamiento del hinduismo en contra del resto de las demás creencias y religiones.

Su vida estuvo plagada de retos intelectuales pero sobretodo espirituales. Luego de su regreso de Londres con su título en mano, intentó litigar pero la inexperiencia y la corta edad poco lo fue permitido realizar. Meses más tarde llegaría una oferta laboral en Sudáfrica que le permitió no solo trabajar, sino palpar en primera persona el rechazo y el odio que los ingleses tenían contra su comunidad y cultura

Por esta razón, en 1894 creó un partido político de tradición india que defendiera sus derechos y la de sus connacionales que vivían en el sur de continente africano bajo el dominio inglés. De esta manera, logró una reivindicación británica tras 22 años de protestas no violentas.

El respeto ganado por el líder indio durante más de dos décadas, lo fortaleció y le permitió negociar con el general sudafricano nacido en Colonia del Cabo, perteneciente a la corona inglesa, Jan Christian Smuts, una solución para el conflicto.

A su regreso a su natal India bajo dominio británico en 1915, el conocimiento adquirido en el continente negro fue empleado para promulgar los valores filosóficos, religiosos y políticos, con la finalidad de lograr la liberación de su nación de forma pacífica, propósito que obtuvo a través de métodos no violentos el 15 de agosto de 1947.

ALFA