Batoni, Pompeo Girolamo - Museo Nacional del Prado
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Batoni, Pompeo Girolamo

Francis Basset, primer barón de Dunstanville

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Batoni, Pompeo Girolamo

A. R.

(Lucca, 1708-Roma, 1787). Pintor italiano. Se formó con su padre, Paulino, dorador de oficio. El grabado sobre metal precioso determinó la afinidad de Batoni con la precisión y la delicadeza, aspectos estilísticos decisivos para su obra posterior como pintor. Completó su formación en Roma, adonde viajó en 1727, y entró en la Academia del Desnudo de Sebastiano Conca. Aprovechó para dibujar modelos al natural y las esculturas clásicas de las colecciones del Vaticano y estudiar la pintura de los maestros de tradición clasicista, como Rafael Sanzio, Annibale Carracci, Guido Reni, Carlo Maratta y Domenichino, lo que deja una innegable huella en sus conceptos pictóricos. En la primera etapa de su vida profesional, Batoni se ganó el sustento vendiendo sus dibujos de reproducciones de esculturas clásicas y, al parecer, también decorando abanicos. En la década de 1730 consiguió reputación por su pintura de historia, de asuntos religiosos y mitológicos. Sus retablos y sus lienzos parten de los principios estéticos del seicento, creando escenas teatrales, cargadas de gestos y expresiones emotivas, tal como demuestra el Éxtasis de santa Catalina de Siena, encargado por el papa Benedicto XIV en 1743 (Museo Nazionale de Villa Guinigi, Lucca), o la Caída de Simón Magnus, encargado en 1746 para decorar San Pedro y entregado en 1755. Había trabajado casi diez años para el gran ­retablo, considerado el hito de su producción como pintor de historia, pero la obra fue rechazada y desplazada a Santa María de los Ángeles. Se centró a partir de este fracaso en su especialidad más reconocida: los retratos de viajeros en Italia, turistas del llamado grand tour, que eran en su mayoría de nacionalidad británica o irlandesa. Batoni recurre a la tradición del retrato-viajero, desarrollado ya por Francesco Trevisani, y lo traduce a su propio lenguaje pictórico. De dibujo preciso, la técnica de Batoni acusa un acabado pulido, donde trata con minuciosidad los detalles y los aviva con tonalidades alegres. Dispone a sus clientes siempre de manera parecida, lo que provoca una cierta monotonía en los retratados. El personaje aparece de pie o sentado ante un paisaje abierto, en un estudio, o ante una arquitectura emblemática, pero siempre rodeado de estatuas clásicas y otros vestigios de la Antigüedad que dejan constancia sobre el viaje y los lugares visitados. Los retratos realizados a partir de la década de 1750 parecen reflejar ciertos convencionalismos con respecto a las poses, los gestos y las modas. Proceden del retrato tradicional inglés y de los conceptos de Anton van Dyck, cuya obra pudo haber consultado Batoni a través de grabados. El artista utilizaba siempre lienzos de formato estandarizado y trabajaba -al contrario que en sus composiciones, de preparación dibujística más compleja- directamente sobre las telas preparadas con imprimación rosa-rojiza. Fijaba en dos o tres sesiones los rasgos más característicos de sus modelos y concluía la efigie después de la partida del cliente. Realizó también retratos de mujeres, en donde recurría a modelos y motivos alegóricos de la pintura francesa contemporánea, a las que caracterizaban a menudo como diosas y musas mitológicas. Batoni ocupó también importantes cargos en la vida docente de la ciudad: en 1741 fue admitido como miembro de la Academia de San Lucas, institución en la que fue director de extranjeros, responsable de los pintores venidos de fuera de Roma y de los Estados del Vaticano, y dirigió la sección de la Academia Capitolina del Desnudo.

Obras

Bibliografía

  • El Westmorland: recuerdos del grand tour, cat. exp., Sevilla, Fundación El Monte, 2002, pp. 300-301.
  • Pompeo Batoni and his British Patrons, cat. exp., Londres, The Greater London Council, 1982.
  • Borelli, Ernesto (ed.), Pompeo Batoni, 1708-1787, cat. exp., Lucca, Palazzo Ducale, Ugo Bozzi, 1967.
  • Clark, Anthony M., Pompeo Batoni: A Complete Catalogue of his Works with an Introductory Text, Oxford, Phaidon Press, 1985.
  • Macandrew, Hugh, «A Group of Batoni ­Drawings at Eton College, and Some Eigh­teenth-Century Italian Copyists of Classical Sculptures», Master Drawings, vol. xvi, Nueva York, 1978, pp. 131-150.
  • Mena Marqués, Manuela B., «Dibujos de Pompeo Batoni en el Museo del Prado», Boletín del Museo del Prado, vol. iv, n.º 11, Madrid, 1983, pp. 156-161.
  • Steegman, John, «Some English Portraits by Pompeo Batoni», The Burlington Magazine, vol. LXXXVI, Londres, 1946, pp. 55-63.
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