Cuando una película se convierte en un gran éxito, sobre todo, si nos la han traído los estudios de Hollywood, es fácil que sus productores se planteen desarrollar una secuela. No por nada tenemos Top Gun: Maverick, la continuación tardía dirigida por Joseph Kosinski (2022) del incomprensible clásico ochentero firmado por el difunto Tony Scott (1986). Su estreno ha logrado superar las marcas anteriores de los filmes protagonizados por Tom Cruise, conque otra entrega es muy probable.

La obra original obtuvo 357 millones de dólares, pero su taquilla no fue especial comparada con la de otras, al margen de que multiplicó por veintitrés y pico su presupuesto de quince millones. Y solo obtuvo un Oscar de las cuatro categorías a las que optaba, que incluyen el montaje de Billy Weber y Chris Lebenzon: el de mejor canción por “Take My Breath Away”, de Giorgio Moroder y Tom Whitlock. Pero, por alguna causa oscura, se quedó en nuestro imaginario colectivo.

Top Gun: Maverick, en cambio, es el segundo largometraje con mayor recaudación en un fin de semana para la distribuidora de Paramount en su territorio tras Iron Man 2 (2010), y ha pulverizado los números de otros con Tom Cruise por los 260 millones de dólares que ha ganado en esos mismos días. Y, por si esto fuera poco, la crítica internacional la elogia con un noventa y siete por ciento de aceptación según Rotten Tomatoes. El otro filme solo pudo alcanzar un cincuenta y siete.

Jerry Bruckheimer no descarta que la historia continúe tras ‘Top Gun: Maverick’

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Sin embargo, hay titulares que se enfocan en que la secuela de Top Gun: Ídolos del aire ha logrado sobrepasar en billetes con el rostro de George Washington a Piratas del Caribe: En el fin del mundo (2007), también con la financiación de Jerry Bruckheimer, el fin de semana del Día de los Caídos estadounidense. Y no hay que extrañarse de que, como informa Deadline, el productor no quiera descartar una tercera parte y se limite a decir que, por lo pronto, “montemos esta ola”.

“Hacemos películas para todos los públicos”, dice para explicar que la nueva aventura del Pete Mitchell de Tom Cruise, para la que no había ideas al principio, arrase en multitud de países. Top Gun: Maverick “es para todos. Se trata de la historia, los personajes y el viaje que hacemos”. Y “no importa dónde veas esta película. La ves en salas abarrotadas”. Porque “Top Gun y Piratas del Caribe te alejan de donde sea que estés en tu vida”, así que “la gente está muy feliz saliendo del cine”.

Tom Cruise solo volvería a ser Pete Mitchell si la historia se supera a sí misma

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O eso afirma Glen Powell, al que hemos visto antes en la piel del real John Glenn, otro aviador y astronauta, en Figuras ocultas (2016) y que interpreta aquí a Jake Seresin o Hangman, un personaje con un rol semejante al del Tom Kazansky o Iceman de Val Kilmer porque compite con el Bradley Bradshaw o Rooster de Miles Teller. En una entrevista para IndieWire, ha declarado que Tom Cruise solo estaría dispuesto a seguir en otra entrega sobre estos intrépidos pilotos “si pueden superar” las otras.

“No hay razón para simplemente agregar otra película a la filmografía del mundo si no contribuye o supera a la original”, asegura. “Entonces, ¿habrá un Top Gun 3?”. Y se responde a sí mismo: “Si podemos descubrir más cosas locas que hacer con aviones o una historia que sea convincente, emotiva, aventurera, romántica y todas esas cosas, estoy seguro de que Tom [Cruise] estaría de acuerdo. Pero eso está por encima de mi nivel salarial. ¡Tal vez puedas proponérselo cuando hables con él!”

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