Sucker Punch

Durante los años 50, una joven que acaba de perder a su madre sufre el odio de su malvado padrastro. Desquiciado por haber perdido una herencia, se las ingenia para encerrar a la chica en un manicomio donde le practicarán una lobotomía. Durante los tres días de que dispone, la joven imagina una realidad alternativa para salvarse.

Un ruidoso y espectacular cóctel que combina acción, fantasía y jóvenes atractivas. Zack Snyder, que ya ha destacado en otras ocasiones por el impactante estilo visual de "300" o "Watchmen", vuele a centrar sus esfuerzos en conseguir un envoltorio deslumbrante. Y lo logra con una estética oscura e irreal cargada de ralentizaciones, aceleraciones y música a todo volumen. Sin embargo, tras tanta pirotecnia, la prensa especializada echó en falta un contenido más elaborado y menos aburrido, por lo que las malas críticas de "Sucker Punch" acabaron por dañar la imagen del filme.

El reparto -que inicialmente iba a encabezar Amanda Seyfried ("Mamma mia!"), pero que finalmente recayó en Emily Browning ("Presencias extrañas")- sufrió un duro entrenamiento previo al rodaje. De hecho, las actrices se vieron obligadas a levantar pesos de hasta 100 kilos.