Las 30 mejores películas sobre inteligencia emocional

Sin duda alguna, las películas son un gran canal para comunicar infinidad de ideas y valores. En la educación son un excelente recurso que podemos explotar para transmitir de una manera atractiva aquello que queremos que quede como experiencia significativa. En este caso analizaremos las películas que ayudan en la tarea de forjar la inteligencia emocional.

¿Qué tal cuando nuestros hijos o alumnos nos hacen alguna pregunta personal que nos incomoda? Pensamos: “¡Trágame tierra!”

Este escenario, el de no saber cómo o qué contestarles a nuestros pequeños o jóvenes, es relativamente frecuente: nuestras generaciones no fueron educadas para hablar con soltura de nuestras emociones. Sin embargo, las emociones pueden determinar el éxito y el sano desarrollo de una persona.

La inteligencia emocional es aquella capacidad que tenemos todos de conocernos, entender nuestros sentimientos y tomar las mejores decisiones, es una destreza interna que nos ayuda a manejar las emociones tanto negativas como positivas en pro de un objetivo o de la solución de un problema. La inteligencia emocional es el motor interno que nos obliga a actuar, es la capacidad de leer en el ambiente los estímulos o informaciones que no son tan aparentes y que nos generan una reacción interna: un sentimiento.

Hacer caso de esos sentimientos, actuar en consecuencia (con beneficio para nosotros y/o los demás) es lo que constituye la inteligencia emocional. Todos contamos con esta habilidad, que en unos se encuentra más potencializada que otros.

Según el especialista Daniel Goleman, la inteligencia emocional consta de cinco elementos:

• Autoconsciencia: conocerse a sí mismo y las propias fortalezas y debilidades.
• Autorregulación, autocontrol: la capacidad de vencer los primeros impulsos.
• Motivación: no perder los objetivos, tener voluntad de logro.
• Empatía: entender y respetar al prójimo, validar o comprender al otro.
• Habilidades sociales, que son necesarias para entender el entorno.

En este artículo te proponemos una serie de películas que pueden ayudarte a iniciar una conversación con los niños o jóvenes para abordar un tema que pueda ser difícil, o bien, como catarsis familiar ante una situación determinada que estén viviendo, y así iniciar este camino de potencializar la inteligencia emocional.

Coco (2017)

Esta cinta nos muestra cómo la conexión con nuestros ancestros puede forjar nuestra personalidad y motivarnos a engrandecer su legado, a hacer algo extraordinario por nosotros mismos. Miguel entabla una relación con su bisabuela y aprende a valorar la riqueza que nos presentan no solo nuestros antepasados sino cualquier persona, siempre que nos atrevamos a conocerlos en verdad. Es una película que puede ser estudiada para el tema del perdón y las reconciliaciones en las relaciones humanas, elementos indispensables de las habilidades sociales.

El viaje de Chihiro (2001)

Esta película está llena de significado sobre la fortaleza que existe en nosotros, sobre el descubrirse a uno mismo y, de pasada, sobre el valor del trabajo duro y el esfuerzo. Chihiro pierde a sus padres, la fuente misma de nuestro autoconcepto. Este hecho la conduce a una serie de experiencias que la fortalecen y le otorgan individualidad. La película está llena de simbolismos dignos de análisis. Es muy significativa la escena en la que un cliente (el río) llega verdaderamente sucio, y entre todos los empleados del spa lo asean: hay que limpiarnos de todo lo que no necesitamos y que nos genera una carga innecesaria en el alma. Esta metáfora ayuda a trabajar la empatía y el establecimiento de límites.

Up: una aventura de altura (2009)

Up nos trae un mensaje sobre la perseverancia, sobre encontrar motivación y ganas de vivir. Carl es una persona que ha bloqueado sus emociones con respecto a la muerte de su esposa. A través de su viaje descubre que hay muchas más cosas por las cuales vivir y tener nuevas metas, nuevos objetivos que plantearse. Es así que su corazón se encuentra dispuesto para construir una relación con el pequeño Russell. La reflexión de Up es que cuando algunos sueños se terminan –o se cumplen–, podemos trazarnos nuevos horizontes. La cinta resulta ideal para trabajar la automotivación.

6 grandes héroes (2014)

Tadashi es un niño con mucho talento desperdiciado. Una vez que logra interesarse y enfocarse en algo productivo, sufre una grave pérdida que lo sumerge en una profunda desesperanza. A través de sus amigos y de querer materializar los sueños de su hermano, le encuentra sentido a su vida, consigue darle la vuelta a la tristeza y encaminarse hacia sus propios talentos y objetivos.

Esta es una excelente opción para trabajar las etapas del duelo y hacer reflexionar a los chicos sobre la forma en que Tadashi se recupera de esta prueba de la vida y se automotiva para continuar adelante.

Shrek (2001)

Un título algo raro para esta lista, ¿no? Sin embargo, consideramos que contiene un saludable mensaje de autoaceptación y autoconsciencia. En esta cinta vemos cómo Shrek va despojándose de aquellas etiquetas que la comunidad le ha dado y que él asumió sin cuestionamientos. Es un viaje de descubrimiento personal. Vale la pena rescatar los elementos clave que se van forjando en la amistad entre Burro y Shrek. Además de situaciones divertidas, podemos ser testigos de la lealtad, la confianza y el cariño fiel entre los protagonistas.

Frozen: una aventura congelada (2013)

Esta película es la primera en la larga lista de cintas de Disney que hace una referencia clara al amor fraternal. El cariño y apoyo incondicional de Elsa y Anna están presentes en todo momento, y cada una de las hermanas vive su propio aprendizaje: Elsa el autodescubrimiento y aceptación de ella misma con todas sus potencialidades; Anna, la paciencia, no ceder ante sus primeros impulsos, ganar autocontrol. Nos encanta la idea de que no hay que esperar a que el Príncipe Azul llegue a rescatarnos, pues en cada una de nosotras hay valor y fortaleza para afrontar nuestros miedos.

Buscando a Nemo (2003)

Una divertidísima película con muchos mensajes para reflexionar. El primero es el manejo que, como sociedad, damos a la discapacidad. Al inicio de la película, Marlin es un padre sobreprotector que no le brinda herramientas a Nemo para salir adelante. Conforme Marlin vive su aventura, va abriendo su mente para darse cuenta de que Nemo es perfectamente capaz de valerse por sí mismo, y que el verdadero cariño de padre consiste en prepararlos para el mundo, para la independencia.

Además de lo anterior, es digno de mencionar la habilidad social de aceptar ayuda, como escribió el poeta inglés John Donne: “Ningún hombre es una isla entera por sí mismo”. Los seres humanos nos necesitamos unos a otros, por lo que es fundamental aceptar cuando uno necesita ayuda y saber pedirla. Es el caso de Marlin y Dory, quienes crean una entrañable amistad. ¿Qué tal te parece volver a ver Buscando a Nemo bajo estas consideraciones?

Valiente (2012)

Esta película es una de las puntas de lanza del empoderamiento femenino. Mérida es una heroína adolescente y rebelde que lucha contra lo establecido por su madre. A lo largo de la historia va descubriendo quién es su madre como persona, la entiende y está dispuesta a reparar su relación. Este largometraje es ideal para resaltar el valor del arrepentimiento, de la reparación en las relaciones humanas y el poder del perdón, todos ellos elementos indispensables de las habilidades sociales de la inteligencia emocional.

Los Increíbles (2004)

Una película sobre la resonancia de la familia: cómo en un núcleo familiar se dan tantas oportunidades de desarrollar grandes habilidades y valores perdurables para la vida. Los Increíbles nos deja ver que todas las familias tienen sus particularidades y que esa originalidad es perfecta.

Vemos al Sr. Increíble dejar de lado el egoísmo del triunfo personal en pos de los suyos, o a la Sra. Increíble dispuesta a todo en virtud de la unidad familiar. También tenemos a Violeta viviendo un descubrimiento personal, forjando su autoconcepto, y a Dash ganando autorregulación y aprendiendo del trabajo en equipo. Un sinfín de oportunidades educativas en una sola cinta. Es genial, ¿no?

Cómo entrenar a tu dragón (2010)

En esta historia, nuestro héroe Hipo muestra un liderazgo transformacional: le da la vuelta a la forma de actuar y pensar de toda una comunidad. Una hazaña en verdad magnífica. ¿Cómo lo logra? Con una buena dosis de compasión, de estudio, de dedicación y de convicción férrea para defender sus ideales, aunque ello le represente retar a su padre. Se trata de un gran ejemplo de motivación, de inclusión y de amistad.

Un monstruo viene a verme (2016)

Adaptación cinematográfica del libro del mismo nombre por Patrick Ness. Se trata de una excelente opción para trabajar el tema de la muerte. Conor enfrenta la grave enfermedad y el inminente deceso de su madre. A través de la fantasía, Conor enfrenta su verdad más fundamental. Y solo cuando acepta su realidad, sus miedos más profundos, puede iniciar su camino de sanación.

En esta trágica historia, Conor debe aprender a convivir con su abuela, a conocerla y a respetarla. Ella, por su parte, en un gran ejercicio de empatía, también aprende a relacionarse con su nieto en el marco de unas tristes circunstancias. Un monstruo viene a verme nos otorga un sinfín de oportunidades para reflexionar en torno a las habilidades sociales.

Extraordinario (2017)

Extraordinario nos narra la historia de un chico con un aspecto poco convencional que aprende sobre la amistad y la unión familiar a través de su ingreso a la escuela. Auggie enfrenta la dura realidad del bullying escolar debido a su semblante. Pero aprende a mostrarse como es en realidad y, al ser genuino, logra amistarse con varios compañeros. Es un gran mensaje de empatía e inclusión.

Con Auggie aprendemos que todos somos importantes y que nuestros problemas no nos vuelven extraordinarios, que el mundo no gira en torno a nosotros mismos. Te invitamos a que disfruten esta película y a que hagan un análisis de cada uno de los personajes, ya que es verdaderamente valiosa para contrarrestar el abuso escolar.

Más extraño que la ficción (2006)

Harold es un hombre aburrido y monótono que tiene el acierto de saberse autodescubrir. En su camino se topa con varios sucesos que lo confrontan con su actuar, por lo que debe decidir qué rumbo tomar para su última transformación. Resulta fascinante ver cómo el protagonista muestra sus miedos y se abre a tomar riesgos, a probar cosas nuevas, cosas que –en definitiva– le resultan atractivas y que, por eso mismo, lo hacen ser más feliz. Es una excelente opción para trabajar el autoconcepto.

Steve Jobs (2015)

Biopic de la impresionante vida del genial Steve Jobs, que nos presenta su trayectoria, la visión en torno a su compañía, y sus errores. Es cautivante observar la dualidad de Jobs en esta cinta: por el lado personal vemos el conflicto que le supone la aceptación de su paternidad; y a nivel profesional, la pasión de ver consumada su visión. Estas dos realidades convergen en una escena final, cuando Jobs finalmente reconcilia su pasado con sus emociones, acepta su necesidad de control y está dispuesto a reparar la relación con su hija mayor.

Misión rescate (2015)

Esta es una magnífica historia sobre la supervivencia humana y la esperanza. Mark es un científico que se ve obligado a vivir absolutamente solo en otro planeta. Aunque pudiera tener todas las razones para darse por vencido, no lo hace. En una lucha contra el tiempo, Mark reta su intelecto y sus capacidades físicas al extremo para conseguir lo inimaginable. Gracias a un ánimo férreo y a una motivación sin frenos, Mark trabaja incansablemente para regresar a casa. El buen humor nunca se aleja de su lado, lo cual resulta en verdad heroico. El mensaje más sobresaliente de esta película es resistir ante la adversidad sin rendirse.

Juno (2007)

Juno trata una temática fuerte: el embarazo en la adolescencia. Es una gran oportunidad para iniciar una conversación sobre el tema y ampliar la comunicación con los jóvenes. Juno es una chica sarcástica pero sensible que aprende sobre sí misma y sobre las relaciones humanas. Aunque no es el ejemplo más claro de la prudencia ni de la toma de decisiones inteligentes, da muestras de aceptar su realidad, con sus consecuencias, y de aprender a escuchar a los demás para, entonces sí, hacer una toma de decisiones basada en la sensatez y el bienestar. Este filme, en nuestra opinión, debe ser visto acompañando a nuestros adolescentes para comentar sobre las relaciones de pareja y la toma de decisiones a este respecto.

Kubo y la búsqueda samurai (2016)

Kubo es un niño poco convencional: vive en una cueva con su madre, que está casi catatónica, a la que cuida con mucho amor. Nuestro héroe hace origami y tiene el poder mágico de lograr que las figuritas de papel cobren vida cuando toca su shamisen, un instrumento de cuerdas. Kubo se pone en camino para encontrar la armadura y la espada de su padre. Durante la travesía aprende que los objetos externos no son los únicos que nos pueden dar fuerza, sino también nuestra tradición y el amor de nuestra familia. Pero el abuelo quiere arrebatarle su humanidad y sus emociones. Precisamente con esto mismo –representado por las cuerdas que obtiene de sus padres, no de las armas fabulosas que encuentra– logra vencer a su abuelo y, haciendo un uso impresionante de la empatía, se hace cargo también de él y lo cuida.

Whiplash: música y obsesión (2014)

Whiplash es un largometraje extraordinario con actuaciones impactantes. Ofrece la oportunidad de analizar la búsqueda de la perfección, la determinación y de cuestionarnos hasta dónde nuestras acciones son éticamente correctas cuando se actúa empujados por el deseo de alcanzar la grandeza.

Andrew, un músico talentoso, es dirigido por su genial maestro, el Sr. Fletcher, quien alude a prácticas docentes poco convencionales para sacar lo mejor de sus alumnos. Andrew, en su obsesión de buscar la aprobación de su profesor, vive un tormento emocional al borde de una crisis seria. Pero logra recomponerse para mostrarse a sí mismo y al Sr. Fletcher su valía. En nuestra lista, esta cinta representa el antiejemplo del autocontrol y la carencia de empatía en ambos personajes. Whiplash es una película que no se pueden perder dado su invaluable potencial de análisis.

El niño con la pijama de rayas (2008)

Esta es una película dura en verdad. Es ideal acompañar a los jóvenes al verla para orientarlos sobre la historia del Holocausto y para desarrollar una reflexión seria sobre la vida, la trascendencia de la guerra y su impacto a largo plazo.

Bruno, que no entiende lo que sucede, entabla amistad con Shmuel, encerrado en un campo de concentración. Gracias a esta amistad, Bruno aprende sobre la traición y el perdón.

Aunque la trama nos envuelve en las terribles realidades de un campo de concentración, es entrañable el atisbo de luz que se aprecia en la construcción de amistad de nuestros dos personajes principales. Hasta en las peores circunstancias el ser humano es capaz de aprender y de relacionarse de manera positiva con los demás: es algo inherente a nuestra naturaleza y que no debemos perder conforme pasan los años y nos volvemos adultos.

El código Enigma (2014)

Esta es la película biográfica del científico inglés Alan Turing. La historia muestra la determinación de un equipo por lograr su objetivo: descifrar el código para traducir los mensajes encriptados de la Alemania nazi. Destacamos la persistencia de Turing, su capacidad de entender y sacar provecho de las fortalezas de cada uno de los miembros de su equipo sin importar su género. La película gana valor una vez que la analizamos bajo la lupa de la década en la que se dieron los sucesos (los años cuarenta), en donde la apertura hacia la inclusión femenina no era lo reglamentario y cuando ser homosexual era inadmisible. El filme es una estupenda oportunidad para trabajar la empatía y la motivación.

Y, por qué no, te sugerimos también algunos títulos que te acompañarán en el camino de educar: te darán ideas sobre cómo sensibilizar a los niños, cómo establecer comunicación con los adolescentes y cómo guiarlos para establecer relaciones sanas con los demás, perseguir sus metas y alcanzar sus objetivos.

Billy Elliot (2000)

Acompañamos a Billy en el descubrimiento de su verdadero talento: el baile. Algo poco convencional para un niño de clase trabajadora en un pueblo minero en los años ochenta. Aunque solo tiene 11 años, la búsqueda por perseguir su pasión es algo digno de admirar.

Billy Elliot es una lección sobre motivación interna, sobre ese impulso que nos orienta a perseguir nuestros objetivos a base de esfuerzo y trabajo duro. Otro personaje a analizar es el padre de Billy, Jackie, quien poco a poco va abriendo su mente hasta que consigue dejar de lado sus prejuicios para apoyar a su hijo. Jackie nos da una lección de empatía y amor incondicional.

Me llaman Radio (2003)

Radio es un muchacho con discapacidad cognitiva, miembro de una sociedad restrictiva y poco tolerante que, en vez de incluirlo, perpetúa su aislamiento. La actitud del coach, al hacerlo parte del equipo preparatoriano de futbol; al darle una tarea de apoyo en el entrenamiento, le otorga una oportunidad. El resultado: no solo se produce un cambio en Radio, sino en la comunidad entera.

Esta película es un claro ejemplo del amor a los demás, de empatía, respeto, tolerancia y aceptación a la diversidad. Un clásico para trabajar la inteligencia emocional desde el ángulo del desarrollo de habilidades sociales como la comprensión y compasión.

Quédate a mi lado (1998)

Quédate a mi lado nos presenta la historia de dos mujeres diametralmente opuestas a las que las circunstancias de la vida las obligan a entenderse y a reconocer –por el bien de dos niños– las características rescatables que tienen una y la otra.

Isabel, la fotógrafa despreocupada, joven, talentosa y dueña de su vida, tiene que aprender varias lecciones sobre el egoísmo y lo que significa convertirse en la madrastra de Anna y Ben. Por el otro lado, Jackie es una madre dedicada a sus hijos pero, aquejada por una enfermedad terminal, no solo tiene que lidiar con su dolor físico sino también con la gran pena que le causa saber que va a morir y que dejará a sus dos hijos a cargo de su padre y su nueva esposa.

Resulta bastante motivador ver a dos mujeres adultas despojarse de sus egos en pro de algo que las une: el cariño y el bienestar de los dos pequeños. En ningún lugar encontrarás un mejor ejemplo de amor filial.

En busca de la felicidad (2006)

Esta película trata una temática dura: las finanzas personales y familiares, una realidad lamentablemente cotidiana en nuestro país. Chris, con una determinación férrea y una fe inquebrantable, se levanta todos los días para procurar una vida más equilibrada para su hijo pequeño. Lo vemos pasar por las pruebas más difíciles, desde que su esposa lo deja hasta que se quedan sin un lugar dónde vivir.

Chris da una lección de confianza en sí mismo, de autodeterminación y encarna el autoconcepto saludable. En busca de la felicidad ofrece un gran mensaje de lucha por la sobrevivencia, el logro de objetivos y la perseverancia.

La vida es bella (1997)

El premio al mejor actor en la 71ª entrega del Oscar fue para Roberto Benigni, quien además fue el director y guionista de esta entrañable historia. El filme es un ejemplo de alegría por vivir, de resiliencia y de la abnegación de un padre por proteger emocionalmente a su hijo de los horrores de un campo de concentración. Guido Orefice, el padre, hace uso de toda su capacidad para generar un mundo fantasioso y proteger emocionalmente a su pequeño de lo que viven día a día. Le pinta un mundo divertido cuando la realidad es que un campo de concentración dista mucho de ser un lugar de entretenimiento.

Vale la pena reflexionar sobre las fortalezas de Guido, quien usa su ingenio y sentido del humor para sortear los obstáculos que se le presentan. La película es una gran herramienta para considerar habilidades sociales, tales como el valor y la perseverancia.

Mente indomable (1997)

Este largometraje nos ofrece la historia de un talentoso joven que necesita ayuda para encauzar su genialidad en algo productivo para su vida. Will, a través de la relación que mantiene con su psiquiatra, llega a la conclusión de que lo están frenando todas las barreras que él mismo se ha puesto con respecto a sus emociones. Aprende entonces a validar lo que siente, en lugar de ocultarlo, para descubrir que la felicidad no es un lugar al que se llega, sino una forma de vivir. Su apertura le permite disfrutar de su talento y del amor de pareja. El autodescubrimiento y la autoaceptación son los temas a descubrir en este filme.

A los trece (2003)

Una película que nos muestra la dura realidad de las drogas, su efecto en el comportamiento de los adolescentes y las secuelas de daño que dejan a su alrededor. En esta cinta podemos ver la lucha de una madre por entender a su hija, por apoyarla y mejorar su comunicación.

Este es otro antiejemplo en nuestra lista: el comportamiento autodestructivo que provoca el uso de las drogas. Vemos cómo una mala amistad provoca que Tracy se aliene de su madre y caiga en una espiral de acciones ilegales. Esta película nos muestra no solo que nuestros adolescentes necesitan amor, disciplina y límites, sino también la inagotable paciencia de la madre para comunicarse con ella y ayudarla.

Guerra de papás (2015)

Esta es una cinta mucho más ligera y divertida. Guerra de papás nos abre la puerta a una realidad de nuestros días: las familias se construyen de diferentes maneras. Ahí reside el mensaje de este largometraje, que nos habla de relaciones familiares, tolerancia e inclusión.

Si bien es cierto que se presentan los personajes de una forma estereotipada, vale la pena considerar la apertura y empatía que muestran Brad y Dusty al pasar el tiempo y convivir entre sí. La lección de inteligencia emocional que se puede trabajar en esta comedia es que todo es posible con buen ánimo y buena comunicación.

Conociendo a Ray (2015)

Este es otro filme con una temática actual: las personas transgénero. Conociendo a Ray nos muestra la vida de una chica que busca la transición de género: la batalla interna de sus padres y el camino de los vericuetos legales.

Maggie, su madre, se ve confrontada con sus acciones del pasado, de las que no está en absoluto orgullosa, y a través de mucha comunicación y ánimo de reconciliación logra perdonarse a sí misma. Solo así podrá apoyar a su hija. Esta confrontación de sí misma, de aceptar su toma de decisiones y su actuar, de responsabilizarse de sus actos y de afrontar sus consecuencias hasta el final es material para reflexionar y una lección para aprender.

Las ventajas de ser invisible (2012)

Charlie es un chico en extremo tímido que pasa por duras pruebas de la vida. La cinta nos hace entender la complejidad de la mente de los adolescentes, lo solitarios que pueden sentirse y las batallas internas que los atormentan. Esta película nos presenta un ejemplo de amistad real y sin condiciones. Sam y Patrick toman bajo su ala a Charlie, sin egoísmos ni banalidad, y lo aceptan en su totalidad, sin emitir juicios ni pedir explicaciones. A través de estos inesperados amigos, Charlie logra enfrentar sus demonios del pasado y salir adelante.

A todas luces, la inteligencia emocional es algo que vale la pena explorar como educadores. Se trata de una parte de nuestro intelecto que merece ser rescatada del olvido y tomada en cuenta para modelar y desarrollar mucho más en las aulas y en nuestras familias. Perdamos el miedo a educar este elemento medular de nuestras vidas. ¿Qué te parece nuestra selección cinematográfica? ¿Has visto alguna otra cinta que puedas sugerirnos? ¡Queremos escucharte!