Budd Dwyer, el político que se quitó la vida en televisión en vivo
Esta es la historia de Budd Dwyer, el político estadounidense que se suicidó en televisión tras ser señalado como corrupto.
22 de enero de 1987. Las televisoras locales de Filadelfia transmitían lo que a todas luces sería la última conferencia de prensa de Budd Dwyer como servidor público. El entonces tesorero de Pensilvania había sido acusado de diversos actos de corrupción y estaba a solo unas horas de enterarse de la condena judicial que enfrentaría. Sin embargo, Dwyer no estaba dispuesto a ir a la cárcel. De hecho, ni siquiera había considerado aceptar cualquier culpabilidad o renunciar voluntariamente a su cargo.
Christine Chubbuck, la historia de la presentadora de noticias que se suicidó en televisión
Tras ofrecer un discurso de más de media hora en el que defendía su inocencia y señalaba a un grupo de burócratas como los autores de su desgracia, Dwyer sacó un revólver Magnum calibre .357 de un sobre de papel manila. “Por favor, abandonen la habitación si esto les afecta”, dijo el político a los reporteros antes de llevar el arma a su cabeza y disparar. Inmediatamente, se hizo el silencio. El shock que inició en una de las salas del Capitolio Estatal de Pensilvania se extendió a miles de casas en el estado, pues el suicido del avergonzado tesorero había sido transmitido en vivo por televisión, sin ningún tipo de censura.
¿Quién fue Budd Dwyer?
Nacido el 21 de noviembre de 1939 en Misuri, Robert Dwyer mostró interés en la administración pública desde su juventud. Después de estudiar Ciencias Políticas y Educación, ‘Budd’ –como le decían sus amigos– se afilió al Partido Republicano. Bajo el cobijo de los elefantes, Dwyer fue electo en tres ocasiones a la Cámara de Representantes, se convirtió en Senador en dos ocasiones y fue nombrado Tesorero del estado de Pensilvania. Su éxito parecía imbatible.
También lee: Mr Cruel, el meticuloso abusador infantil australiano cuya identidad sigue siendo un misterio
Por desgracia, la buena suerte de Budd Dwyer terminó en 1986, cuando una investigación interna en el estado encontró que había recibido un soborno de $300 mil dólares para licitar un contrato de $4.6 millones a la empresa Computer Technology Associates. Según consta en documentos oficiales, la compañía se encargaría de hacer cálculos para indemnizar a cientos de empleados del estado que sobrepagaron millones de dólares en impuestos a principios de la década de los ochenta.
El expresidente Gerald Ford y Budd Dwyer / Wikimedia Commons
El expresidente Gerald Ford y Budd Dwyer / Wikimedia Commons
A Dwyer, señalado anónimamente, se le ofreció cumplir con una pena de 5 años de prisión con la condición de que tendría que admitir su culpabilidad y cooperar en la investigación que buscaba erradicar las actividades corruptas al interior de la oficina del gobernador. El político no aceptó el trato del procurador de distrito.
El político que se quitó la vida en televisión en vivo
La mañana del 22 de enero de 1987, Budd Dwyer ofreció una conferencia de prensa en donde muchos esperaban que renunciara a su cargo. Al día siguiente, la justicia se reuniría para dictar su futuro y era posible que el político enfrentara una pena de más de 50 años en prisión.
Te interesa: El misterio tras la muerte de Cleopatra, ¿suicidio o asesinato?
Pero Dwyer no renunciaría a su cargo. Tampoco confesaría su responsabilidad en ningún delito. Por el contrario, el hombre se defendería hasta el último segundo. “Ahora mi vida ha cambiado, sin razón aparente”, señaló en su largo discurso que era televisado en vivo por cadenas locales. “En esta nación, la más grande democracia del mundo, no hay nada que puedan hacer para prevenir que me castiguen por un crimen que no he cometido”.
El suicido de Budd Dwyer en la portada de The New York Times del 23 de enero de 1987 / Cortesía Times Machine
El suicido de Budd Dwyer en la portada de The New York Times del 23 de enero de 1987 / Cortesía Times Machine
Justo al llegar a la penúltima página de su discurso, Budd hizo una pausa. Llamó a tres de sus colaboradores más cercanos y les entregó a cada uno un sobre. Al terminar, sacó un arma. Los reporteros reaccionaron con sorpresa mientras el hombre les pedía abandonar la sala y no interferir con sus planes. “Retrocedan o esta cosa lastimará a alguien”, se le escuchó decir antes de llevar el arma a su paladar y disparar. Todo ante la mirada de miles de televidentes que veían horrorizados la pantalla chica.
Las repercusiones de un suicido en vivo
Mientras conductores de televisión se disculpaban con sus espectadores, una frenética multitud se reunía junto al cuerpo de Dwyer para intentar salvar su vida. Todo intento sería inútil; había muerto inmediatamente.
También lee: Qué fue el incidente Max Headroom y por qué causó tanta conmoción
Durante las siguientes horas se vivió un debate intenso sobre el reaccionar tardío de las televisoras. Como había caído una tormenta de nieve en el estado la noche anterior, las escuelas habían cerrado. Había niños y adolescentes viendo la televisión cuando el político se había suicidado. Si bien, algunas cadenas habían cortado la transmisión a tiempo, otras siguieron e incluso repitieron el momento en sus noticiarios nocturnos.
El suicidio de Budd Dwyer representó un momento oscuro para la televisión en vivo y marcó ciertos parámetros a seguir dentro de una cobertura noticiosa. También frenó con las acciones anticorrupción del estado y el caso de Computer Technology Associates quedó impune. Además, su viuda recibió cerca de $1.3 millones de dólares como compensación por la muerte de su esposo.
Sigue leyendo
El terremoto de Cascadia de 2001: el brutal sismo que nunca sucedió
Hannibal Lecter: la historia real del asesino mexicano que inspiró al famoso caníbal
Qué pasó con Benjamin Keough, el nieto de Elvis Presley que terminó con su vida
Chen Tao: el extraño culto que veneraba a los ovnis y creía que dios aparecería en la televisión
La dolorosa carta que unos padres escribieron a su hijo que fue víctima de bullying y se suicidó
