La Revolución Rusa: Del Zarismo al Totalitarismo Stalinista

A. Rusia antes de la Revolución

A.1. Demografía, Sociedad y Economía

El imperio ruso a principios del siglo XX era una potencia heterogénea étnico-lingüística y religiosa.

Población

En 1914, Rusia contaba con 175 millones de habitantes, la mayoría de los cuales vivía en el campo. Casi la mitad eran rusos de religión ortodoxa, base del Estado, la administración y la élite. Sin embargo, existía una gran diversidad étnica: ucranianos (eslavo-ortodoxos como los rusos), polacos, bálticos (letones, estonios, lituanos), finlandeses, pueblos del Cáucaso (armenios, georgianos) y asiáticos. Junto al ruso se hablaban otras lenguas y se practicaban religiones como la musulmana, la cristiana católica y la protestante.

Política

El Zar (=emperador) era un monarca absoluto por “derecho divino” que gobernaba ayudado por una poderosa burocracia civil y militar. Sus deseos eran la ley.

Sociedad

La sociedad rusa era muy desigual. La nobleza y el clero ortodoxo, junto con la corona, poseían la mayoría de la tierra (latifundios), mientras que la mayor parte de la población eran campesinos pobres (jornaleros o arrendatarios), con una minoría de campesinos autónomos o “kulaks”, más acomodados.

Economía

La economía rusa se basaba en una agricultura poco productiva, que mantenía técnicas arcaicas (hasta 1861 existió la servidumbre). La industrialización fue tardía, patrocinada por el Estado con capital franco-británico. Se concentró en las ciudades grandes europeas (Moscú o San Petersburgo) y zonas ricas en carbón y materias primas en Ucrania. En esas zonas se estaba formando una incipiente burguesía y un proletariado industrial.

A.2. Las Tensiones Políticas

La lenta modernización de Rusia se reflejó en el nacimiento de un movimiento cultural llamado “Intelligentsia” que criticaba la autocracia y el atraso del país.

En política existían varios grupos opositores:

  • Partido Constitucional-Demócrata (KD o “cadetes”): liberales burgueses que abogaban por una monarquía constitucional.
  • Partido Socialista Revolucionario (“eseritas”): populistas no marxistas, nacionalistas que defendían los intereses de los campesinos y pretendían un sistema agrario comunal (copia de la tradición rusa).
  • Partido Obrero Socialdemócrata Ruso: socialista marxista.

A.3. Lenin y la Formación del Bolchevismo

Lenin era el principal pensador revolucionario. En su libro “¿Qué hacer?” defiende la idea de convertir al partido en un instrumento de lucha que lidere la revolución.

El partido, según Lenin, debe ser una organización disciplinada de militantes-soldados que obedezcan las órdenes para luchar contra el capitalismo y la burguesía. El partido debe ser reducido (selección de los miembros) y jerarquizado. Los líderes (indiscutibles) tendrían el objetivo de conquistar el poder para implantar el “socialismo real” o comunismo, tras un periodo de “dictadura del proletariado”.

Lenin pensaba que la revolución, tal y como la entendía Marx, sólo triunfaría en naciones pobres como Rusia. En las naciones ricas, el “reformismo socialdemócrata” había perdido la fuerza revolucionaria y se había aburguesado.

Lenin consiguió el apoyo de los mayoritarios: bolcheviques, frente a los minoritarios o mencheviques.

A.4. La Revolución de 1905

En 1905, Rusia es derrotada militarmente por Japón. Fue una humillación para el Imperio y su ejército, y era la primera vez que una potencia europea era derrotada por una asiática en época moderna. Burgueses, obreros e incluso campesinos aprovecharon la situación para exigir cambios.

A principios de 1905, una manifestación obrera es duramente reprimida en San Petersburgo (“Domingo Sangriento”), lo que desencadenó huelgas y motines por todo el imperio. El Zar no tiene más remedio que ceder y concede libertades civiles y convoca la Duma (o parlamento), que redacta una constitución liberal-democrática. Liberales, socialdemócratas y “eseritas” participan en la Duma.

Sin embargo, en la práctica las promesas no se cumplieron. Se mantiene el poder del Zar y, aunque es un periodo de crecimiento económico, no es suficiente para calmar el descontento popular.

B. La Revolución Rusa de 1917

B.1. Rusia en la “Gran Guerra”

La Primera Guerra Mundial es una sucesión de derrotas para Rusia, que le producen millones de muertos, heridos y prisioneros. La economía (hambre, miseria) y el Estado se encuentran en una situación catastrófica. El descontento es general y burgueses, campesinos y obreros se movilizan frente a la incompetencia del Zar y su gobierno.

B.2. La Revolución de Febrero

El descontento produjo una manifestación espontánea de mujeres y obreros que exigen alimentos y combustible. Cuando el Gobierno intenta reprimirlos militarmente, los soldados se unen a las protestas. El Gobierno dimitió, el Zar abdicó y los diputados liberales de la Duma crean un Gobierno Provisional de coalición. Rusia se convierte en república liberal democrática y se convocan elecciones constituyentes.

Pero la situación es muy inestable. Hay dos poderes: el Gobierno Provisional (Kerensky), donde socialdemócratas y liberales trabajan por una democracia; y en las ciudades se han formado soviets (=asambleas) de campesinos, soldados y obreros dominadas desde el principio por los bolcheviques (=comunistas), como por ejemplo Trotski en Petrogrado.

Alemania aprovecha la situación y llega a un acuerdo con Lenin, que estaba exiliado en Suiza. Le facilitará el retorno a Rusia para que saque a esa nación de la guerra.

Para Lenin la guerra es una cuestión secundaria, lo importante es triunfar e instaurar la dictadura del proletariado. Con un partido minúsculo (80.000 militantes en una nación de 175 millones), defiende un programa simple que satisface las exigencias de la mayoría de la población: Paz, Pan y Tierra.

  • Paz: acabar la guerra ya, rompiendo los acuerdos con los aliados.
  • Pan: el Estado garantizaría los abastecimientos regulando el mercado y nacionalizando fábricas y comercio.
  • Tierra: reparto de los latifundios entre los campesinos sin indemnización.

Además, propone suprimir toda la burocracia existente. En la segunda fase del proceso, su consigna es “¡Todo el poder para los soviets!”. Consigue formar un “Congreso General de los Soviets de todas las Rusias”, y aunque los comunistas no tienen al principio la mayoría, como son el único grupo disciplinado lo controlan fácilmente.

B.3. La Revolución de Octubre

En el verano de 1917 fracasó un intento de golpe de estado militar contrarrevolucionario. El Gobierno Provisional de Kerenski salió debilitado y, frente a la amenaza revolucionaria, ya no tenía un contrapoder. La guerra, el hambre y la llegada del frío facilitaron la revolución de octubre: golpe de estado revolucionario bolchevique. Lenin constituye el “Consejo de comisarios del Pueblo” (= nuevo gobierno) y controla las comunicaciones, fábricas de electricidad, transportes… y se prepara para dominar el país.

No puede anular las elecciones, pero mina su legitimidad, porque “sólo los soviets (=asambleas dominadas por los bolcheviques) representan al pueblo”. Apenas tuvieron el 20% de los votos (ganaron los “Eseritas”). Lenin disuelve la Asamblea Constituyente e instaura una dictadura del partido bolchevique, autocalificado como “vanguardia de la clase obrera”. Inició la persecución de los enemigos del pueblo: burgueses, religiosos, anarquistas… y todos los que no eran comunistas.

C. La Consolidación del Régimen Soviético

C.1. Los Primeros Pasos del Régimen

Tras un golpe de estado, disuelve la Asamblea Constituyente y se implanta la dictadura del proletariado con régimen de partido único: Partido Comunista. La Paz de Brest-Litovsk con Alemania y sus aliados fortaleció a Lenin.

Paralelamente, había una guerra civil entre los comunistas y los “rusos blancos” (antirrevolucionarios), apoyados por Reino Unido, Francia, Estados Unidos y Japón. Pero los “blancos” estaban divididos entre sí y no tenían ni líder ni referente (la familia imperial había sido asesinada). Trotski creó el Ejército Rojo, disciplinado y muy ideologizado. Así vencieron a los blancos y a los independentistas de Ucrania, el Cáucaso…

En 1919, Lenin creó la III Internacional o Komintern, que era la nueva internacional que unía a los partidos comunistas de todo el mundo. Era una organización disciplinada que seguía las órdenes de Moscú. Donde fracasaron fue en el intento de exportar la revolución al extranjero, tanto en Hungría, Finlandia, Polonia como Alemania.

C.2. Del “Comunismo de Guerra” a la NEP (Nueva Política Económica)

En plena Guerra Civil (1918-21), Lenin creó el primer Estado de Partido Único de la historia. Implantó el “comunismo de guerra”: nacionalización de industrias, transporte, comercio, tierra y escuelas. Los efectos fueron desastrosos: más de 5 millones de muertos de hambre y frío, reducción del 50% de la cosecha de cereales… y resultados mucho peores en la industria y el comercio.

Ante el fracaso, en 1921 se establece la NEP o Nueva Política Económica (1921-28), que permite a los campesinos cultivar individualmente el campo y vender sus cosechas en el mercado. El retorno controlado a la economía de mercado fue un éxito: se recuperó la producción agraria e industrial a los niveles de la anteguerra y ya no había problemas de abastecimiento. El Estado seguía controlando la banca, el ferrocarril, las grandes empresas, el comercio exterior… Pero la aparición de una incipiente clase emprendedora en el campo y la ciudad despertó las reservas del PCUS porque acababa con la igualdad social prometida.

Políticamente se estaba creando un “hombre nuevo”. En teoría, era una sociedad gobernada por los obreros y los campesinos libres de ataduras (=capitalismo, religión, propiedad…). Aunque en la práctica el poder era ejercido por los “Bolcheviques” (=PCUS), que eran la “vanguardia de la clase obrera”. Desde el primer momento, la represión de todo tipo de oposición real o imaginaria es total: burguesía, iglesia, nobleza, minorías, anarquistas, socialistas… Paralelamente, aparecía una burocracia formada por profesionales que controlaba al Partido, y a través de él al Estado, las Fuerzas Armadas, la economía y la sociedad (incluso las organizaciones sociales que son instrumentalizadas políticamente)… y todo acaba confundiéndose.

C.3. La Sucesión de Lenin

En estos años, el poder dentro del partido quedó en manos de los burócratas o apparatchik. Gracias a ello, Stalin se convirtió en Secretario General en 1922. Por su cargo, controlaba el correo de Lenin (que vivía enfermo y retirado), y controlaba informes y nombramientos en el partido.

En 1922 se fundó oficialmente la URSS, Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (en teoría, por libre asociación de “repúblicas hermanas” del antiguo imperio ruso). Entre tanto, habían fracasado las revoluciones comunistas en el resto de Europa.

Cuando murió Lenin en 1924, los dirigentes del partido tenían dos posturas:

  • Trotski quería internacionalizar la revolución porque sólo así podría sobrevivir el régimen soviético. De lo contrario, se implantaría una dictadura burocrática dirigida por “arribistas” (gente que hace carrera sin ser verdaderamente bolchevique). Criticaba también la continuidad de la NEP.
  • Stalin, por su parte, defendía la NEP (de momento, para acabar con la hambruna), la burocracia como elemento indispensable para gobernar al país y su economía, y el “socialismo de un solo país” (primero consolidar al estado soviético). Stalin tenía la ventaja de haber controlado los nombramientos en el Partido y que no tenía grandes enemigos, Trotski sí.

D. La Era Stalinista

D.1. Industrialización y Colectivización

Stalin suprimió la NEP para convertir a la URSS en una superpotencia que pudiera sobrevivir en un mundo capitalista hostil. Para ello, programa la estatalización de la economía con las siguientes medidas:

  • Planificación central de la economía por el Estado. La modernización rápida llegaría gracias a una “economía dirigida”. Sería una operación difícil, porque la URSS carecía de fuentes de inversión propias o de inversiones extranjeras, sólo se disponía de la exportación de materias primas y/o alimentos y el sacrificio del pueblo. Desde el Gobierno, el Gosplan (Comité General de Planificación Estatal) establecía objetivos, precios, cuotas de producción y crecimiento, salarios, distribución de los recursos y objetivos. En 1928 se promulga el primer Plan Quinquenal de obligado cumplimiento (se establecieron sanciones a los incumplidores).
  • Colectivización forzosa de la agricultura. Obligatoriamente, los campesinos tuvieron que entregar sus tierras a granjas colectivas autónomas (=Koljoses, y se convertían en cooperativistas que vendían o entregaban la producción al Estado) o a granjas estatales (=Sovjoses, asalariados del Estado). La resistencia campesina fue muy fuerte, pero fueron aplastados sin piedad. En 1930, el 90% de los campesinos habían sido colectivizados. Y aunque aumentó la producción, los rendimientos no fueron los esperados. Sólo en Ucrania hubo 6 millones de muertos por hambre. También hubo deportaciones masivas.
  • Industria. Fue el sector privilegiado al que se dedicaban todos los recursos (era imprescindible para que la URSS fuera potencia militar, y así se fortalecía a la clase obrera). Se desarrolló sobre todo la industria pesada (siderurgia, cemento, eléctricas), frente a las de consumo. Gracias a las deportaciones de población, a los salarios bajos y a unas tasas de explotación laboral duras se consiguieron resultados notables. El Primer Plan (1928-32) destinó a la industria el 80% de los recursos, consiguiendo grandes resultados en obras públicas y aumentando la renta en un 9%. El Segundo (1933-37) se dedicó a la energía, el transporte y las industrias ligeras, fue la época del “estajanovismo” (sistema de compensaciones morales a los obreros o fábricas más productivos). El Tercer Plan (1938-42) se centró en la industria química… pero no se aplicó en su totalidad por la invasión nazi de 1941.

BALANCE

La economía soviética creció en los años 30 de manera espectacular (65% del PIB en 10 años), mientras el capitalismo atravesaba la Gran Depresión. Pero, las condiciones de vida eran muy malas, sobre todo en el campo, y muchos de los datos oficiales no eran del todo ciertos.

D.2. El Poder Personal de Stalin

Stalin era el líder único de la nación, el estado y el partido, concentraba todo el poder y sus deseos eran la ley (por encima del poder que habían disfrutado los zares). Stalin controlaba al Partido, y este al resto del Estado y al pueblo, configurando el primer régimen totalitario moderno. Con la excusa de que eran “enemigos del pueblo”, eliminó a sus enemigos reales o imaginarios (trotskistas, contrarrevolucionarios, espías…). Previamente, había purgado al PCUS (Partido Comunista de la Unión Soviética), con los “procesos de Moscú”, luego a los mandos militares (grave problema en 1941). En el Partido, el Estado o entre el pueblo, el terror indiscriminado era un arma en manos de la policía política (KGB ó NKVD). Eliminó toda resistencia: juicios amañados, fusilamientos… y deportaciones de los presos políticos a los Gulag (campos de trabajo y reclusión en los territorios inhóspitos del este). Sólo hasta 1939 hubo 1.3 millones de presos (después de 1945 hubo muchas más) y 780.000 asesinatos.

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