České Budějovice, la capital de Bohemia del Sur, está situada estratégicamente entre dos etapas imprescindibles de cualquier viaje por República Checa: Praga y Český Krumlov. Eso la convierte, a menudo, en una parada relámpago o, incluso, si no hay tiempo para desvíos, simplemente en un nombre en un cartel en la carretera. Pero yo la recordaba con cariño de un viaje con mis padres hace eones –¡más de veinte años!– y no quería que se quedara solo en el recuerdo. Esa enorme plaza de antiguos edificios descoloridos me volvía a llamar… y respondí a la llamada. Ahora esos edificios tienen colores brillantes –República Checa no es la que era a finales del siglo XX– y a su recuerdo he añadido algunos más. Porque la capital de Bohemia del Sur no es solo una plaza: ya verás que hay unas cuantas cosas más que ver en České Budějovice.
Aunque no es la ciudad más monumental de República Checa, todavía conserva edificios medievales –fue fundada en el siglo XIII–, además de otros renacentistas y barrocos. Y no todo son monumentos…
Su historia está muy ligada a la cerveza: en el mismo año de fundación se le otorgó el derecho real de fermentarla. Esa tradición sigue muy viva hasta hoy en día: hay seis fábricas de cerveza en la ciudad, incluyendo la gran Budějovický Budvar. Asi qué, si eres amante de la birra, ya tienes una razón más para ir. Y, si no, en las cervecerías –que también te recomendamos visitar en České Budějovice– se come genial.
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Aprovecha tu paso por la región y echa un vistazo a nuestro artículo con los imprescindibles que ver en Bohemia del Sur. Y, como sabemos que irás… aquí tienes nuestros lugares que ver en Český Krumlov.
La plaza mayor: lo primero que ver en České Budějovice
No me extraña que quedara grabada en mi memoria, una de las plazas más grandes de República Checa no se olvida fácilmente. No vamos a ser originales y te vamos a decir que lo primero que tienes que ver en České Budějovice es su plaza mayor: Náměstí Přemysla Otakara II. ¿Quién es Přemysl Otakar II? Pues Ottokar II de Bohemia, el rey que fundó České Budějovice allá por 1265 en la confluencia de los ríos Moldava y Malše. Desde entonces esta plaza, de 132 x 137 metros –no es cuadrada por poquito–, ha sido el corazón de la ciudad.
En el centro está el símbolo de České Budějovice: la fuente de Sansón. Y entre los 48 edificios que la rodean hay unos cuantos que llamarán tu atención. Uno será el neorrenacentista Palác Včela, en la esquina con la calle Carlos IV. Frente a él, el gran edificio gris, con su fachada barroca, sus escudos, sus tres torres y sus grandes estatuas en la balaustrada, es el ayuntamiento. Como curiosidad, el listón de hierro incrustado en el pilar de la esquina tiene la longitud de un codo vienés –77 cm– y se utilizaba como medida para la venta de telas en el mercado.
En el ayuntamiento está la oficina de turismo, donde se pueden reservar visitas al interior del edificio, con sus salas nobles, sus vistas y los originales de las estatuas de la balaustrada y de la fuente de Sansón. Cuando fuimos nosotros no era temporada de visitas, pero tú inténtalo.
¿Sabías que…?
Cerca de la fuente está la “Bludný Kámen”, algo así como la “piedra errante”: si la pisas vagarás por la ciudad sin encontrar tu casa hasta el día siguiente. ¿Tendrá la cerveza algo que ver?
Las vistas del casco histórico desde lo alto de la Torre Negra
Curiosamente, la catedral de České Budějovice, dedicada a San Nicolás, no está en la plaza mayor, aunque sí está casi pegada a una de sus esquinas. Lo más interesante de la catedral es su torre campanario que ni siquiera forma parte del mismo edificio: está separada. Algo muy poco común en República Checa, pero es que los maestros constructores que la levantaron a mediados del siglo XVI eran paisanos míos, “italianos” –entre comillas, porque Italia no existía–.
La torre en cuestión es la Torre Negra –Černá věž–, una torre de más de 72 metros con doble función. Por un lado era el campanario de la iglesia, sigue teniendo sus campanas –la más grande la Bummerin, de 3,5 toneladas y la más “jóven”, de 1995, Budvar–. Y, por el otro, era una torre de vigilancia contra incendios. El guardia vivía aquí con su familia y hasta con animales domésticos: ¡parece que incluso tenían una cabra para la leche! El último guardia-bombero se retiró en 1950.
Se puede subir hasta el mirador en su galería. Las vistas de České Budějovice, tanto del casco histórico como de la periferia y alrededores –se llega a ver la fábrica de Budvar y el castillo de Hluboká– son muy bonitas. Eso sí, hay que subir 225 peldaños, la mayoría de madera. Nos hizo gracia que, cuando faltan 15, te dan ánimos. En esta página tienes los horarios y precios actualizados –está en checho, pero Google Translate ayuda–.
La Plaza de los Escolapios y la Iglesia del Sacrificio de la Virgen
Otro de los rincones más bonitos de České Budějovice es la Plaza de los Escolapios –Piaristické náměstí–, donde nos encontramos con un pequeño mercado de productos locales en el que nos habríamos comido todo.
El nombre se lo da el Monasterio del Sacrificio de la Virgen que se empezó a construir el mismo año de la fundación de la ciudad, 1265, y formaba parte de su fortificación. La iglesia gótica del monasterio, con sus frescos de los siglos XIV-XV –incluyendo unas figuras de santos de diez metros de altura– y su claustro ajardinado, es otro de los lugares que te recomendamos visitar en České Budějovice. Un sitio, además, casi escondido y al que no llegan muchos turistas.
¿Sabías que…?
Si te fijas en el muro exterior de la iglesia, verás una pequeña rana esculpida. Se dice que va subiendo y, cuando llegue al techo, la iglesia se destruirá y llegará el fin del mundo.
En la misma Plaza de los Escolapios nos llamó la atención un enorme edificio blanco con techo a dos aguas muy pronunciado y pequeñas ventanas. Es el antiguo almacén de sal, el Solnice. Se construyó a principios del siglo XVI en estilo gótico y, antes de ser almacén de sal, fue arsenal, depósito de pólvora y granero. En la fachada hay tres caras de piedra que, según la leyenda, son de los tres ladrones que intentaron robar en la iglesia en 1724. Fueron decapitados, pero han pasado a la historia…
Los ríos Moldava y Malše, el río, sus vistas y sus fortificaciones
El casco histórico de České Budějovice está casi completamente rodeado por el canal Mlýnská stoka. Aquí es donde se encontraban las fortificaciones levantadas en la Edad Media. Todavía quedan dos torres góticas: la Rabenštejnská y la Železná panna –Doncella de hierro en castellano, por el instrumento de tortura medieval de este nombre que, según la leyenda, se usaba en su cámara de tortura–. Acércate, además de ser dos de los rincones con más encanto de la ciudad, las calles que llevan hasta ellas, Pánská y Biskupská respectivamente, son de las más bonitas del casco histórico.
Tampoco dejes de cruzar los puentes, como el de la calle Hronznová, para tener las vistas del casco histórico desde el otro lado. Incluso puedes coger, desde el bar VLNNA, un barco para dar un paseo por los ríos Moldava y Malše. Nosotros no lo hicimos, pero aquí tienes más información, si te interesa.
La visita a la fábrica de cerveza Budvar (ex Budweiser)
České Budějovice, junto con Pilsen y Brno, es una de las capitales cerveceras históricas de República Checa, que no es moco de pavo. De hecho, aquí está una de las cervecerías más famosas e importantes del país: la Budějovický Budvar. La buena noticia es que se puede visitar: hay tours de una hora en diferentes idiomas, castellano incluido. Nosotros, incluso sin beber, no nos lo hubiéramos perdido si hubiera estado abierta cuando fuimos… pero justo pillamos un periodo de cierre de las visitas guiadas. Echa un vistazo a su página oficial para consultar los precios y horarios.
¿Sabías que…?
Hasta hace unos años, el nombre de esta cervecería y de su cerveza era Budweiser. České Budějovice en alemán es Budweis y el alemán era el idioma hablado por la mayoría de la población local en 1895, cuando se fundó la empresa. Vamos, que Budweiser era, además de una marca, una especie de “denominación de origen”. Eso sí, unos años antes, en 1876, se había empezado a producir otra cerveza con el mismo nombre en San Luis, Misuri. Sus fundadores, de origen alemán, se dirigían al público germano-estadounidense y Budweiser les pareció buena opción. Era el germen de Anheuser-Busch, la multinacional cuya marca Budweiser se convertiría en la más vendida de EEUU. Desde hace más de un siglo, 1907 para ser exactos, las dos empresas han tenido decenas y decenas de pleitos en países de todo el mundo por la utilización de la marca Budweiser. Finalmente, ha ganado la más antigua, por eso la marca checa ahora es Budvar.
Qué visitar cerca de České Budějovice: el castillo de Hluboká
Hemos dicho que hablaríamos de lugares que visitar en České Budějovice, pero permítenos que salgamos un poco de la ciudad. Te prometemos que no nos alejaremos mucho: solo 10 km, unos 15 minutos en coche. Este pequeño “viaje” merece la pena para llegar al castillo de Hluboká, una locura de palacio romántico inspirado en el castillo de Windsor, pero que a nosotros nos recordó mucho más al Palacio de Cibeles de Madrid. Nos gustó tanto que le hemos dedicado un artículo a él solito, si te pica la curiosidad, aquí lo tienes: El castillo de Hluboká nad Vltavou, el Palacio de Cibeles checo.
Dónde comer en České Budějovice: restaurantes y cervecerías
No visitamos la fábrica de cerveza Budvar, pero no dejamos de ir a cervecerías en České Budějovice. Y eso a pesar de que no bebamos. ¿Por qué? Porque, además de ser el mejor sitio para tomarse una birra, también son el mejor sitio para probar comida típica checa. Todo el mundo nos aconsejó el Masné krámy y allá que fuimos. Y bien que hicimos: estaba todo para chuparse los dedos. Si solo comes una vez en la ciudad, no dudes en hacerlo aquí. Por cierto, sirven Budvar.
También comimos en el Solnice, el antiguo almacén de sal de la ciudad, hoy convertido en cervecería. La cerveza la producen en otro local cercano, en la calle Hroznová, una pequeña y nueva cervecería local que usa el método tradicional. El restaurante-cervecería y la fábrica de cerveza están conectados con tuberías subterráneas por las que la cerveza llega directamente, sin pasar por los barriles. La comida aquí también está muy rica.
En el restaurante del hotel donde dormimos, Klika, también se come bien y barato. Otra buena opción si te quedas más tiempo en České Budějovice.
Dónde dormir
Como decíamos, nosotros dormimos en el Hotel Klika. Su ubicación es ideal, en pleno casco histórico, muy cerca de la plaza mayor. Otras ventajas son que tiene aparcamiento gratuito para clientes y que el desayuno está rico –ya dijimos que tiene buen restaurante–. Eso sí, las habitaciones necesitan un poco de renovación –y las toallas también–. Si buscas un hotel correcto, en buena posición y económico, es una opción muy válida. Aquí puedes consultar precios y disponibilidad y aquí la de otros hoteles en České Budějovice.
Mapa con los lugares que ver en České Budějovice
Solo falta la guinda del pastel: nuestro habitual mapa con todos los lugares que visitar en České Budějovice de los que te hemos hablado. Que no se diga que no te lo ponemos fácil.
Ya no falta nada para irte a tomar una Budvar –o, como en nuestro caso, un buen plato de ternera guisada con ella– en České Budějovice.
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